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El Heraldo de Cristo 1971, n. 741

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LOS AMIGOjS DE NUESTRAS MISIONES
321..^»——PUUannrEspecialmente entre nuestros queridos seglares franciscanos sigue demos¬
trándose que no son pocos los auténticos amigos de nuestros misioneros y de las necesidades que existen en las distintas parcelas de la Viña del Señor confiadas por la iglesia a la T. O. R. en lugares difíciles del Perú y del Brasil.
Nuestro Procurador Provincial de Misiones, Fr. Jaume Tugores, ha continuado recibiendo importantes donativos; tanto para Poconé (Brasil) como para otras pe¬ rentorias exigencias de nuestro apostolado misionero en el Perú.
En otro número, D. m., concretaremos algunos de esos donativos, según ya hicimos en octubre de este mismo año. Hoy sólo tenemos espacio para ofrecer
a nuestros lectores estas otras noticias:
buen sacerdote de la diócesis mallorquina se ha convertido en bien¬ hechor insigne de nuestras misiones al entregar la cantidad de 50.000 pesetas al mencionado Procurador Provincial. Este, en nombre de la Provincia, de los misio¬ neros y de los cristianos —o paganos— pobres que van a beneficiarse de dicha cantidad, reitera el testimonio de su profunda gratitud al ya referido Ministro del Señor, mientras le pide al Dador de todo bien que recompense con creces la generosa y ejemplar ayuda del espléndido Presbítero mallorquín.
los ventanales de la sencilla Catedral que está acabando en Huamachucu (Perú) su Obispo, Mons. Damián Nicolau, T. O. R., han llegado nuevas e interesantes aportaciones.
devota terciaria ha accedido gustosamente al ruego que le hiciera nuestro ya citado Procurador: regalar un Sagrario para la iglesia que están levan¬ tando en una humildísima barriada de la periferia de Trujillo (Perú) los PP. Nadal Fluixá Caldentey, Párroco, y José Gelabert Ferrer, Coadjutor. El primero, de Ariany; el segundo, de otro villorrio mallorquín: Pina.
Dicho Sagrario es el que aparece reproducido en el grabado adjunto y tiene las siguientes características: es de metal plateado y oxidado por la parte exte¬ rior. Tiene una sola puerta, y en ella se pueden apreciar las alegorías de «Pax», los peces y el pan en esmalte con colores propios. Medidas: 36 ctms. ancho; 24 ctms. alto; 20 ctms. fondo. Interior: dorado barnizado. ¡Señor, bendice genero¬ samente a la madre de familia que ha costeado este Sagrario para que Tú pue¬ das estar eucarísticamente entre tus pobres de Trujillo!

revista mensual de los P P. FRANCISCANOS DE LA T. O. R
DICIEMBRE 1971
Año LXII - Núm. 741

REDACCIÓN Y ADMÓN:
CONVENTO DE SAN FRANCISCO
TELÉFONO 212695 PALMA DE MALLORCA

•

DIRECTOR: P. MIGUEL COLOM MATEU, T. O. R.
ADMINISTRADOR: Fr. JAUME TUGORES MESTRE, T. O. R.

•
CON LICENCIA ECLESIASTICA

•
IMPRESIÓN: ARTES GRÁFICAS GIMÉNE2
•
PRECIOS DE SUSCRIPCIÓN:

ORDINARIA. BIENHECHOR PROTECTOR

. . 75 PTAS

100 ...

€

500 ...

DEPÓSITO LEGAL P M. 340 -1958

NUESTRA PORTADA

lea en e$9te nüimeroi

Ciencia e Iglesia

El Sello de los antiguos Terceros Regula¬

res españoles ......

A Maria en el Misteri de la seva Purissima

Concepció (poesia)

Jaque a la enseñanza privada ... 7

México

Postal de Navidad

Un Salvador

Fisonomía de San Francisco

...

Página literària

La SibiNa

Doctorat de Teresa d'Avila i Caterina de

Sena (poesia)

Navidad: Ante todo, buscar la paz inte¬

rior

Nuestras misiones

Nuevos misioneros

Nuestra pequeña historia .... 22

Viejecitos

Página del terciario

La T. O. F. hace cincuenta años ... 28

Chistes

PLANA CON EL COMIENZO, LETRA Y MÚSICA, DE LA SIBIL·LA (De un li¬

bro coral, manuscrito, primera mitad del s. XV, procedente del monasterio de la Concep¬

ción, antes Santa Margarita, depositado ahora en el Museo Diocesano de Mallorca). —&

fácil imaginar ante éste mismo pergamino el blanco óvalo facial, circunscrito por la toca, de alguna

Sor Margarita, ^hona cantora», que lo ^jorn de Nadal”, a la luz rojiza y temblorosa del candil, va

desgranando un poco emocionada las viejas notas gregorianas de la profecía sibilina.

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PALMA DE MALLORCA

(FRENTE A LA DIPUTACION) -PALMA

EDITORIAL
CIENCIA E IGLESIA
«Los átomos de la materia están constituidos por un núcleo de pro¬ tones con carga eléctrica positiva y un conjunto de neutrones de carga eléctrica nula. En torno al núcleo giran electrones con carga negativa. Si se diera el átomo dotado de signos contrarios, es decir, con electro¬ nes de carga positiva que giren en torno a un núcleo de carga nega¬ tiva, nuestra materia estaría como enfrentada a otra cuyos elementos estarían ordenados, en cierto modo, de forma completamente opuesta a nosotros y a nuestra materia».
Así explicaban los periódicos el novísimo descubrimiento de los científicos rusos, el aislamiento de la antimateria, capaz de producir energía suficiente para poder alcanzar velocidades similares a las de la luz. (Posteriormente hemos visto aclarado que hace más de diez años era ya conocida la realidad física de la antimateria).
De este modo la ciencia profana, sorpresa tras sorpresa, nos mues¬ tra su incesante y armónico avance hacia metas de cada vez más ma¬ ravillosas. Para citar sólo lo más reciente: la radio y la televisión, los satélites artificiales, las naves del espacio, los desembarcos en la luna, los últimos premios Nobel de física, química y medicina; y ahora la
antimateria.
Es ciertamente confortador ver cómo, en estos difíciles tiempos, no todo es «hippismo», divertirse en discotecas y salas de fiesta o albo¬ rotar en campos de deporte. Hay una parte de la humanidad que se toma la vida en serio, que trabaja y estudia para el bienestar común y el perfeccionamiento hum.ano.
Y viene espontáneamente la tentación de com..parar el hecho a que acabamos de referirnos, con lo que ocurre en el campo de la ciencia eclesiástica y del progreso espiritual del Pueblo de Dios.
Uno se pregunta: ¿no desconcierta un poco que la Iglesia fundada por Jesucristo, que es Dios, gobernada por los apóstoles y discípulos del mismo Jesucristo y por la ininterrumpida serie de sus legítimos sucesores, una Iglesia testimoniado, con la sangre de millones de már¬ tires, acérrimamente defendida por los santos Padres, dilatada por los confines de la tierra por obra de los misioneros, enriquecida con las virtudes y santidad de los fundadores y de las grandes multitudes de sus hijos, vivificada en repetidos Concilios generales, regida siempre e iluminada con la luz d.el Espíritu Santo, no es desconcertante, piensa uno, que esta Iglesia, después de veinte siglos de florecimiento, se en¬ cuentre de pronto en la necesidad de sufrir, como cualquier China po¬ pular, una verdadera «revolución cultural»? ¿No le ha de pasar al Pue¬ blo de Dios algo como a quien, creyéndose rico, se le dice sin más que muchas de sus monedas son falsas, que gran cantidad de sus billetes no tienen ya curso legal? De veras, no lo comprendemos muy bien.
Pero apresurémonos a declarar, para que no se tergiverse nuestro pensamiento, que no decimos que sea el agua que mana de la legítima fuente la que viene turbia. La contam.inación se produce, en todo caso, cuando a aquel límpido arroyo se le juntan otros de no tan segura pro-
fContinúa en la pág. siguiente)
3

EL SELLO DE LOS ANTIGUOS TERCEROS REGULARES ESPANGLES

«Es de fama, público y notorio» que Pontífices y Reyes, Señores y Prelados; Jueces y Corregidores, etc., para dejar
más asentada la autenticidad de sus Bu¬
las, Cédulas, Patentes, Edictos, etc., y pa¬
ra acrecentar la autoridad de dichos do¬
cumentos, acostumbraron estampar al pie de los mismos su SELLO. Y eso aun después de declarar que aquéllos iban escritos de su puño y letra. «Las presen¬ tes... firmadas de propia mano y SELLA¬ DAS con el SELLO MAYOR de nuestro oficio... etc.», leemos en un instrumento de Reducción de Misas, del Convento del Cerezal, año de 1756, que vimos en el A. H. N., Sección Clero, León, Cerezal, Leg.
2.539.
El SELLO viene a ser como el atribu¬ to o señal externa de la Jurisdicción, Autoridad o Ministerio que tiene o ejer¬
ce el que lo usa. Por eso, aún hoy en nuestra Orden la proclamación de nues¬ tros Prelados Mayores se hace con la ce¬ remonia de entregar a los canónicamen¬ te elegidos, el SELLO de la Orden o Pro¬
vincia.
Si variante era el ESCUDO de las Pro¬ vincias de Terceros Regulares españoles (HERALDO, sepbre. 1971), tampoco fue uniforme el SELLO con que sus Prela¬
dos autorizaban sus Patentes y Ordena¬
ciones.
Digamos, ante todo, que había SELLO MAYOR y MENOR, distintos no sólo por

su tamaño, como indica el apelativo, si¬ no también por su forma y contenido: empleando el uno o el otro según la dignidad e importancia del Documento.
El MAYOR de la Provincia de León
(fig. 1) era de forma ojival, de unos 70 x 45 mm. Su campo está ocupado por la escena de la impresión de las llagas de
San Francisco, y a mano derecha un ci¬ prés; en su punta inferior se distinguen las mayúsculas P. L. G. (que interpre¬
tamos: Provincia León-Galicia). Lleva por

(Viene de lo pág. onteriori

CIEIICIA K IO-IíESIA

cedencia. Pues estamos viviendo un tiempo, no nos cansamos de repe¬ tirlo, de una pavorosa obnubilación. Se va creando un clima de tal
frialdad espiritual como para helar la sangre en las venas y en el co¬ razón. Una temperatura que parece calculada, para el progresivo desa¬ rrollo del indiferentismo o del ateísmo. Efectivamente, se necesita re¬ torcer de continuo el entendimiento para obligarle a no ceder el terre¬
no a la duda, a no introducirse en la angustiosa desconfianza de todo.
Causa no poca perplejidad dar en cada esquina con un «profeta» que anuncia y practica sus audacias y hace «aggiornamento» a la me¬ dida de su gusto particular. El Pueblo de Dios está padeciendo hoy una verdadera epidemia «de profetismo»y «carismatismo». Si esto no es una nueva alienación, poco debe faltar.
Esperemos que algún día cese ya ese empeñado y largo trabajo de desbroce, que se expresa con palabras de prefijo negativo: desmitifi¬ car, desclericalizar, desacralizar. Y que obtenida la total secularización, estado que con tanto ahinco propugnan ciertas revistas católicas, lim¬
pia de toda «maleza» la viña del Señor, se empiece a ver más labor de
signo positivo.

leyenda: + SIGILLUM TERTII HORDINIS SANCTI FRANCISI (sic.) Va to¬ do orlado por el cordón franciscano.
El MENOR, de forma ovalada (30 x 23 mm.), lleva un cetro flor de lis, timbra¬ do por corona ducal; adiestrado por cin¬ co llagas sangrantes y siniestrado con cinco lises colocadas en aspa, al igual que las llagas. Su leyenda dice: MIN. PLIS. 3. ORDIN. S. FRANCISCI; orlado todo por el cordón franciscano (figura 2).

