AÑO XXIX

^^^Stei!g3featett.-ir—^v-. .|

Gafedral de Sevilla, una de las afortunadas cate¬ drales de España en cuyo campanario y altar cam¬ pea triuníalmente el signo de nuestra redención.

ABRIL 1937

NUM. 330

Comer Galletas
pero,....,.........

CETRE
©
F á b ric a y despacho:
Bolsería, 7 -- Palma de Mallorca

l^il>rena Escol ar

Vicente Roig

VENTA DE TODA CLASE DE OBRAS AL CONTADO Y A PLAZOS. • ESPECIALIDAD
EN MATERIAL DE ENSEÑANZA

P. Cort, 4

Palma de Mallorca

Pastas alimenticias
PRODUCTOS DE lA MEJOR CALIDAD
Anticua Casa Juan ci ar
Sombrereros, 11
PALMA DE MALLORCA

Pianos y Autopíanos de todas marcas

Venta exclusiva de los

chassAigne freres

Al contado y a plazos

Anticua casa BANQUÉ
de José Balaguer

COLON, 06

Palma de Mallorca

DROGUERIA

JJ\\OJO SU E VVIIL LM A COLL.

Aparatos, ^

Productos, material fotográfico Drogas, colores, pintu* ras, esmaltes, barnices, brochas, pinceles, Jabo* nes, telas, tubos y co¬ lores al óleo, acuarelas y pastel.

P. Sta. Eulalia, 2

Palma

PANADERIA DE

ANTONIO JÜLIÁ

Pan moreno y blanco, ensaimadas y todo lo concerniente al ramo.
Se sirve a domicilio

'^yallori, 20

PALMA

FABRICA DE GUANTES
Abaniquería, Peletería, Paraguas, Sombrillas, Sacos de piel para viaje y Objetos para regalo
PRECIO FIJO
JOSE ROVIRA
Plaza Antonio Maura, 1S y Brosa. 1
PALMA DE MALLORCA

MUEBLES • DECORACION • TAPICERIA

Fábrica: socorro, 48 ® Despacho: sindicato, 26 al 32

PALMA DE MALLORCA

Teléfono núm. 1213

Alpargatería
Mijos S. Fpiconer
Espartería de todas Clases al por mayor y menor: Sección alpargatería
de.diferentes formas.
Sindicato, 66 ^ PALMA
Telegramas: HDQS FALCONER

Antigua casa Falconer
Sucesor
S. MAS REUS
Arinas—Arroces-Cereales
Salvados—Legumbres Despacho: Arbós, 1 Almacenes: Hostales, 26 - 30 - 32 - 43
Teléfono 2123 - PALMA

GUIUERMO SOLER
Calle Jaime 11, 4 — Palma de Mallorca
cxxiooooceooocooooeoooooooo

Panadería Confitería Pastelería
Forn de RIassa
ESFECiaL·lDOD EN ENSSIlHflOaS Plaza Mayor, 39 y 40
con sucursal en la
calle de San Miguel, 33 esquina Gater.

Baratura de Caizodos

Llquidacíún de 14.000 Pares cas! regalados

CABALLERO en negro, color o charol desde 7 a IZ ptas,

SEÑORA NIÑOS .....

^ 3 a lü » KfJ
» Z a 11 »

MODELOS BONITOS Y MUY FUERTES

Anselmo Clavé, 19 - PALMA - (junto Nuevo Mercado Hortelanos)

e

oooooooooooooooooooooooooooo
DMOGUIEMA ¥ FElRimETEMIA

LA COCINA
LOZA CRISTAL PORCELANA P“ MERGAOAI 2i
UUfONO 23«

/256 CALLE SINDICATO 122 • PALMA DE MALLORCA

FABRICA CERRAJERIA
EN SERIE TORNERIA MECANICA
LUIS MARTIN (C^SAUtCHt )

O OOO O O O O O Ooooooooooooooooooo

PENSION BARCELÓ

Precios ]Be onómicos

CALLE UNION, 34.-PALMA
^
Habitacioneí ventiladas 0 A^ua corriente.
Termosifón S TRATO FAMILIAR.