NATENSIS. Su tamaño es igual al me¬ nor de la Provincia de León y, como el
anterior, orlado todo por el cordón fran¬ ciscano (figura 4).

Fig 2
En la variante del SELLO MAYOR de la Provincia de Andalucía vemos un frai¬
le testigo de la impresión de las Llagas; faltando el ciprés y las mayúsculas P. L. G. de la punta inferior. Pero, en cambio, en la parte superior derecha hay tres flo¬ res de lis colocadas en arco. La leyen¬
da reza: SIGILLUM TERTII ORDTNTS S. FRANCISCI PROVINTIAE BAETI¬
CAE (figura 3).

Fig. 4
Los que hayan pasado los ojos por
nuestros escritos tendrán noticia de que
en Portugal existió una muy próspera provincia de Terceros Regulares que, en algún periodo de su historia, formó par¬ te de la Congregación Española de la Ter¬ cera Orden Regular de Penitencia de S.
Francisco.
Esta Provincia tuvo, por tanto, sus propios SELLOS; el MAYOR de los cua¬ les desatibe el P. Bartholomeu Ribeiro en su obrita «Guía del Portugal Francis¬ cano», del año 1946.
De forma ojival y tamaño como los anteriores, hay en su campo «S. Francis¬ co arrodillado en un monte, sobre el cual hay una capillita y un ciprés. En el re¬ mate superior, un pequeño escudo con las tres flores de lis (1). Su leyenda di¬
de: SIGIL. M. P. 3. ORD. Poenit. S. FRANC. PORTUG. Todo circundado por el cordón de S. Francisco».
Como la enseñanza gráfica excede con gran ventaja toda literatura, ofrecemos a nuestros lectores las adjuntas imáge¬ nes, de las cuales la número 1 es foto¬ copia del ESCUDO MAYOR que figura
adherido en el Documento citado arriba
en el texto; y las número 2, 3 y 4 son dibujo que D. Ignacio Furió nos ha sa¬ cado de unas muy borrosas y ya mata¬ das improntas que, a falta de mejores, guardamos celosamente.
P. Francisco AMENGUAL, T. O. R.

El MENOR de esta misma Provincia
tiene su campo ocupado por una Virgen con el Niño en brazos y su leyenda di¬
ce: PROVINCIAE BAETICAE ET GRA-

(1) En el que nosotros poseemos, idén¬ tico a otros que vimos en un «MS. VERMELHO», de la Biblioteca de la Real Academia de Ciencias de Lisboa, este escudito está en la punta inferior, fal¬
tando también el cordón franciscano.

Ha començat la celebrado del cinquantenari de la mort (16 d’octubre de Vany 1922) de Valtís¬ sim poeta pollencí Mn. Miquel Costa i Llobera. Sigui la inserció del següent poema el comença¬ ment del nostre petit homenatge.

^ MARIA EN EL MISTERI DE LA SEVA
PURISSIMA CONCEPCIO

Pura com ploma Vàngel és la neu qui resplendiex al sol, mai trepitjada; però més pura sou als ulls de Déu,
oh Immaculada!

Si l’excelsa milícia angelical
Reina vos diu i servitud vos mostra,
de la família sou del trist mortal,
oh Mare nostra!

Net és el cel si pel claríssim blau
ni una boirina volandera sura;
però més neta excelsitud mostrau, oh tota pura!
Lliri entre espines a l’ermàs aspriu
amb son aroma els viadors encanta;
talment entre les verges Vós floriu,
oh tota santa!

I bé que ho sou: en tanta excelsitud nostres misèries no mirau esquiva, Vós qui, sens culpa, el plor heu conegut,
oh compassiva!
Doncs en la vall de llàgrimes i mort a Vós cridam els desterrats fills d’Eva que heretàrem la culpa i la dissort
d’Adam i seva:

D'Adam nasquéreu en el tronc danyat, única flor del Paradís novella, tal que en Vós Fruit diví n’ha germinat,
oh tota bella!
Filla, prodigi august del Creador; Mare, ideal del Déu-Saviduria; Esposa, encant de VEsperit d’Amor,
sou, oh Maria!
Per Reina dominan tot l’univers
amb dolça majestat consoladora, només terrible a l’esperit pervers,
oh vencedora!

a Vós, única exempta d’aquell mal, qui, honor de nostra sang purificada, l’altiva testa del dragó infernal
heu trepitjada.
Mirau com de nou brinda la serpent
fruit seductor a l’arbre de la ciència; salvau-ne, doncs, la pertorbada gent,
mar de clemència!
Salvau els que, entre culpes i perills, a vostres ares humilment s’acosten, i els que en defugen: que també són fills
qui tant vos costen.

1, entre la pompa del solemne jorn amb què avui vostra glòria hem celebrada, senyau al poble de tot bé el retorn,
oh Immaculada!
Miquel COSTA I LLOBERA (1854-1922)

JAQUE A LA ENSEÑANZA PRIVADA

Nos resistimos a marginar el apasio¬
nante tema de la enseñanza por cansan¬
cio como alguien ha afirmado, cuando en realidad dehería hablar que de lo que carece es de una argumentación seria, honrada y documentada. No soluciona¬ rán los problemas que la enseñanza plan¬ tea unas gacetillass jocosas y malinten¬
cionadas o unas insinuaciones de mar¬
cado signo anticlerical. No se trata de un tema cualquiera porque tiene como fun¬ damento el hombre mismo, con todos sus incalculables valores y con todas sus do¬ lorosas miserias. Los españoles de ma¬ ñana tienen que formarse, foguearse en las instituciones docentes que nosotros les proporcionemos. Han sido muchas las cartas de honrados profesionales que nos han agradecido el artículo del pró¬ ximo pasado mes, insinuando el agrade¬ cimiento a las instituciones religiosas do¬ centes que hicieron de ellos hombres preparados moral e intelectualmente pa¬ ra el porvenir.
Conste que nos resistimos a entrar den¬ tro del campo de la polémica destempla¬ da Y vulgar. Simplemente queremos gri¬ tar la verdad a los cuatro vientos, mal
que les pese a los que quisieran que la enseñanza privada cargara con todos los males que se achacan a nuestra atormen¬
tada sociedad.
Una necesidads mentalizar
Nuestro pueblo necesita tomar concien¬ cia de los deberes y derechos que tiene cada ciudadano en el campo de la ense¬ ñanza. Son muchos los textos y las de¬ claraciones que señalan el derecho del
individuo, inícialmente a través de sus
padres, para escoger la educación que les guste. «Con el monopolio estatal de¬ saparece a la vez el derecho de enseñar y el derecho de escoger al educador. Por consiguiente, es la misma libertad de con¬ ciencia la que desaparece, puesto que los padres, a cuyo cuidado está la educa¬ ción del niño, no pueden cumplir su de¬ ber según los dictados de su conciencia. El Estado se sustituye a ellos, y se ex¬ tralimita en sus funciones, que consisten
en ayudarles, al imponer un sistema que de hecho los elimina». (G. Bordean en «Les libertés publiques» Paris).
El Papa Juan XXIII afirma en la «Pa¬ cem in Terris» que «los padres poseen un derecho de prioridad en el manda¬ miento de sus hijos y en su educación».
Y en la Declaración Universal de los De¬
rechos Humanos se afirma: «Los padres tendrán derecho preferente a escoger el tipo de educación que habrá de darse a

por Gregorio Mateu^ T. O. R
sus hijos». Son derechos naturales tan
enraizados en la naturaleza humana que
su negación supone un duro golpe a la misma dignidad humana. Y para evitar equívocos la ONU ha aclarado en el pac¬
to Internacional de Derechos Económi¬
cos, Sociales y Culturales que «Los Es¬ tados, partes en el presente Pacto, se comprometen a respetar la libertad de los padres y, en su caso, de los tutores legales, de escoger para sus hijos o pupi¬
los escuelas distintas de las creadas por
las autoridades públicas, siempre que aquéllas satisfagan las normas mínimas que el Estado prescriba o apruebe en materia de enseñanza, y de hacer que sus hijos o pupilos reciban la educación moral que esté de acuerdo con sus pro¬ pias convicciones».
Frente a los grandes e inamovibles principios que fundamentan la existen¬ cia de la enseñanza privada queda la realidad práctica en muchos casos dolorosa e hiriente que ha obligado a adop¬ tar posturas poco elegantes y casi siem¬ pre muy poco populares. No obstante, creemos ha llegado el momento de ha¬ blar claro y mostrar la verdad a la opi¬ nión pública, en todos sus matices.
Iglesia y enseñanza
La Iglesia con la enseñanza intenta prestar un servicio público a la sociedad. Los padres cristianos tienen pleno dere¬ cho a que sus hijos se eduquen en cris¬ tiano y la Iglesia tiene obligación de pro¬ porcionar los medios. Y siendo así que son todos ellos ciudadanos, el Estado tiene la obligación de ayudar y subven¬
cionar los centros a tal efecto fundados.
Leimos hace poco en LE MONDE: «El Estado no puede imponer a toda la na¬ ción (Francia, en este caso) una deter¬ minada pedagogía fundada en la exclu¬ sión sistemática de la cultura religiosa,
cuando esta exclusión es rechazada por un considerable número de familias, co¬ mo lo demuestra la pujanza de la ense¬ ñanza confesional».
Hasta ahora el Estado dejó en manos de la iniciativa privada, de hecho a ins¬ tituciones religiosas, la enseñanza Me¬ dia, siempre sin ninguna ayuda financie¬ ra. Es falsa la afirmación repetida y ma¬ nida en un periódico palmesano que la enseñanza privada haya contado con nu¬ merosas subvenciones. Se ha dicho que la enseñanza privada era clasista y nos¬ otros preguntamos, ¿y la superior? El Estado la ha dado y sigue dándola en condiciones de práctica gratuidad con lo que se ha cometido una clara injusticia,

pues nadie puede olvidar que son muy pocos los alumnos económicamente ne¬ cesitados que pueden llegar a la Univer¬
sidad.
Hay muchos malentendidos que nece¬
sitan ser aclarados. No es lo mismo em¬
presa privada que empresa de lucro.
Unos mínimos conocimientos financieros
permiten saber que el capital invertido en equipos y edificios de la enseñanza privada tendrían un rendimiento muy superior en cualquier negocio. Es un he¬ cho, además, que los precios de la ense¬ ñanza privada en general son más bara¬ tos que su coste real y, desde luego, que
el coste de la enseñanza oficial. No se
puede olvidar que la enseñanza privada ha resuelto hasta ahora en gran parte al Estado el problema de la Enseñanza Me¬ dia, lo que ha permitido a la Adminis¬
tración dedicar a la misma unos presu¬
puestos políticos realmente ridículos. El clasismo en la enseñanza privada se
solucionará cuando el Estado use sin dis¬
criminación el presupuesto oficial que pagamos todos los españoles. Además, no hay que olvidar que muchas institu¬ ciones privadas, especialmente religiosas,
se han volcado en beneficio del sector
más necesitado de la sociedad, y, que concretamente por lo que se refiere a las Escuelas Profesionales su creación
se debe a la iniciativa de la Iglesia que
tiene en ellas MUCHOS MAS alumnos
que la Enseñanza Media, aun a pesar de que la subvención no es total y está muy alejada de los costes reales.
Es un hecho que los colegios de la Iglesia, aun con sus reales e inevitables deficiencias, tienen una afluencia masiva de alumnos. A pesar de las campañas demagógicas de algunos órganos infor¬ mativos, son muchos los padres que con¬ fían en las instituciones religiosas docen¬ tes y exigen del Estado una mayor cola¬ boración y ayuda.
Futuro de la enseñanza
Estamos viviendo una renovación pe¬
dagógica a escala mundial. Pero nos¬
otros no vemos en nuestra nación un pa¬ norama claro. La enseñanza privada vi¬
ve momentos de gran inquietud, incerti¬ dumbre. inseguridad y confusión. Las deficiencias y los éxitos de la enseñanza privada tienen su raíz en su independen¬ cia ideológica y hasta cierto punto bu¬ rocrática frente al Estado. La historia
nos demuestra que los grandes métodos
educativos o didácticos verdaderamente
renovadores han partido de iniciativas privadas.
Según la lev la enseñanza privada será subvencionada en la misma cuantía, por alumno, que la enseñanza estatal y en el plazo de diez años. Lo que no aparece tan claro es la aplicación de dicha ley a

través de los decretos que continuamen¬ te van apareciendo. La discriminación es clara. Basta ver las condiciones que
se ponen a los centros privados con re¬
ferencia al Curso de Orientación Univer¬
sitaria en comparación con los estatales, para quienes no se exigen comisarios,
cosa que se pide para los colegios priva¬ dos. La tradición de la enseñanza priva¬
da en España tiene una historia dema¬ siado larga y demasiado viva para que se pueda marginar y ser absorbida por
los enormes tentáculos del Estado.
Podemos recordar, aunque sólo sea de paso, que ya el fuero de los españoles afirma: «Todos los españoles tienen el
derecho a recibir educación e instruc¬
ción y el deber de adquririrlas, bien en el seno de su familia o en Centros pri¬
vados o públicos, a su libre elección». (Art. 5) Y la Ley Orgánica del Estado es muy clara al respecto: «El Estado reco¬ noce y ampara la familia como institu¬ ción natural y fundamento de la socie¬ dad, con derechos y deberes anteriores y superiores a toda ley humano positi¬ va». (Art. 22). Existe una ley de Ense¬ ñanza Primaria y otra de Enseñanza Me¬ dia en las cuales se afirma esa libertad
así como la obligación del Estado de sub¬ vencionar la enseñanza privada.
Lo que realmente nos preocupa no es la ley, suficientemente clara. Lo que real¬ mente tiene importancia es la reglamen¬ tación posterior que la aplica y la inter¬ preta. Quizás en el plazo de 10 años aue marca la ley sean muchos, demasiados, los centros privados que hayan desapa¬ recido, ahogados ’por dificultades econó¬ micas invencibles o por la desigual com¬
petencia y trato discriminatorio. La mejor garantía de que la cultura y
las ideologías no sean un producto im¬
puesto sino fruto de la creatividad co¬ munitaria y social es un sistema de en¬ señanza donde la iniciativa privada ten¬
ga sus posibilidades. De lo contrario se va a dar jaque mate a una realidad que con sus defectos es mejor que un mono¬
polio totalmente injusto. La enseñanza privada todavía tiene mucho que decir, pese a todos los mal documentados de¬
tractores de última hora.

MÉ XIC o
VII
1.A T. O. R. EN MÉXICO

Día dos de diciembre de 1951 el P. Salom anunciaba que ya se iban a empezar las obras de la nueva iglesia. En la misma oca¬ sión daba cuenta a sus feligreses de la can¬ tidad recaudada hasta aquella fecha, que ascendía a la suma de 4.391,40 pesos me¬ xicanos, poco menos de 25 mil pesetas.

ma nos ofrecía algo un poco mejor, la igle¬ sia del Señor del Buen Despacho en la Co¬ lonia Tlacoquemécatl, con la única condi¬ ción de construir una nueva iglesia junto al
conjunto habitacional «Multifamiliar Miguel
Alemán» en la Colonia del Valle, que más tarde sería la sede de la nueva Parroquia.

¡Qué gran capital para iniciar la construc¬ ción de un conjunto parroquial! Unicamente
alguien con una confianza ilimitada en la
Providencia y una no menor dosis de arro¬
jo se arriesgaría a tal empresa.

Así se abrían las puertas para la expan¬
sión de nuestra Orden en México. El P. Sa¬ lom este día se olvidó de que no había comi¬
do y ni corto ni perezoso fue a visitar el
lugar en cuestión.

El doce de diciembre, fiesta de la San¬ Al regresar a casa escribió inmediatamen¬

tísima Virgen de Guadalupe, Patrona de Mé¬ te al Muy Rvdo. P. Antonio Bauzá, Ministro

xico, tuvo lugar la solemne bendición de la Provincial, que a la sazón se encontraba en

primera piedra,
mil fieles, y las

coobnrasasfiuseternocniaavdaenzamnádso

fdire¬

memente con la ayuda de colectas popula¬

Estados Unidos, y era la única persona que
podía decidir si se aceptaba esta nueva oferta del Arzobispado de México. Después

res, rifas benéficas y fiestas cívicas.

de anunciar su visita por telegrama llegó a

Méxjco, acompañado de los PP. Frontera y

El Arzobispado de México seguía de cer¬ Rubí, día primero de febrero.

ca y con beneplácito la labor de nuestra Or¬

el tediosas den. El 24 de enero de 1952, a escasos tres

meses de su llegada, el P. Salom recibió

con sorpresa un citatorio para que se pre¬

sentara urgentemente con el Secretario

Canciller, Mons. Garibay, en las Oficinas de

la Curia Metropolitana. A pesar de haber

sido citado con carácter de urgencia la an¬

tesala consistió en tres horas de larga y fa¬

tigosa espera: tiempo más que suficiente

para imaginarse las peores cosas. ¿Para

qué me querrán?
contra mía? Con

¿Tendrán alguna queja en
tales cavilaciones y otras

por el estilo es natural que aquellas

horas se le hicieran siglos.

Como habían hecho el viaje en coche

desde los Estados Unidos llegaron fatigados,

pero apenas descansaron unos momentos,
P. Salom los llevó a conocer la iglesia y

Colonia que les habían ofrecido. Quedaron

gratamente
visitaron a

impresionados.
Mons. Garibay,

ASl edcíraetasriigouieCnatne¬

ciller, quien los presentó al Sr. Arzobispo

Dr. Luis M. Martínez, que a su vez confir¬

mó dicho ofrecimiento. El Muy Rvdo. P. An¬

tonio Bauzá, Ministro Provincial, quiso co¬

rresponder a las atenciones de Mons. Ga¬

ribay invitándolo a comer en un Restaurant

capitalino, por no reunir todavía condiciones

Finalmente, a las dos de la tarde fue re¬

la pobre casa que habitaba el P. Salom. En
esa ocasión Mons. Garibay suplicó al Muy

cibido muy amablemente y con una sonrisa Rdo. P. Antonio Bauzá, Ministro Provincial,

que le
mores,

hizo
por

disipar todos
el Secretario

sCuasncinilfluenrdaqduioesn

tele¬

que la Orden se temporalmente, de

hiciera cargo, al
la Parroquia de

SmanenVois¬

comunicó que en compensación de lo que cente Ferrer, de! pueblo de Chimalhuacán,

habíamos aceptado en la Colonia Moctezu¬

THOMY^S
MAYONESA
Tan buena como la
mejor hecha en casa
ahora en dos sabores! AL NATURAL etiqueta verde
CONDIMENTADA
etiqueta amarilla

distrito de Chalco, Estado de México, dis¬ tante unos 75 kilómetros de México capital.
Día seis de febrero de 1952 el Rvdo. Sr. Alfonso Sánchez, Cura Párroco de la Parro¬
quia de Santo Domingo de la Colonia Mixcoac, en nombre del Sr. Arzobispo, dio po¬ sesión de la iglesia del Señor del Buen Des¬ pacho de la Colonia Tlacoquemécatl de la Ciudad de México al Rdo. P. Sebastián Rubí. T. O. R., la misma que había aceptado nuestro Muy Rdo. P. Antonio Bauzá, Mi¬ nistro Provincial, con la condición más arri¬ ba expresada, a saber, la de construir una nueva iglesia junto al Multifamiliar «Miguel Alemán», en la Colonia del Valle, que a su tiempo sería la sede parroquial.
A los ocho días de su llegada, después de haber arreglado muchas cosas y encau¬
zar las obras de la T. O. R. en México, em¬
prendieron el camino de regreso a USA los Muy Rdos. Padres Ministro y Comisario
Provincial.
Desde Waco. Texas, el Muy Rdo. P. An¬
tonio Frontera escribía el 11 de febrero al
P. Ginard Amorós sus impresiones del viaje a México, que expresaba en éstos términos; «El sábado llegamos a Waco de regreso de
México. Antes de ir allá había recibido car¬
ta de! P. Salom comunicándome que el Ar¬ zobispado nos ofrecía otro lugar con grandes posibilidades. Estoy muy contento de que el P. Provincial lo viera por sí mismo... ¡Cuán¬ tas posibilidades para los jóvenes empren¬ dedores y dinámicos de nuestra Provincia!... Si tuviéramos doscientos sacerdotes, bue¬ nos trabajadores, creo que todos se podrían ocupar en pocos años en la República Me¬ xicana. El P. Provincial dispuso que se que¬ dara el P. Rubí para hacerse cargo de una vez del templo que se nos dio. Además de esto se nos ofreció otra iglesia que el P. Provincial también aceptó.»
Fray A. MARTI, T. O. R.
(Continuará)