FABRICAS
DE
CUERaaS, BlPBRGaTBS Y lONBS
Catalá y
Riutort S. L.
OBRAS DE PALMITO
Lonjeta, 14 - Teléfono 1761 Palma die Mallorca
ooooooooooooo

ílLMílCENES CÍI'N
BOU
TEjIDOS NOVEDA¬ DES PARA SEÑORA Lencería, Lanería, Pa¬ ñería y toda clase de géneros para caballero CASA DE
CONFIANZA
PRECIOS L·IMITRDOS
Siete Esquinas, 14
L.ALMA
pr

Año XXIX

Palma de Mallorca, Abril 1937

Núm. 330

Dirección y Administración
RAMÓN LULL, 3 CONVENTO DR SAN FRANCISCO

- Precios de suscripción:

Baleares

3'00 Ptas. aflo

Península Ibérica

4'00

>

»

Número atrasado ,

0’30

»

»

DEL MOMENTO

c::^punteá j7a.ta el

tancucíina

En la ciudad de Jimena tenía, desde hace tiempo buenos amigos. Uno de ellos, con la voz empañada por la emociója, me va rela¬ tando el martirio lento de esta ciudad, digna de mejor suerte, hasta el momento que fué libertada por los requetés que mandaba el
capitán Villalta. Los primeros días-dice-fueron de calma. Calma aparente, rela¬
tiva Y fugaz. Un falangista lleva la notidia de haber triunfado en toda España
el movimiento; fué la primera víctima: primero, encarcelado,- y, más
tarde, muerto por los marxistas. El 20 de Julio, huelga general. Vienen los campesinos. Presagios
de tormenta, que pronto se desencadenó. 5. No puede silenciarse el heroísmo, desgraciadamente sin resultados,
de don Emilio Carballo.
Resistirse a cumplir la orden del Comité. -«Mi escopeta no la entregaré a nadie. La necesito para mi defensa.» Lo encarcelaron. Más tarde murió como cristiano y como español.
El día de Santiago, después "de celebrar ía Santa Misa en la Misericordia, fue detenido
por los escopeteros el sacerdote franciscano Padre Justo Rivero. Lo llevaron al Comité a declarar, no sin padecer vejaciones e insultos. Entre tanto, rodean la parroquia de la Coronada, con pretexto de una supuesta reu¬
nión fascista.
En dicho templo se encontraba el párroco, conocido ''escritor y santo franciscano P. Marcelino Lázaro, acompañado del seminarista Martín Bueno, del acólito Cayetano Lobilloy un grupo de católicos, entre ellos don Gonzalo Vallecillo Jiménez, conocido por su bondad, y cuyo prestigio entre la clase humilde se lo había conquistado con sus continuos favores y laboriosidad. La piadosa cieguita Antonia Durán, con algunas seño¬ ras más, completaban la «reunión».
Se presenta el P. Marcelino ante el pueblo. Les habla... Todo inútil. La fiera está sedien¬ ta de sangre. Reclama víctimas. La impresión que causara el sabio franciscano con su pre¬ sencia Y elocuente palabra, desaparece al punto. Se oye un disparo. Y como si fuera una
consigna convenida, crecen los gritos y todos se preparan a morir. El Señor quería que a la muerte precediera una pasión semejante a la suya. Por la
calle Sevilla, nueva calle de la amargura, son llevados como Cristo, y como Cristo obli¬
gado el autor de «Lá Castidad Virginal» a desprenderse de su sayal. Pero se niega, y la turba desiste de su empeño. Pepe Segovia, lider de la C. N. T., y Antonio Marina, masón,' representan la comedia
de reprochar a la turba su acción, y dan la seguridad de que nada Ies sucederá a los de¬
tenidos.
Tampoco le iba a suceder nada a don Emilio Carballo. ¿A quien querían engañar?