Í.l—I ES UN PRODUCTO SZIB cj

fcÜ

MOLINS DE REY - BARCELONA

POSTAL DE NAVIDAD

Muchas personas dicen que en las Na¬ vidades se ponen un poco tristes. No tiene nada de particular. A todos nos dan un poco de tristeza estos dias, por¬ que siempre nos acordamos de otras Navidades más alegres, las de nuestra in¬ fancia, cuando todo para nosotros era una fiesta. ¿Era o nos lo parece ahora? Eran otros tiempos. Eran otras humil¬ dades las que presidían las casas. ¿Qué había mucha más injusticia social que ahora? Sí. Pero tendremos que conquis¬ tar muchas más justicias y muchas más generosidades. En las Navidades de an¬ taño había calma y recogimiento calentito. ¿No estaremos convirtiendo la Navidad en una especie de festival de la
canción? Demasiada exterioridad. Sobre¬
salen demasiado esos árboles fulgurantes. Brilla con exceso un lujo que parece cru¬
cificar por anticipado al Niño Jesús. ¿Po¬
demos descansar un poco de verdad en estos días? ¡Difícil! Aunque suspendiése¬ mos nuestras habituales tareas, otras ven¬ drían a llenar el tiempo de nuestro co¬ tidiano trabajo. Nos empuja el alud de los «Christmas». Y no es imposible que nos veamos prisioneros de visitas. Se agradece la intención. Se agradece el afecto. Pero, ¿cuándo podremos quedar¬ nos solos con nosotros mismos y con el
«numerus clausus» de nuestra familia?
A lo mejor nos ponemos de mal hu¬

mor. ¿Seremos el aguafiestas de las Na¬ vidades? Que todo puede ser. Llega el que dice: «Yo me voy a la cama, por¬ que no me encuentro bien». Aparece el que dice que no tiene ganas de cenar, porque no está de buen humor y por¬ que estas fiestas, en su vertiente exter¬ na, en su versión actual, le fastidian. To¬ do puede pasar. Alguien habló de los resortes peligrosos y milagrosos de las Navidades. Los resortes peligrosos están en nosotros, que quizá somos un poco brutos. Queremos estar contentos a la fuerza, pero contentos con alegría estre¬ pitosa y total, sin pensar que la vida no es eso, no da para tanto, y que la Navi¬
dad tiene también su tristeza noble y
su nostalgia estimulante. Además, ¿quién no tiene una pequeña herida en el costa¬ do? O donde sea. Y como sea. ¿A quién no le duele lo que está pasando en el mundo? ¿A quién no le quema el ham¬ bre de los otros? ¿Que se lo estoy po¬ niendo muy difícil? Yo ni quito ni pon¬ go rey. Pienso, eso sí, que nos estamos olvidando de los resortes milagrosos de la Navidad, que no es precisamente un festival de la canción, sino la conmemo¬ ración del mayor milagro de la historia. Y algo tendremos que poner de nues¬ tra parte: un poquito de buena voluntad. Lo demás se nos dará por añadidura.
F. Javier MARTIN ABRIL

M I SS A

«FRATERNITAT

JOIA»

del Mestre P. A, Martorell, T. O R.

«PAU

MISSA

ALS

HOMES»

del mateix autor

Edició CANT I ORGUE Se ven a les llibreries i Cases de Música i a l'administració del «HERALDO DE CRISTO».
L'acompanyament rítmic es pot demanar també a l'esmentada Administració d'aquesta
revista.

Oisc

de la Missa «FRATERNITAT I JOIA>
Gravat per R. C. A. espanyola, està en venda a les cases discogràfiques i a la nostra
Administració.

Dise de la Missa «PAU ALS HOMES»

Gravat per Columbia, S. A., es pot comprar igualmente a les cases discogràfiques i a la ja esmentada Administració del «HERALDO DE CRISTO» Convent de San Francesc Pal¬
ma de Mallorca.

UN SA LV A DOR

EL ACONTECIMIENTO
Había unos pastores en aquella misma región que pasaban la noche al aire libre, vigilando por turno su rebaño.
Y un ángel del Señor se les presentó, y la gloria del Señor los envol¬
vió en claridad.
Ellos sintieron un gran temor. Pero el ángel les dijo: No tengáis miedo.
Porque mirad: os traigo una buena noticia que será de gran alegría para todo el pueblo.
HOY, EN LA CIUDAD DE DAVID, OS HA NACIDO UN SALVADOR, QUE ES CRISTO SEÑOR.
Y esto os servirá de señal: encontraréis un niño envuelto en pañales y acostado en un pesebre.
Y de repente, apareció con el ángel una multitud del ejército celestial que alababa a Dios, diciendo:
GLORIA A DIOS EN LAS ALTURAS Y EN LA TIERRA PAZ ENTRE
LOS HOMBRES, OBJETO DE SU AMOR.

SUS CUALIDADES
Isaías profetizó: «No porfiará ni gritará y nadie oirá su voz en las plazas.
La caña cascada no la quebrará y la mecha humeante no la apagará, hasta que haga triunfar el juicio».

OREMOS

Niño Jesús Salvador: nuestro tiempo es de mucha palabrería y grite¬ río, de mucho conflicto y violencia;
Te glorificamos; y te pedimos amanezcas la paz entre los hombres, objeto de tu amor.
Haz triunfar el «juicio» entre nosotros, tus pobres mortales; y la Paz y el Bien para todos, en fraternidad universal.

FISONOMÍA DE SAN FRANCISCO
QUERIA PERSUADIR AL EMPERADOR A
QUE OBLIGASE A LOS HOMBRES A DAR, EL DÍA DE NAVIDAD, ABUNDANTE COMIDA A LOS POBRES, A LOS PAJA-
RULOS, AL BUEY Y AL ASNO
Si tuviese ocasión de hablar con el Emperador, le había de pedir y aconsejar que, por amor de Dios y también por el mío, publicase una ley especial en cuya virtud nadie pudiese coger, ni matar, ni cau¬ sar daño alguno a las avecillas que cruzan el aire. De igual modo, que todas las autoridades de las ciudades, de los pueblos, de las aldeas, y hasta los señores de los castillos, obligasen a los hombres todos los años, en el día solemne de Navidad, a esparcir por los caminos y vías púbUcas gran porción de trigo y de otros granos para que las herma¬ nas alondras y todas las otras avecillas tengan qué comer en abundan¬ cia en día tan solemne; y a que, por reverencia al Hijo de Dios, a quien en aquella noche la Santísima Virgen María reclinó en un pesebre so¬ bre pobres pajas, en medio de un buey y un asno, todo el que tuviese alguno de esos animales estuviese obligado a proveerles con largueza de un buen pienso; y, por último, que todos los ricos estuviesen obli¬ gados en dicho día a saciar con sabrosos y exquisitos manjares a los pobres de Cristo.
Esto hacía el bienaventurado Francisco porque profesaba mucha mayor devoción al tierno misterio del Nacimiento de Cristo que a to¬ das las obras festividades, por lo cual decía: Después que Cristo na¬ ció por nosotros, debemos tener por segura nuestra salvación. De aquí su gran deseo de que todos los cristianos se alegrasen dicho día en el Señor y que, en vista del amor de Aquel que se entregó a Sí mismo por nosotros, todos procurasen regalar con largueza, no sólo a los po¬ bres, sino también a los animales y a las avecillas.
ESPEJO DE PERFECCION, Cap. CXIV.
A REDACTORES Y COLABORADORES, A SUSCRIPTORES Y ANUNCIANTES, EN LA NAVIDAD DE 1971,
PAZ Y GOZO EN EL SEÑOR DESEA
«HERALDO DE CRISTO»
13

PA GTNA

TEXTS ANTICS DE LA SIBIL'LA*

Versió A

Al jorn del judici parrà qui haurà fayt servid.
E totas responen assò matex.
Un Rey vendrà perpetual del cel quant may non fo aytal (1);
en carn vendrà certanament
per far del segla jutjament.
Responen totas axí:
Al jorn del judici parrà qui haurà fayt servici.
E diu la dita cantora axí:
lA^ns del judici tot anant (2) apparrà un senyal molt ígran (3): la terra gitarà suor
e tremirà de gran pauor.
Los puigs e.ls plans seran eguals; aquí seran els bons e.ls mals: els comtes, els reys e.ls barons qui de lurs fayts re\\ tran raysons.
Al jom del judici.
Hanc hom non féu res ten secret
ne ho dixé ne ho panset
que no sia aquí tot clar; ja no y porà hom res celar.
Al jorn del.
La donchs no haurà hom talent
de riquesas, d’aur ni d’ergent; no haurà hom de res desir,
mas ten solament de morir.
Al jom.
Del morir serà tot lur talens; adonchs los glatiran les dens; no y haurà hom qui no s’i plor; tot lo món jaurà en tristor.
Al jorn.
Cascun cos s’arma cobrarà, e bons e mals la donchs parran (sic) (4);

Lo jorn de Nadal, a la novena lissó, una bona cantora diu LO JORN DEL JUDICI, segons se seguex assí:
los bons irán ab Déu laxús (sic per «laysús») e.ls mals hiran a infern jus.
Responen: Al jorn del judici.
Los infants qui nats no seran dins en lo ventra ploraran;
e cridaran tot altament:
Senyor ver Déu omnipotent.
Al jorn del judici.
E dirà cascú axí:
Senyor, hajes mercè de mi; mays vòlgrem esser nient que quan venim a jutgement (sic) (5).
Al jorn.
Déus dexendrà del cel sajús axí con fo levat en crus (sic) per judeus falsos e traidós, que Déu los cresca lus dolós.
Al jorn del judici.
So és aquest que vós pangés e en la creu lo claufiqués; ar’és vengut al jutgement lo Fill de Déu omnipotent.
Ai jorn del judici.
Déus dirà a aycels dulcement (sic) qui deuran prendrà salvament:
Venits a mi los amichs meus
de tots perills... (6)
(Manca el full o els fulls següents. No sabem imaginar els mots que completarien el vers, el darrer dels quals havia d’acabar en —eus. Per altra banda, declaram que no és de tot segura la lliçó que donam d’aquesta estrofa. La corres¬ ponent de la versió provençal diu així:
Als autres dirà mot doysament: a cel que iran a salvament: Venes a mi, venes, bons fyls, que yeu vos guardaray de perills).

Hem d agrair aquí al P. Francesc Amengual, T.O.R., la inestimable ajuda que gentil¬ ment ens ha prestat en la localització i obtenció de fotocòpies d’aquestes antigues versions de
la Sibil.la.

La versió A es cedent del monestir

troba de la

en un llibre coral, manuscrit, de la primera meitat Concepció (ara en el Museu Diocessà de Mallorca).

del

XVy

pro¬

La versió B figura en el «Libre compost per frare Encelm Turmada... estampat en la Insigne Ciutat de Barcelona per Duran Salvanyach. En l’any Mil D e xxij., a iiij del mes de
Setembre».