54

El Heraldo de Cristo

Del Comité pasan unos a la cárcel, y otros, como los dos sacerdotes, son «puestos en
libertad».
Y en «libertad» estuvieron en la parroquia, custodiados por los milicianos rojos, co¬ miendo por el flamante sistema de «vales» y sin más visitas que la del seminarista, hasta el día que se los llevaron al martirio.
Mientras todo esto sucedía, iba adelante el régimen comunista, con todas las delicias a él anejas, que debían conocer al detalle los papanatas que aún sueñan con Rusia.
Un día, se presentó la Comisión de la Muerte.
Es la cuadrilla de Flores Arocha con éste al frente.
Recorren la población, ante el espanto de los mismos rojos, preguntando por las per¬
sonas de derecha.
Otro día es un joven que, en un rapto de locura, se echa a la calle vitoreando a Cristo Rey.
Los sufrimientos lo habían trastornado. ¡Pobre Luis González! Por este tiempo llegaron los milicianos malagueños, quienes profanaron el santuario de la Patrona, la Reina de los Ángeles, destrozando esta imagen de gran valor por su.
antigüedad y por la devoción que le profesaban los jimenenses. Y el comunismo, al mes de implantado, fracasó. Los mismos que lo habían implantado, lo suprimieron. ¡No queremos comer-decían-lo que le dé la gana al Comité! ¡Queremos cobrar por
nuestro trabajo! Los del Comité, como buenos marxistas, se guardaban las provisiones, mientras el pue¬
blo no tenía de qué comer.
Llegóse hasta lo increíble: Descubiertos los manejos de los dirigentes rojos, tuvieron que ir a la cárcel, sacar elementos de orden, y ponerlos en el Comité de abastos.
El día que tomaron nuestras fuerzas Bastellar [27 de agosto), se llevaron a los presos a San Pablo de Buceite, andando.
Entre ellos iban los dos franciscanos,- don Gonzalo Vallecillo y su hijo Juan de Dios,don Emilio Carballo, el falangista que dió la noticia del movimiento en los primeros días,
y algunos más. En San Pablo se divide a los detenidos en dos grupos: Al grupo de forasteros lo encie¬
rran en una cuadra, donde tienen un solo plato, una sola cuchara para comer, y el estiér¬ col por lecho.
El 5 de septiembre hacen correr ellos mismos el rumor de que llegan los regulares, para llevarse a los presos.
Son conducidos a Gaucín, también andando. Un testigo de vista afirma que el P. Mar¬ celino iba con el aspecto de un mendigo y el traje de paisano hecho girones. Y un mili¬ ciano se gloriaba de no haberle dejado en el cuerpo parte sana, de los culetazos que le había dado por el camino con su fusil.
Los detenidos que conducían a Gaucín eran doce, y, apenas emprendieron el camino, apartaron a dos y los fusilaron.
Y desde Gaucín, en tren especial, hasta Arriate. En todas las estaciones bajan a los prisioneros, para que presencien sus discusiones
sobre sí han de matarlos allí o más adelante.
Por fin, deciden sacrificarlos en Benaoján. No contaban con la nobleza de este simpᬠtico pueblo malagueño, que se opuso rotundamente. Otra vez los detenidos al tren, y en marcha hasta Arriate. En este pueblecito se detienen, y, para impedir se repita el caso de Benaoján, los conducen a unos docientos metros de la estación. Unos vítores a Cristo Rey y a España. Varias descargas. En el suelo, unos cadáveres, desnudos, porque hasta sus ropas les han robado. En el cielo, diez mártires más.
Y aquella sangre derramada en Arriate, aplacó la ira de Dios, borrando los pecados
de Jimena.
Despues de unos disparos de nuestra artillería y al grito de «¡Viva Cristo Rey! ¡Jimena por el Rey!», los primeros requetés entran en la ciudad.
Al frente de ellos, el capitán Villalta, Solís, Juan Pedro. Con ellos, once requetés de San Roque.
Los presos son libertados, gracias a un carabinero que se opuso a que los quemaran, a la llegada inesperada de los boinas rojas.
A poco llegan los Regulares. El sufrido vecindario, que al principio desconfiaba de los requetés, por creerlos milicianos, reacciona y vitorea. ¡Jimena la mártir, estaba salvada!
'
GARCIA-JIMENEZ.