La transcripció és feel. Solament hem introduït per compte nostre, algunes lletres majús¬ cules, la separació de mots, la puntuació i els accents.

T E Xt A R I A.

TEXTS ANTICS DE LA SIBIL'LA

Versió B

Al jorn del Judici parrà qui haurà fet servici.

Un Rey vindrà perpetual vestit de nostra carn mortal; del cel vindrà tot sertanament (1) per fer del setgle jutjament.

Ans que.l judici no serà
un gran senyal se amostrará; lo Sol perdrà la resplendor; la terra tremolarà de pohor.

Aprés se badarà molt fort
amostrant-se de greu conort;
amostrat (sic) se han ab crits e trons (2) les infernals confusions.

Del cel gran foch davallarà;
com a çoffre molt pudirà; la terra cremarà ab furor: la gent haurà molt gran terror.

Aprés serà un fort senyal d’un terratrèmol general; les pedres per mig se rompran e les muntenyes (sic) se fendran (3).

Lavors no haurà hom talent
d’or, de riqueses ni d’argent; de res no haurà hom desig (sic)
sinó solament de morir.

(4),

De morir seran lurs talents; lavors esclafiran les dents; no y haurà home qui no plor; tot lo món serà en tristor.
Los puigs e.ls plans seran eguels (sic) (5) aquí seran los bons e.ls mals; reys, duchs, comptes e barons, qui de lurs fets retran rahons.
Aprés vindrà terriblament lo Fill de Déu omnipotent qui los morts e vius jutjarà: qui bé haurà fet aïli.s parrà.
Los infants que nats no seran
dins en les mares cridaran
e diran tots plorosament: ajuda’ns. Déu omnipotent.
Mare de Déu, pregau per nós, que sou Mare de peccadors, qui (sic) bona sentència hajam (6) e paradís posseiscam.
Vosaltres qui escoltau,
devotament a Déu pregau,
de cor ab gran devoción (sic) (7) que’ns aport a salvació. Amèn.
DEO GRATIAS

NOTES
VERSIÓ A. — (1) El sentit dels dos primers versos d’aquesta primera estrofa apareix més clar en la versió pmvençal (Milà y Fontanals. EL CANTO DE LA SIBILA EN LENGUA DE OC, en «ROMANIA», t. IX, 1880, pp. 353-365): Un Rey vendrà perpetual / del cel que anc nun fun aytal. (2) Manca en la còpia la caplletra A d^ «ans». També el vers es troba deturpat, com sigui que «anant» està per «enant», d’igual significació que «ans». La versió provençal, d’on evidentment procedeix la nostra catalana, diu correctament: May (per «mays») del jusisi tot
enant / parrà...y>. No obstant, la mateixa anomalia ja apareix en una altra versió del s. XV ci¬ tada per Milà y Fontanals en l’estudi indicat: Ans del jodici tot enans. (3) La part que va entre claudàtors la prenem del text occità, desprovincialitzant una mica. El llibre en català ens ha arribat mutilat. (4) Es curiós que la manca de rima «cobrarà - parran» també existesqui en els dos versos corresponents de la versió provençal: «cobrarà - mal». Però també aquí una de les antigues versions ens dóna la solució correcta: Cascun cos l’arma cobrarà; / qui és bo o mal aqui parrà. (5) Es notable la divergència entre el darrer mot d’aquest vers, «jutgement», i el corresponent provençal «naycement», ambdós versos probablement corromputs. (6) Manquen els darrers mots d’aquesta estrofa. Com hem dit abans, el text està mutilat. Si aquesta Sibil.la tenia el mateix nombre d’estrofes que la provençal, com és probable, calculam que hi ha per¬
duts uns tres fulls del preciós llibre.
VERSIÓ B. Quasi no hem fet més que senyalar simples distraccions de4 copista: en
(1), esperant «certament» i no «sertanament», afegí un «tot» inoportú; en (2) escriví «arnostrat» per «amostrar»; en (3), «muntenyes» per «muntanyes»; en (4) ell, com^altres, per evitar
el mot arcaic «desir», posà «desig» i es perdé la rima; en (5) en comptes d’escriure «eguals»
li sortí «eguels»; en (6) tal volta alterà el lloc del «qui» i del «que» entre el tercer i el segon vers; i en (7), «devoción» pot argüir en el copista hàbit descriure en castellà.
15

LA. SIBIL·LA
ELS SEUS TEXTS LITERARIS
I
La Sibil.la —origen i història, lletra i cant— ha estat ohjecte de diferents i acurats estudis. Compta ja amh una hihliografia de més d’una quinzena de trehalls, sense incloure-hi les refelències més o menys extenses dins altres ohres. Es, doncs, el de la Sihil.la, un tema certament no exhaurit, però ja no intacte, no verge de la curiositat d’investigadors i erudits.
Nosaltres no anam a emprendre cap nou estudi. Això sí, les nostres ratlles podrien tal volta fer venir a qualcú altre l’acudit de voler ampliar o completar la indagació sohre aspectes als quals no s’ha prestat encara tota l’atenció deguda. Nosaltres volem simplement vulgaritzar no¬ tícies ja conegudes, a henefici dels lectors menys informats. I ho farem aprofitant la feina que ens donen feta alguns dels autors de les ohres que figuren en la hihliografia a la qual ens hem
referit més amunt.
La Sihil.la —mot que vol dir endevinadora, profetessa— és un dels més preuats tresors del nostre folklore religiós (Sanchis Guarner, «RAIXA).
Segons testimoni d’un antic (a. 1506) Breviari mallorquí, durant la novena lliçó de les Matines de Nadal, lliçó que, a la Seu, era cantada pel Bishe i que venia a esser una dura increpació al pohle d’Israel per la seva incredulitat i infidelitat a Crist, cojnpareixien una sèrie de personatges híhlics, figurant els profetes, els quals, quan eren anomenats en el curs de la lec¬ tura que feia el Bishe, cantaven, cadascú al seu torn, la corresponent profecia messiànica. Fi¬ nalment, en aquella llarguíssima novena lliçó era invocat tamhé el testimoniatge do la Sihil.la de la gentilitat (Ll. Pérez, «SA SIBIL.LA EN LA NOCHE DE NAVIDAD»). «L’antiguitat cristiana admeté que Déu havia concedit una mica d’esperit profètic a alguna d aquelles ende¬ vinadores paganes, per tal de predisposar els gentils, amh llurs oracles, a rehre la llum de la Bona Nova (Sanchis Guarner).
Acabada, doncs, en la lectura del Bisbe, l’al.lusió al vaticini de la Sibil.la, ja bi havia sis preveres preparats que rompien amb el cant, en llatí, de l’himne misteriós, «sibil.lí», de la profetessa pagana:
Judicii signum, tellus sudore madescet (vers que es troha replicat en «al jorn del judici», «la terra tremirà de por», «la terra gitarà suor» de les versions catalanes de la Sibil.la). I tota la clerecia catedralicia repetia el cant del mateix verset. A continuació dos dels sis capellans interpretaven la primera estrofa de l’himne, que deia així: E coelo rex adveniet per saecla fu¬
turus, / scilicet, in carne praesens ut judicet orbem (com es veu, hi ha aquí també una correspondència quasi literal amb la primera estrofa de la nostra Sibil.la). I els sis sacerdots, alternant-se de dos en dos, cantaven les restants estrofes; i el cor, darrera cada una d’elles, com en forma responsorial, repetia la tornada Judicii signum.
Aquest és l’origen de la nostra Sibil.la: un tros de la novena lliçó de les Matines de Nadal, escenificat pel poble de l’edat mitjana; l’epíleg d’aquella composició que els liturgistes anome¬ naven la Processó dels Profetes (LL Pérez).
El cant de la Sibil.la no és, doncs —i ara prenem de bell nou notícies de Sanchis Guar¬ ner—, altra cosa que la versió a llengua vulgar del Judicii signum, que ahans del segle XV es cantava en llatí, però que fou traduït a la Provença.
Paul Aehischer, investigador suís, ens assabenta que el cant de la Sibil.la no és més que un fragment desglossat d’una representació més completa de la Processó dels Profetes, que, segons consta, es celebrava a Mallorca i a València en el segle XVI. I el mateix professor ens diu tam¬ bé que la substitució dels sis preveres cantors per un infant tengué lloc l’any 1575 quan, a precs del Bisbe Joan Vich, el capítol de la catedral mallorquina va restablir el cant de la Sibil.la que tres anys abans havia estat suprimit per decret del Bisbe anterior, Diego Arnedo.
Se tenen notícies que el cant de la Sibil.la en llengua vulgar s’executava en la segona meitat del segle XVI a totes les Seus catalanes. A Alguer, ciutat de l’illa de Sardenya (Itàlia) on es parla català, encara es canta la Sibil.la i la seva lletra catalana és més completa que la que es
conserva a Mallorca.
El qui canta la Sibil.la, com sabem molt bé els mallorquins, sol esser un al.lot. d’uns onze a tretze anys, vestit com a de dona («un fadrí vestit com a dona ab una spassa nua a les
16

mans», diu el Cançoneret de Nadal, de Marian x4guiló), amb sedes, randes i tuls, i amb un barret més o menys capriciós. L’espasa que porta, dreta davant la cara, no és més que el record de les paraules del pseudo-Agustí que llegia el Bisbe en aquella novena lliçó de les Matines de Nadal, quan invocava el testimoni de la Sibil.la: ...atque suo gladio sicut Goliath omnes Christi percutiantur inimici.
I ara un text tal vegada no molt conegut. Gabriel Alomar no sabia tenir mai paraules contengudes en qüestió d’afers eclesiàstics i per això, en referència a la nostra Sibil.la, escrivia així (traduïm literalment): «En el meu país, dia 25 de desembre, abans de la missa de la nit de Nadal, un petit actor, grotescament desfressat de Sibil.la, puja a la trona de la Catedral i canta, en rudes estrofes desfigurades, la fi dels temps i els signes precursors del Judici, com Berceo i els seus contemporanis els metrificaren ja a través dels sagrats texts. Eduard Toda ha descobert, en el català de Sardenya, xma versió d’aquest cant híbrid, espècie de ditirambre de la tragèdia cristiana» (LA FORMACION DE SI MISMO, cap. XXII).
Citant i extractant autors hem esgotat tot l’espai disponible, sense entrar en el tema pròpia¬ ment dit: els texts literaris de la Sibil.la. Creim, emperò, que aquestes notes han d’interessar als lectors; almenys a algun d’ells. Si Déu ho vol, en el número vinent la Sibil.la tornarà a esser l’assumpte del nostre comentari.
Fra M. C., T.O.R.

DOCTORAT DE TERESA D‘AVILA i CATERINA DE SENA

El Vaticà —bell cas inusitat
de postconcili— amb un gran gest s’abrina per Vhonrament sublim amb què ha exaltat, magistralment, la prole femenina.