(D« «La Unión» de Sevilla).

El Heraldo de Cristo
RITMES ARTANENCS
Paisatge arianenc...
Paisatge artanenc, que jo estim com s'estima una mare, puix m'has engendrat a la vida de l'art i poeta m'has fet: som fill teu! O paisatge artanenc que t'enconques en mig d'uns serráis revinguts, com uns braços de pedra que Déu reinflà i encorbà al teu entorn perquè et guardin, tu ets el verger on poncellen les flors dels meus somnis, esquiu i rebel als afanys de buidar-te en mos versos! Tu m'has descobert la Bellesa, que sèu vora el límpid cristall llis i tou dels cocons, i divaga, serena, per horts, pollancredes, molins, senderols, siguióles, i et posa una tendra i amable claró amb sa presència. Oasi de pau, en l'inhòspid Sahara del viure, on trob soletat per parlar, fer volar mes idees -estels virolats-i on repòs en coixins de silenci. Tu m'has ensenyat a llegir les vivents meravelles que Déu deixà escrites en tu, per amor dels poetes, amb lletres de flors i verdesca, de valls i muntanyes, paisatge artanenc, llibre obert que, de tanta substància, crivelles! Jo't vull immergir en el llac dels meus ulls i esculpir-te al marbre calent del record per pastura de l'ànima,- . jo vull que flueixis, fet música i nombre, en mes odes, i els mots sien copes d'essència i de llum artanenca, i ullals per on saltin les fonts amb borbolls de rialles. Jo vull amarar aquests ritmes de barbre amb l'elíxir extret dels teus sucs de bellesa perqüè no els m'afollin els cores rosegaires del temps que taladren els versos, els buiden de vida i els colguen amb pols d'oblidança. Amb roses d'imatges te vull coronar, escollides al rosera etern de l'amor, que és el màxim poeta, i és ciència directa que dóna la clau dels enigmes, i sap, i esbessona, i declara els secrets més recòndits. Te sent dins ma sang: cada indret, cada bri, cada pedra, hi fan arribar llurs arrels que, abeurant-s'hi, me fermen a tot, i combreg amb tes fruites, ton oli, vi i aigua: que ets tu, o paisatge artanenc, que me llesques el pa de O, si jo dictava, per fer-te homenatge condigne, un ritme immortal que tingués la durada perenne i humil de tes fonts que, entre molsa, verdet i falzia, cordellen son broll, com un vers infinit, a

«waoiaaaegaiaaiiwa^ciiwtaaat^tfaagaaBWiaiaBgiiftaiiKataiiKKsasigjBattimiifciisaaarjaitiM^^

I

A/uavoò Jleivítaò

Señor: aquí estoy; grano de trigo soy segado y trillado en fus eras, Señor..., cuando quieras me puedes moler, que yo quiero ser polvillo de harina, que forme
tus hostias de Amor.
'No fe tardes, si quieres. Señor.' ' Dios, Molinero.'
'
tu molino harinero,
■•'e quiero

jlaboradores
I Gaya Sansó, ajado, cual ro¬
utes In Aeternum
án de su postración criticarán y ofrecerán ) a los siglos venideamor que con un gesto
nuestros hermanos en

.n seminarista de Málaga, estando en poder hermanos, fusilados poco antes.
iSsiiíWífiïvfe'

Á/uavoi Jlwítaá

Señor: aquí estoy, grano de trigo soy segado y trillado en tus eras, Señor..., cuando quieras me puedes moler, que yo quiero ser polvillo de harina, que forme fus hostias de Amor.
/No fe fardes, si quieres. Señor.' /Oh mi .Dios, Molinero.' /Echa a andcr tu molino harinero, y muele la harina, que quiero
ser hostia de Amor/
Señor, //que te espero.''/ '/Empuja la rueda, dolor.'/ *

«El Heraldo de Cristo» se complace en felicitar cordialmente a sus cí^laboradores
los nuevos ministros del Señor: Fr. Antonio Martorell Miralles, Fr. Juai#Gaya Sansó,
Fr. Jorge Coll Mut, Fr. Mateo Ramis Cladera, sobre cuyas manos ha b^ado, cual ro¬ cío divino, la unción del Espíritu Santo, y los ha constituido sacerdj/lss In Aeternum
según el orden de Melquisedech.

Estos son. Señor, del Sagrado número de aquellos que levantaran de su postración

ignominiosa el púlpito y el altar de España y en todo lugar s^rificarán y ofrecerán
a tu Nombre aquella oblación munda que anunció Malaquía/ a los siglos venide-

. Estos cantarán, Señor, si es preciso, aquellas coplas de /mor que con un gesto

no de San Ignacio de Antioquia nos enseñaron. Señor/ nuestros hermanos en jcrlsto los nuevos mártires de España:

de Jimen

Despues^

por el Rey!»,
Al frente d
San Roque Los presos son’
la llegada inesper A poco llegan
los requeíés, por

«Señor, aquí estoy. grano de trigo soy segado y trillado en tus ere Señor..., cuando quieras me puedes moler...»

una pósala oompueita por seminarista de Málaga, estando en poder lo correr la suerte da sus germanos, fusilados poco antes.
(De «La Unión» de Sevilla).

ALLELUYA
Se refíra medrosa la noche enlutada...
La luz primera
del alba sonriente
vestida con color de primavera con matices y galas coronada
asoma en el Oriente.
)¿ eri las ramas sombrías del roble y la encina de aljófar rebosantes, con su voz argentina
estrofas de alegría palpitantes
al aura lanzan, ávidos cantores
los tiernos ruiseñores.
Y en el prado y en la sierra; y en el cielo azulado y en la tierra,
todo canta, todo ríe, todo canta todo sonríe
Aleluia, alegríal
Cantad ruiseñoresi
Alegría, alegríaj Cantad los jilgueros! Aleluia, alegría...! Responded senderos... Alegría, alegría/ ¡Cantad mis amoreslll
Aleluia, alegría! que aquel que murió, alegría, alegríal
Jesús resucitólll
FR. JOSE FORMES T. O. R.

58

El Heraldo de Cristo

LA VIDA ERMITAÑA EN MALLORCA

f Conclusiófi)

Una flor del desierto

El autor de la Vida de la Vble. Sor^María del Ssmo. Sacramento,

Religiosa dominicana, habla incidentalmente de nuestro biografia¬

do, Y Iss cortas frases que le dedica dejan barruntar algo de su bue¬ na fama: «Distante media legua poco más o menos de la casa de

Sor Ana María, allá cerca lo superior de la montaña están las ermi¬

tas de Trinidad, en las cuales han vivido siempre y al presente

viven ermitaños de santa vida. Pues bien, ella iba a aconsejarse con

ellos. Un día pensó; los ermitaños tendrán algún modo de discipli¬

narse derramando sangre por Jesucristo». Fuese allá para que el

Superior Juan Mir le hiciese la caridad de dejarle unas disciplinas.

Accedió a sus ruegos el‘Superior y (según confesó siendo religiosa)

estimó ella aquel santo instrumento de penitencia más que si le

hubiesen dado una rica corona. Un día le dijo su confesor: «¿Cómo

tú, doncella, te ibas sola a hablar con los ermitaños? Padre, respon¬

dió ¿Piensa V. M. que yo mirase a aquellos ermitaños como a hom¬

bres, sino como espíritus bienaventurados en el cielo? y tino de ellos me parecía tan gran santo que yo le miraba cual otro serafín llagado Francisco,

por la gran virtud que tenía. No era este sinó Juan Mir, el cual vivió 53 años en el desier¬

to Y murió dejando fama de santidad.» Según una nota redactada en mallorqín-añade el mismo autor-la Vble. Sor Ana María tuvo visión de Dios después de la muerte de este