De Vhagiografia sacrosanta

en dos fulls blancs —blancor de lliri en flor—

VEsglésia-Mare avui més abrillanta

dos noms preclars en grosses lletres d’or.

El bon Pau sext, en la seguretat de profundes raons i alta doctrina, de cara al món, proclama el doctorat, merescut, de Teresa i Caterina.

Pel bell triomf de sa filla avilesa Espanya se commou amb sant orgull; semblantment per sa filla sienesa Itàlia de pur gaudi també bull.

Lloança, doncs, amb viu aplaudiment recau damunt l’Ordre carmelitana, de totes parts; la rep conjuntament, per un igual, l’Ordre dominicana.
A gratcient
i a bastament
cal cantar: Hosanna, hosanna hosanroa!

B. Guasp, Pr.

NAVIDAD . cdnte todo, buscar
La pau interior

Navidad es época que muchos celebran con festejos, olvidando la fiesta, y se ale¬ gran sin saber cómo la alegría llegó al mun¬ do. La Navidad no es algo que sucedió como el primer viaje a la Luna; es más bien algo que me sucedió a mí personalmente. Es época de indagación, hallazgo y participación.
Antes que nada tenemos que buscar paz interior. Dios hace los movimientos de res¬ puesta en el ajedrez de la vida, pero yo he de hacer el movimiento precedente bajo su estímulo. Entonces El responde: si carezco de paz es porque la he querido a mi antojo. Las clases que encontraron al Niño le bus¬ caron: los sencillos pastores y los Reyes Magos. Ambas fueron estimuladas a hacer¬ lo porque detrás de cada búsqueda hay una urgencia a veces llamada don; fue el canto de los ángeles para los pastores y la vista de la estrella para los Reyes Magos. Pero los pastores habrían podido quedarse sen¬ tados, absortos en el canto e ignorar el can¬ tor, y los Reyes Magos habrían podido es¬ cudriñar el cielo e ignorar la estrella de Ja¬
cob. De la misma manera, si yo creo que conozco el misterio de la Encarnación de
Dios, ¿a quá seguir más adelante? Mas ¿lo conozco en realidad? ¿No soy como «los príncipes de los sacerdotes y los escribas del pueblo de quienes Herodes inquirió dón¬ de había de nacer el Mesías? En Belén, le contestaron». (Mateo, 2; 4). Lo supieron, pero no fueron. ¿Soy yo como el anuncia¬ dor en un aeropuerto que avisa la salida de los aviones, pero nunca hace un viaje? ¿Soy catequista y dirigente conduciendo realmente a otros hacia El o soy tan sólo maestro que habla de El? No debo permi¬

tir que guirnaldas y mazapanes me induz¬ can a abandonar la profundización de mi fe.
«Buscad y hallaréis» (Mateo, 7: 7). Me es¬ pera una sorpresa en mi búsqueda, porque la Divinidad está siempre donde uno menos espera encontrarla. Si cuento con hallar al
Creador en la creación me veré defraudado
en mi búsqueda, porque «sólo donde El care¬ ce de hogar nos encontramos usted y yo en un hogar». Si el final del camino es una cueva y soy demasiado orgulloso para in¬ clinarme y ser humilde, puede que nunca
encuentre a Dios.
Al final de la jornada nos encontramos con la Ciudad del Pan, puesto que éste es el significado de Belén. Me encuentro allí no un supermán, sino un hombre de las ca¬ vernas... Alguien nacido bajo la misma capa de la Tierra para conmover al mundo en sus propios cimientos. ¿Qué es todo esto? ¿Una
mascarada?
DESPOJARSE DE ANTIFACES
Si esto es Dios, ¿cómo voy a saberlo? Tampoco me es posible saber quién es quién en un baile de máscaras. Hasta el cielo se enmascara. Si yo me quito mi anti¬ faz, el Niño se quitará su antifaz. He estado usando un antifaz durante años pretendiendo ser sabio cuando soy ignorante, pareciendo
Haciendo para un amigo o familiar una suscripción a
«HERALDO DE CRISTOv
HACE UN REGALO EN EL DIa DE NAVIDAD QUE DURA TODO EL AÑO
)

ser rico cuando mi alma es pobre de bon¬ dades, obteniendo la aprobación de los de¬ más cuando muy adentro de mí sé que no soy lo que aparento. Si desenmascaro mis bajezas y pretensiones y muestro mi ca¬ rencia de valor, el Niño se desenmascarará y mostrará su divinidad. Una vez que rasgo mi manto de virtudes y muestro el pecado que oculta. El se quita su disfraz y se con¬ vierte en mi salvador. Es el Divino Incógnito, mientras me estoy engañando a mí mismo.
Podría seguir siendo una crisálida toda mí vida y jamás llegar a cuajar en mariposa si no me hubiera adherido a esa capa dura que es el «ego» o el «yo». Ahora dejemos que la orquesta comience de nuevo al qui¬
tarse todo el mundo los disfraces en el bai¬ le de máscaras de la noche de Navidad.
Ahora veo que el Niño es tanto Dios como hombre, divino y humano. La música que
escucho es tocada en tono menor y tono
mayor al mismo tiempo, por lo que percibo
un doble misterio en Cristo: es tanto huma¬
no como divino. Y yo, que todo el tiempo pensé que era tan feo sin el antifaz, soy ex¬
cluido con amor de toda esa fealdad de
pecados por un ser llamado Jesús el Sal¬
vador.
Buscar sin encontrar es frustración; la ca¬ za sin captura, deprime. Navidad significa que Cristo vive en mí, trabaja con mis ma¬ nos, ve con mis ojos y ama con mi cora¬ zón. Sólo cuando me vacío de mí mismo. El puede llenarme de El. Si todo en mí, enton¬ ces nada de El; si algo de mi, entonces algo de El; si nada de mí, entonces todo de El.

no entera? La Navidad puede entristecernos y no alegrarnos si todo lo que hacemos es hacer regalos a los amigos sin darnos jamás al Dador. Pero la Navidad puede ser alegre
cuando «la vida de Jesús se manifiesta en
nuestro cuerpo» (II Corintios, 4: 10).
DIVORCIARSE DE SI MISMO
Estoy cansado de mí. Divórciame de mí. Jamás seré libre si Tú no me arrasas. Muy en el fondo sé que siento Tu presencia cuando estoy en gracia; siento Tu ausencia cuando estoy en pecado tanto como conozco el agua cuando tengo sed y los alimentos cuando tengo hambre. Ven entonces a otra cueva más profunda que la de Belén; la cueva de mi subconsciencia, donde toda mi fe y plegarias infantiles e inocencia se han
hundido. Psicoanalizame con contrición. Des¬
pójame de lo impuro; afina mis oídos al canto de los ángeles y mis ojos a la visión
de una estrella.
Creo saber lo que es Navidad: es el des¬ cubrimiento de que la peor cosa del mundo no es el pecado; es la negación de que soy pecador. Si fuera ciego y negara la luz, ¿ten¬
dría interés en ver? Si nunca hubiera peca¬
do, jamás podría decir «Salvador». Eso sí es
tener «una feliz Navidad». Monseñor FULTON J. SHEEN

¿Quiero conservar el dulce recuerdo del Niño en la cuna de hace tanto tiempo con
los dulces cánticos de «Noche de silencio»?
El llegó en realidad y me pidió que le diera mi dedo, ¿no temeria que me tomara la ma¬
19

MISIONES

4(Ss una pena»

No hay duda de que la mayor pena de los misioneros, es su impotencia pa¬ ra llegar a donde quisieran en su labor apostólica. Brindamos estos sentidos pár rrafos de un joven misionero a nuestros sacerdotes jóvenes.

Fachada principal de la Catedral que está construyen¬ do el Obispo, Mons. Damián Nicolau, T. O. R. Los ven¬ tanajes han sido sufragados por muchos, mollorqui nes especialmente terciarios franciscanos; con todo, el ventanal principal ha sido ofrecido a la generosidad del P. Ecónomo Provincial de la T, O. R., M. Rdo. P.
Antonio Bauzá Gayó.

«ES UNA PENA»
que no podamos atender mejor a estas personas, ya que la escasez de sacerdo¬ tes hace que muchos pueblecitos sólo puedan tener misa una vez al año.
Día 5 de julio fui a visitar los pueble¬ citos de la selva, y da lástima compro¬ bar como tienen mucho interés en que el sacerdote les instruya y les atienda en sus problemas; pero el tiempo es esca¬ sísimo, ya que también he de prestar
atención a otros sitios.

UNA VEZ EN EN LA VIDA...
En este viaje a los pueblecitos, me han suplicado que vuelva, sea como sea, por Pascua, pues tienen muchos deseos de poder asistir a la liturgia de Semana Santa. Yo les prometí que haría lo po¬ sible para complacerles; pienso ir para que tengan al menos una vez en la vida misa por Pascua.

Una pared lateral —e interior- de la misma Catedral de Huamachuco. Los confesonorios que se ven irán fo¬ rrados de cedro. Arriba del todo, ya han sido coloca¬
dos los ventanales de colores.

NUNCA HA LLEGADO ALLI UN SACERDOTE
El representante de un pueblecito bas¬ tante alejado de Ongón me mandó una carta invitándome a ir a dicho pueble-

cito. Decíame lo siguiente: que todavía nunca les había visitado un sacerdote; no tienen ni escuela ni iglesia; los hijos son grandes y no están bautizados; los los hombres y mujeres han formado fa¬ milia si ser casados; sólo unas pocas pa¬ rejas han salido de la selva para casarse y bautizar a sus hijos.
Cuando uno visita estos pueblecitos y se encuentra que poco o nada puede ha¬

cer con solo visitarles y estar con ellos dos días... siente fuertemente la necesi¬ dad de más brazos para tanta mies.
¡Ojalá Dios suscite más vocaciones sa¬ cerdotales, y vengan muchos misioneros a trabajar en estos sitios tan abandona¬
dos!
P. SEBASTIAN RAMIS, T. O. R.
misionero en Perú

LOS PP.
JUSTO SALVADOR
Y
PEDRO RIBOT,
NUEVOS
MISIONEROS
EN
HUAMACHUCO
(PERÚ)
De izquierda a derecha: Fr. Justo Salvador Oliver-Frontera, T. O. R. Fr. Jaume Tugores Mestre, T. O. R. y Fr. Pedro Ribot Mestre, T. O. R. El primero y el último, como queda expresado en el articulo adjunto, partieron día 6 de noviembre hacia nuestra Misión de Huamochuco.
Les despidió nuestro Procurador Provincial de Misiones.
Ei> la madrugada del 6 de noviembre ppdo. partieron hacia nuestra Misión de la Prelatura de Huamachuco (Perú) nuestros estimados hermartos de hábito, los
jóvenes sacerdotes Fr. Justo Salvador Oliver-Frontera, de Palma de Mallorca, y
Fr. Pedro Ribot Mestre, de Ariany. Destinados allá recientemente por la Obediencia, abandonaron España el ci¬
tado 6 de noviembre. Y pensando en el bien de las almas que van a tratar en Huamachuco, marcharon gozosos e ilusionados.
En Madrid, momentos antes de dejar nuestra patria, posaron sonrientes para
nuestros lectores.
Pedimos al Divino Amo de la mies que bendiga y haga fructicar el trabajo de esos nuevos obreros por las lejanas tierras de Huamachuco.
21

NUESTEA pequeña mSTOKIA

Tftedio siglo atrás,,.

El número de «Heraldo de Cristo» corres¬
pondiente al mes de diciembre de 1921, en cuanto al número de páginas, fue extraordi¬ nario: treinta y dos en lugar de las dieciséis
habituales. Quiso ser como un resumen de
la conmemoración del séptimo centenario de
la fundación de la Tercera Orden de San
Francisco.
Los mismos grabados que, con alguna profusión, ilustraban aquel número, apunta¬
ban a dicho fin: el centenario.
Ya en primera página aparecía S. S. el Papa Benedicto XV, terciario, que había pu¬ blicado su Carta Encíclima Sacra propediem, tal vez el más hermoso documento que ja¬ más haya emanado de la Santa Sede sobre
la Tercera Orden Franciscana.
Seguían luego: el Emmo. Sr. Cardenal Vi¬ cente Vannutelli, Protector de la Tercera Or¬ den Regular; el Rdmo. P. Arnaldo Rigo Mi¬ nistro General de la T. O.R., a quien el Papa había dirigido una preciosa Carta con motivo del centenario y quien, a su vez, ha¬ bía escrito, para sus hermanos en religión y terciarios seculares, un interesante men¬ saje sobre el mismo tema; el Rdo. P. Anto¬ nio Ripoll, venerable fundador de los Ter¬ ciarios Regulares en Mallorca; el Rdo. D. Ga¬ briel Mariano y su hermana Sor Concepción Ribas de Pina, que fundaron la Congregación de Hijas de la Misericordia, Terciarias Fran¬ ciscanas; y el más glorioso de los Tercia¬ rios mallorquines, Bto. Ramón Llull.
Completaban la serie de ilustraciones, vis¬ tas parciales de las iglesias o casas que nuestra Provincia Franciscana poseía en Ma¬ llorca (entonces no se tenía aún ninguna fundación más allá del charco): iglesia del Convento de S. Buenaventura de Llucmajor; Convento de Artà; fachada de la iglesia de S. Francisco de Palma y claustro gótico con¬ tiguo; Convento de Inca; Santuario de Cura; y Oratorio de La Porciúncula. Estas vistas constituyen valiosos documentos históricos, pues casi todos esos edificios en cincuenta
años han sufrido notables transformaciones en sí mismos o en sus alrededores. Tanto,
que el más reciente de ellos, el Oratorio de
La Porciúncula, hace años que no existe ya.

El fondo literario de aquel número lo for¬ maban, en primer lugar, un artículo de Fr. Pedro J. Cerdà, con el título de «Recuerdos
del centenario.—Nuestra Orden Tercera». Re¬
cogemos en otro lugar una serie de intere¬ santes datos históricos que figuran en di¬ cho trabajo.
Bajo las iniciales Fr. M. Ll. se ocultaba el nombre del corista Fr. Miguel Llompart, muy versado en historia y clasicista. Hasta en las crónicas usaba aquel estilo, un poco pesado y farragoso. Fr. M. Llompart hacía sus pinos
en la revista escribiendo «La luz de la ver¬
dad». Véanse unas líneas de dicho artículo
que parecen sacadas de un texto del siglo dieciséis: «Ni es mucho que así suceda co¬ mo que los individuos y los pueblos vanse alejando y desviando cada vez más de la verdadera senda y camino derecho, de la vi-

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da sobrenatural y divina, de la verdad sin mesura y sabiduría infinita e inefable que no es otra que Jesús nuestro Salvador».
Muy empapado de franciscanismo, Andreu Caimari, Pre. i Terciari, en «L’Orde Tercera a Mallorca» daba un recorrido por la histo¬ ria franciscana de Mallorca y, en breve sín¬ tesis, hacía pasar por ante los ojos del lec¬ tor los personajes de la familia seráfica más distinguidos por su santidad, empezando por los de la corte real mallorquina, con alusio¬
nes a hechos históricos más o menos rela¬
cionados con los franciscanos de la isla.

NOTA DE LA DIRECCIÓN.
-Una vez más recordamos que
los artículos publicados en esta revista expresan sólo opiniones de sus respectivos autores.

En «Centenario glorioso», el joven colabo¬ rador Fr. B. Verger, T. O. R., después de re¬ ferirse de pasada a los centenarios de Dante Alighieri, autor de la Divina Comedia, y de Santo Domingo de Guzmán, fundador de la Orden Dominicana, se extendía en conside¬ raciones sobre la importancia de la Tercera Orden de San Francisco, cuyo centenario se
estaba celebrando. Hacía resaltar la trans¬ cendencia e influencia bienhechora de la
fundación de Francisco en el siglo XIII, com¬ parando dicho siglo con el actual, necesi¬ tado, como aquél, del espíritu franciscano.
Fra Jaume Rosselló, T. O. R. publicaba un
«Himne a la Immaculada». Se estaba en di¬ ciembre, el mes de la Patrona de toda la familia franciscana.
Y en la página siguiente, otros versos, de A. García Rover, «La labor del Sant d’Assís», versos, ciertamente, no de anto¬ logía.
«Blanquerna», esta vez en prosa mallor¬ quina, rompía lanzas en favor de la prensa católica. Aconsejaba a los terciarios que,
como fruto de la celebración del centena¬ rio, favoreciesen dicha prensa, entre la cual «hi ha l’HERALDO DE CRISTO que hauria
d’esser la revista predilecta del terciari ma¬ llorquí». El epígrafe del trabajo de Fra R.
Sobre 2 tabletas — P. V. P. 1'90 Ptas.
Caja 10 » — P. V P. 9'80 Ptas.

Ginard Bauçà era «Hora est jam de somno
surgere».
El P. Raniero Luconi, T. O. R., historiador de mucha responsabilidad, estudiaba los orígenes de la Tercera Orden Regular, con gran abundancia de datos. El título de su trabajo era «La Orden Tercera Regular de
S. Francisco».
El bibliotecario Salvador Ros, Terciario, daba noticias sobre la antigua biblioteca del Convento de San Francisco de Palma, que reunía un total de 5.852 volúmenes. Entre ellos había, en seis armarios, 276 referentes a Ramón Llull.
«Eli és gros això; però gros de tot!» Así se titulaba la contarella de Es Vey de Son Alegre. Con sus manidos recursos de pala¬ bras trabucadas y milagrosos razonamientos convencía a los interlocutores para que qui¬
sieran hacerse todos terciarios. Era la con¬
tribución del bueno de P. Pons para el logro
de los fines del centenario.
Sin firma, iba luego una reseña del «Ter¬ cer Congreso Nacional de la O. T.». Era el Congreso celebrado en Madrid con motivo del Centenario, al cual nos hemos referido repetidas veces.
En «Crónica Franciscana» se informaba so¬ bre las «fiestas centenarias en la Basílica de
los SS. Cosm.e y Damián (Roma) e igual¬ mente sobre las que habían tenido lugar en nuestra iglesia de San Francisco de Inca. Nosotros que fuimos testigos presenciales de estas últimas, podemos asegurar que re¬ sultaron verdaderamente solemnísimas. Por falta de espacio no podemos pormeno¬
rizar.
La «Necrología» estaba dedicada exclusi¬
vamente al fallecimiento de los esposos don Isidoro García y doña Margarita Vingut, con menos de un mes de diferencia del uno
y a la otra. Eran los padres de nuestro P. Juan A. García, también ya fallecido.
Las dos últimas páginas las ocupaba el
índice de todo el año.

VIEJECITOS

£ntRE las muchas cuestiones que
en este tiempo se ofrecen a la aten¬ ción de la opinión pública, va ocupando lugar destacado el tema de la longevidad. Las estadísticas nos dicen que la espe¬ ranza de vida aumenta para el hombre y sobre todo para la mujer, y revelan un envejecimiento progresivo de la socie¬ dad. Y cuando la estadística lo dice, ya podemos, uno de cada dos, ir encargan¬
do un buen bastón en que apoyar nues¬ tra vejez.
Paralelamente, los trabajos de divul¬ gación médica, las noticias sobre los congresos de gerontología y las normas de la Jefatura de Tráfico van informan¬ do a todo ciudadano del sistema de vida adecuado para conseguir sobrevivir; a plazos naturalmente, como corresponde
a una sociedad de consumo.

puede temerse que con la propaganda que hoy se hace a la longevidad sean le¬ gión los que se sientan inclinados a de¬ jar el tabaco, hacer ejercicio físico, co¬ mer moderadamente, relajar los nervios y permanecer en casa los fines de sema¬ na. El resultado será que, en un futuro más próximo de lo que esperamos, el nú¬ mero de longevos aumente hasta límites no previstos y resulte que la sociedad no esté bien preparada para recibirlos,
tal como ocurre en nuestros días a las
urbes con los automóviles y a las univer¬
sidades con los estudiantes.
Es sabido cómo los viejecitos de anta¬ ño eran generalmente venerados. Pero las cosas han comenzado a cambiar, y comienza ya a ocurrir que sólo se les to¬ lera si la pensión lo hace rentable. El día

La postura general ante este tema sue¬ le ser superficial, cierta ilusionada y es¬ céptica complacencia, pero nada más. Algimas veces claman en el desierto, pero los más, y es de temer que entre ellos los responsables, se desentienden del asunto para atender a sus preocupacio¬ nes del día, y puede ocurrir que esto de la longevidad se enfoque con la misma ligereza con que se enfocaron en su día el problema de la circulación y el de la
educación.

——

Obsequie a sus familiares y amigos con una suscripción anual a

«HERALDO DE CRISTO»

Es una manera cordial de repetir 12
veces «ME ACUERDO DE TI»
L

Hemos de tener en cuenta que el au¬ mento de longevidad que en estos mo¬ mentos se registra es dedibo muy proba¬ blemente a causas inconscientes y fortui¬ tas. La gMite va cumpliendo años por rutina y sin proponérselo. Sin embargo,

«La prensa católica ha de florecer. Quisiéramos que su voz
fuese más fuerte».
(PABLO VI)
>

de mañana, cuando se produzca esa pre¬ vista masificación de viejecitos, nos ve¬ remos enfrentados a problemas insolu¬ bles: la circulación por las aceras se ha¬ rá cada vez más lenta y pesada; los li¬
bros de memorias cubrirán los escapara¬
tes; habrá que crear guarderías y hasta escuelas donde proceder a su readap¬ tación; será necesario impulsar el cine ancianil y se plantearán otras muchas cuestiones que escapan a la imagina¬
ción.

soy enemigo de la longevidad. Por el con¬ trario, este artículo pretende ser un gri¬ to que despierte a quien corresponda, para que se planifique y programe debi¬
damente ese nuevo mundo que se ave¬ cina.
Compréndanlo. Si el ejercicio físico, el fumar menos, comer moderadamente, re¬ lajar los nervios y permanecer en casa
los fines de semana da los frutos pro¬
metidos, yo espero ser uno de esos vie¬ jecitos.