ermitaño, al cual vió gozando de la gloria, teniendo a sus pies una muralla en premio de su retiro y soledad, y un escudo en su pecho en recompensa de su mortificación.
Por otra parte, pláceme copiar unas palabras de nuestro historiador Antonio Furió,

quién haciendo referencia a una pintura (que ya no existe) del Oratorio de Miramar, es¬ cribe: «Más de una vez hemos contemplado postrados ante las aras de un gótico altar, en el que la Divina Trinidad, pintada sobre madera, se representaba por tres personas huma¬ nas; al Dr. Iluminado Bto. Raymundo Lulio, enseñando a sus colegiales la lengua arábiga, ala graciosa aldeana Bta. Catalina Thomás, entregando al Vble. Castañeda unos corpora¬

les de lino bordados en seda por ella misma, y al penitente anacoreta Juan Mir, dirigien¬ do por la senda de la virtud a un emjambre de jóvenes, con los que restableció en aque¬
llos desiertos la vida eremítica.»

Las precedentes notas entrecomadas dicen mucho, muchísimo, casi todo lo que posi¬

blemente ducirse puede sobre el concepto de santidad en que fué tenido nuestro héroe:

Consejero espiritual de la Vble. Sor Ana del Santísimo Sacramento, así como el ermitaño

Antonio Castañeda en el siglo anterior lo había sido de Sta. Catalina Thomás. Visto por

aquélla con luz sobrenatural gozando, después de la muerte, de la gloria del cielo. Y

finalmente, pintada su figura en un retablo sagrado, al lado de nuestros dos Santos mallor¬

quines. ¿Qué más se puede decir? «Hic erit magnus coram Domino.» Realmente Juan Mir

y Valles, de la villa de Alaró, fué grande, muy grande delante de Dios, de los ángeles y

de los hombres. No es de extrañar que al ocurrir su óbito a las 8 ^4: de la tarde del día 12

de Julio de 1688 sintieran profunda conmoción los pueblos comarcanos y acudiera a ve¬

nerar Y besar su cadaver una ingente muchedumbre de personas, hasta de la capital de Palma. El perfume de esta//or del desierto, al marchitarse en el pegueñp recinto de la

ermita, se esparció más vivamente que nunca por toda la Isla, mientras el ’Slma bendita

de Juan emprendía raudo vuelo, recogida por mensajeros celestes, quienes de paso para

el empíreo la presentarían a dar el último adiós a aquella dulce imágen de la Virgen del

Refugio, bajo cuya sombra había empezado a santificarse. La existencia del ermitaño Juan de la Concepción de María en esta vida deleznable

abrió surco muy hondo, y dejó una clara estela gloriosa. Los hombres haciendo justicia a

sus méritos colocaron su retrato al oleo entre los de los Hijos Ilustres en la Casa de la

Ciudad, como también en el Castillo de Alaró y en la Ermita de Valldemosa, contenien¬

do esta inscripción: Vertader retrato del gran sirvent de Deu y Venerable ermità Fr.

Joan Mir de la Concepció natural de Alaró. Visqué 48 anys al desert, 6 en el castell

de Alaró, 42 en el de la Ssme. Trinitat amb gran exemple, y ausieridat de vida

Fonch superior, mestre y guia de molts, que dexát el md se retiraré a la soledat, per

imitar les suas vütuts, amable y volgut. Mori de edat de 64 anys a 12 dejoriol de 1688.

Dicha efigie viste el hábito de ermitaño, calada la capucha,- su barba blanquísima le

llega hasta las manos que se cruzan sobre el pecho. La frente es calva, sus ojos llenos de

espiritual viveza reflejan una dulce paz interior. Todo su aspecto es devoto y humilde.

Gloria a Dios que es admirable en sus santos.