No quisiera dar la impresión de que

DATILE

PARTIERON HACIA LA CASA DEL PADRE

SELVA.—Día 3 de octubre y a la edad de 95 años, doña María Rotger Morro, madre de Sor Antonia Bennàsser, Fran¬ ciscana Hija de la Misericordia.
SABIOTE (Jaén).—Día 17 de octubre,
D. Juan Gallego Martínez, padre de nues¬ tros hermanos de hábito, Fr. Juan y Fr. Antonio Gallego Zambrana. El primero Administrador de nuestro Colegio «Rai¬ mundo Lulio», de Madrid; el segundo. Coadjutor en nuestra Parroquia de San José, en Viena.
PALMA DE MALLORCA.—Día 22 de oc¬
tubre, D. Miguel Salvà y Riera, Tercia¬ rio franciscano y Coronel de Artillería, y
hermano de nuestro estimado colabora¬
dor en esta revista y Dirigente Provin¬ cial de la T. O. F., D. Jaime Salvà.
INCA.—Día 3 de noviembre, Sor Fran¬ cisca Ana Seguí Molinas, Hermana Fran¬

ciscana Hija de la Misericordia. Contaba
92 años de edad.
D.“ Maciana Planas Ferragut (18 agos¬ to).
D. Bartolomé Maura Llinás (9 octubre).
D.^ Margarita Vidal Socías (8 noviem¬ bre), los tres de la Fraternidad Seglar Fran¬
ciscana de aquella ciudad.
MURO.—Día 19 de noviembre, a la avanzada edad de 95 años, doña Catalina Vallespir Estelrich, madre del Reverendo
P. Esteban Cloquell, Director del Colegio de «San Francisco» de Palma, y ña del Rdo. P. Baltasar Cloquell, Director del Colegio de «San Buenaventura» de Llucmajor.
Suplicamos a nuestros lectores una oración por el eterno descanso de los difuntos reseñados. Que la Luz Perpetua
los ilumine.

OTRA ESPLENDIDA JORNADA TRIMESTRAL DE FRATERNIDAD

El 4° domingo de octubre, día 24, fue

Sunyer Ramos, el cual se desvivió por
atendernos inmejorablemente.

el escogido por la Junta Provincial de la

T. O. P. para reanudar la ya antigua cos¬

tumbre de reunirnos trimestralmente los

terciarios de Mallorca para la oración,

para la
acción

convivencia fraterna y para la
de gracias por los dones recibi¬

dos y para poder contemplar encantos

y maravillas de nuestra isla.

Una vez que nos hubimos saludado go¬
zosa y fraternalmente los componentes de los distintos grupos (Inca, Llucmajor, Manacor, Muro, Palma y S’Horta), entra¬
mos en la Sala parroquial, donde tuvo
lugar la interesante y acostumbrada «bu¬ lla de germanor». En un clima de senci¬
llez familiar, fueron muchos los que co¬

secharon abundantes aplausos. Destaca¬

Según las instrucciones cursadas por mos la destreza y buen humor que de¬

la mencionada Junta Provincial, cada Fraternidad había organizado la ruta de
la mañana a gusto propio. Fue ya por la tarde, a las 3, cuando nos congrega¬ mos todos delante de la iglesia parro¬
quial de S’HORTA (Felanitx). Fuimos re¬
cibidos por su atento Párroco, Mn. Joan

mostraron las jovencitas de Manacor, In¬
ca y Palma. Y nos encantó la deliciosa
«codolada» de «madó Catalina Mestre¬
ssa», la cual, a sus 94 años de edad, de¬ mostró tener una memoria muy feliz.
«Madó Catalina» es de S’Horta. Recitó óptimamente una bellísima poesía ma-

llorquina el P. Miguel Colom, Director de la T. O. F. de Inca y de esta revista.

^^ Difundir la lectura y suscripciones de

A las 16,15 empezaba —dentro del tem¬ plo— la meditación platicada. Corrió a cargo de la Secretaria Provincial, Srta. doña Isabel Ferretjans. Glosó con ex¬ traordinario acierto algunos de los con¬ ceptos que ella misma había escuchado de labios del Papa actual, cuando el 19 de mayo de este mismo año, se dirigió a más de 15.000 seglares franciscanos
concentrados en la Basílica de San Pe¬
dro. Pudimos constatar que al buen decir a que nos tiene acostumbrados la citada Hermana Secretaria, se le unía el hecho de haber escuchado desde muy cerca al Vicario de Cristo, con motivo de la au¬ diencia del referido día 19 de mayo. Al¬ guien comentó: «No es lo mismo haber leído un discurso del Papa que haberlo oído estando a dos pasos de él».
Acabada la meditación, empezó la so¬ lemne misa concelebrada por los PP. Jau¬ me Tugores, Antoni Pericas y Sebastià Ginard Ferragut, todos ellos de la T. O. R. El P. Jaume Puigserver, Consiliario Provincial de las Jufras, dirigió el canto. Y nuestro Asistente Provincial —el ya mencionado P. Tugores—, sacó fuerzas de flaqueza para dirigirnos muy acertada
homilía. Sirvióse de la Palabra de Dios
de aquel domingo para hacernos ver el mensaje que contenía y para destacar la importancia del Domund, sin olvidar las fuertes exigencias que debían tener para nosotros, los seglares franciscanos, dicho mensaje y el problema pavoroso de
las misiones.
Concluido el Sacrificio Eucarístico, ex¬ actamente a las 17T0, nos despedimos
todos los asistentes de esa nueva y mag¬
nífica jornada de fraternidad.
Gustoso cumplo con el encargo que me hizo la Junta Provincial: agradecer al ya citado Mn. Joan Sunyer y a sus feligre¬ ses, entre los cuales hay un reducido nú-

• HERALDO DE CRISTO»
Es un medio fácil de llenar da MENSAJE franciscano el mundo de hoy.

—

mero de terciarios (y no terciarias), las
atenciones tenidas con nosotros. No fue¬ ron pocas. Que el Señor se las recom¬ pense con creces.
Un jornadista.

Brevemente;
1) El Reverendo P. Antonio Barceló Mo¬ ra, Comisario Nacional de la T. O. F. por parte de los Franciscanos de la T. O. R.,
ha pasado a actuar como Presidente de
turno dentro de la Junta Nacional de la
T. O. F.
2) El Reverendo P. Francisco Batle Pons, Secretario Provincial de la T. O. R. y Superior del Convento de San Fran¬ cisco de Palma de Mallorca, ha sido nombrado Vice-Comisario Provincial de la T. O. .F. de Baleares. Empezó sus fun¬ ciones a últimos del pasado mes de oc¬ tubre, después de recibir el nombramien¬ to del P. Ministro Provincial de la T.
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Al finalizar el Vil Centenario de la fun¬ dación de la Tercera Orden Franciscana, en diciembre de 1921, Fr. Pedro J. Cerdà pu¬ blicaba un artículo en esta revista, titula¬ do «Recuerdos del Centenario.—Nuestra Orden Tercera» («Heraldo de Cristo», di¬ ciembre de 1921), del cual entresacamos
los siguientes datos referentes a nuestra
isla:
Desde el siglo XIII existe la Tercera Or¬ den Franciscana en Mallorca, o sea, a raiz de la conquista misma.
A juzgar por los datos de los archivos, andando el tiempo, llegaron a ser muy nu¬ merosas las Hermandades mallorquínas.
Expulsados los religiosos en 1835, hubo de venir una época de decadencia, amino¬ rada por el amor que los pueblos tenían a la Tercera Orden y por el cuidado que pu¬
sieron en sostenerla los sacerdotes exclaus¬
trados y aun muchos sacerdotes seglares.
Hasta nuestros días han llegado los fru¬ tos de aquellos esfuerzos: hay hermosas
muestras de los mismos en la fundación de
alguna Hermandad nueva, como la de Llo¬ seta, que data de aquella época. Y, desde luego, se habían conservado con muy buen espíritu franciscano Hermandades fundadas hacía siglos en los pueblos principales de la isla (Inca, Manacor, Felanitx, Llucmayor, Campos, La Puebla, Petra) y en la misma capital, funcionando con las naturales alter¬ nativas de actividad y flojedad, pero sin ex¬

tinguirse jamás.
Al establecerse, en 1893, los Francisca¬ nos de la Tercera Orden Regular en Ma¬ llorca, se animaron y se pusieron en movi¬ miento las Hermandades; y se fundaron nuevas en casi todos los pueblos de la isla donde no las había. Y vinieron días de ex¬ traordinario florecimiento.
Las Hermandades organizadas que exis¬
tían en Mallorca hace cincuenta años eran
treinta y seis. Si se tiene en cuenta que las poblaciones de la isla eran sólo cuarenta y nueve, resulta que la Tercera Orden estaba instalada en el 70 por ciento de ellas.
El número de Terciarios no bajaba de dieciséis mil, el 5 por ciento del número to¬ tal de los mallorquines.
«Y es muy agradable consignar —escri¬
bía el P. Cerdà— el entusiasmo con que
algunos beneméritos sacerdotes han acogi¬ do la Orden Tercera, y la simpatía con que la han mirado nuestros párrocos; contribu¬ yendo, cada uno en su esfera de acción, al engrandecimiento que acabamos de se¬
ñalar».
Una de las muchas manifestaciones de
piedad y de fe que daban los terciarios eran las peregrinaciones anuales, iniciadas en 1909, de tal modo que en 1921 ya se celebró
la duodécima. «Y todos saben que estos ac¬
tos, en que se reúnen miles y miles de ter¬ ciarios, constituyen la más bella muestra de la general religiosidad mallorquina».

**
Regalos prácticos La ¡oven señora dice a su marido: — En éste próximo aniversario de boda vamos a dejarnos de tonteríos y a hacernos regalos prácticos: yo te regalaré a ti una corbata y tú o mí un abrigo de pieles.
Retraso explicado Una señorita llega a la que estaba invita¬ da con tanto retraso, que la gente se está

marchando ya. Para disculparse dice-Perdón. Pero me he metido en una
tienda...
¡Ahí Y se le ha ido el tiempo sin darse
cuenta...
— No. Es que me he metido en una tienda pero entrando por el escaparate con el
coche.
Por si acaso
-Yo —dice un contertulio- cuando veo
una injusticia no puedo contenerme y tengo
que protestar. — ¡Ahí -replica otro — . Pues yo protesto
a veces antes de verla.

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