Ruperto del Valle

NOTA. —Conviene coriegír dos cosas. La primera pertenece a la página 25: Juan Mir y Vallés nació, no en 1622, sino en 1624. La otra, a la página 40; El predio que habitó, siendo doncella, Sor Ana del Santísimo Sacramento denCminábase, no Can Costa, sino Sa Torré. Valga la rectifícacióri.-R del V.

mmm

AUGUSTA BENDICION
En la redacción de EL HERALDO DE CRIS¬ TO se ha recibido recientemente una carta
autógrafa del Rvdmo. P. General de nuestra Orden, que nunca sabremos agradecer co¬ mo merece, y cuyos son los siguientes párra¬ fos, traducidos de la dulce lengua de Dante al sonoro lenguaje de Cervantes:

Aprovecho la ocasión para poner de manifiesto mf más profunda

complacencia por la obra grandemente sanadora y reformadora que

despliega esta revista, en los trabajosos momentos por los que atravieso

el valiente y religioso pueblo español. Sus artículos apoyados en las

sagradas bases de los principios religiosos, y saturados, siempre, del

genuino espíritu franciscano del cual nuestro glorioso Beato Ramón

Lull dejó vestiglos imperecederos, encierran todo cuanto podrían

anhelar todos aquellos fieles que se glorían de pertenecer a las glo¬

riosas milicias del pobrecillo de Asís. La recomiendo, pues, de todo

corazón y augurándole un desenvolvimiento mayor y un más vasto,

campo de acción, la bendigo de corazón,

Dvmo. en S. Francisco,

íFirmado]

FR.J'.PARISI

l?Oí»'ó^?2 enero de 1937.

Mtro. Gral. de la T. O. R.

CB=jl e 0

•CLASTR. SdPaoeixn.

/

líos desiertos la vida eremítica.»

Las precedentes notas entrecomadas dicen mucho, muchísimo, casi todo lo que posi¬

blemente ducirse puede sobre el concepto de santidad en que fué tenido nuestro héroe:

Consejero espiritual de la Vble. Sor Ana del Santísimo Sacramento, así como el ermitaño

Antonio Castañeda en el siglo anterior lo había sido de Sta. Catalina Thomás. Visto por

aquélla con luz sobrenatural gozando, después de la muerte, de la gloria del cielo. Y

finalmente, pintada su figura en un retablo sagrado, al lado de nuestros dos Santos mallor¬

quines. ¿Qué más se puede decir? «Hic erit magnus coram Domino.» Realmente Juan Mir

Y Vallés, de la villa de Alaré, fué grande, muy grande delante de Dios, de los ángeles y

de los hombres. No es de extrañar que al ocurrir su óbito a las 8 3|4 de la tarde del día 12

de Julio de 1688 sintieran profunda conmoción los pueblos comarcanos y acudiera a ve¬

nerar Y besar su cadaver una ingente muchedumbre de personas, hasta de la capital de

Palma, El perfume de esta flor del desierto, al marchitarse en el pegueño recinto de la

ermita, se esparció más vivamente que nunca por toda la Isla, mientras el .alma bendita

de Juan emprendía raudo vuelo, recogida por mensajeros celestes, quienes de paso para

el empíreo la presentarían a dar el último adiós a aquella dulce imágen de la Virgen del

Refugio, bajo cuya sombra había empezado a santificarse.

0»

La existencia del ermitaño Juan de la Concepción de María en esta vida deleznable

abrió surco muy hondo, y dejó una clara estela gloriosa. Los hombres haciendo justicia a

sus méritos colocaron su retrato al oleo entre los de los Hijos Ilustres en la Casa de la

Ciudad, como también en el Castillo de Alaré y en la Ermita de Valldemosa, contenien¬

do esta inscripción: Vertader retrato del gran sirvent de Deu y Venerable ermità Fr.

Joan Mir de la Concepció natural de Alaró. Visqué 48 anys al desert, 6 en el castell

de Alaró, 42 en el de la Ssme. Trinitat amb gran exemple, y austeridat de vida

Fonch superior, mestre y guia de molts, que dexát el mú se retiraré a la soledat, per

imitar les suas vütuts, amable y volgut. Mori de edat de 64 anys a 12 dejoriol de 1688.

Dicha efigie viste el hábito de ermitaño, calada la capucha,- su barba blanquísima le

llega hasta las manos que se cruzan sobre el pecho. La frente es calva, sus ojos llenos de

espiritual viveza reflejan una dulce paz interior. Todo su aspecto es devoto y humilde.

Gloria a Dios que es admirable en sus santos.

Ruperto del Valle

NOTA. —Conviene corregir dos cosas. La piimera pertenece a la página 25; Juan Mir y Vallés nació, no en 1622, sino en 1624. La otra, a la página 40: El predio que habitó, siendo doncella. Sor Ana del Santísimo Sacramento denCminábase, no Can Costa, sino Sa Torre. Valga la rectifícacióri.-R del V.

■'

I

Ld ¡)rcsi<lci)ci(t lie Ia ¡¡rocr-
sián ch‘I Via-Critcis del do-
niiiu/o coil el Excnio. ij :: Rdino. Obispo de Vicli. ::

o
GRAFICOS DEL VIA-CRUCIS DE
PENITENCIA POR LA PAZ DE ESPAÑA

Aspecla (¡ue ofrecía la ¡liaza de Sania ‘J'.uhdia, dnranle la jirocesión del Via-Orncis del doniint/o. Por esla foloi/rafía ¡inede el lector hacer¬ se cari/o de la inmensa con¬ currencia de fieles, leniendo en cnenla (¡ne cuando eslaha tan cuajada de ijcnle la mencionada plaza, sci/uian los fieles ocujiando lolal-
mcntc la calle de San'l’'ran-
cisco ij ¡liaza de este nombre.
(Clichés cedidos graciosa¬ mente por «La Almudaina».)

(roros yila )

El Heraldo de Crisío

63

VIA-CRUCIS DE PENITENCIA

A pesar del mal estado del tiempo se celebró en la tarde del pasado domingo de Ramos, 21 de marzo un solemnísimo, VíaCrucis de penitencia y rogativa para im¬ plorar del cielo la paz y salvación de nues¬
tra querida Patria.
La afluencia de fieles fué extraordinaria
e imponente no bastando para contenerla la anchurosa nave de la Iglesia de S. Fran¬ cisco que fue el lugar donde se organizó el piadosísimo acto. Este empezó a las 4 y
cuarto con el rezo del Santo Rosario.
Seguidamente empezó la magnífica Ro¬ gativa del Vía-Crucis que recorrió las ca¬ lles de S. Francisco, Pl. Sta. Eulalia, Morey, Pureza, Sta. Clara, Fonollar, San Alonso,
Duzay, Montesión, P. Nadal y Plaza San
Francisco.
Abrían la marcha dos estandartes con
emblemas de la Pasión del Señor,- después
seguían en apiñadas filas numerosísimos caballeros, militares y obreros, nutridas,co¬ misiones de las diversas cofradías de peni¬ tentes de esta ciudad, gran número de sa¬ cerdotes y diversas representaciones de Ordenes religiosas. Seguía la Comunidad de los Padres Franciscanos presidida por el Superior del Convento Rdo. P. Miguel Vi¬ dal y luego el Santo Crucifijo llevado por
dos Padres franciscanos. Presiendo la mag¬
na procesión iba después el celoso Prelado de Vich, Excmo. y Rdmo. P. Juan Perelló, acompañado por el Provincial de los Fran¬ ciscanos Muy Rdo. P. Bartolomé Verger, y su capellán Rdo. P. Simón Reynés. Venía luego una comisión del Ayuntamiento for¬ mada por los gestores señores Rotger y Fiol, con el Jefe de la Guardia Municipal, señor Trespallé y el Maestro de Ceremonias señor Mulet, con el Sr. D. Carlos Alabern al fren¬
te, quien llevaba la delegación del Alcal¬ de que no pudo asistir,- y finalmerite iba el Discretorio de los Terciarios de S, Francis¬
co presidido por su primer ministro Sr. Gual de Torrella. Cerrando la procesión venían las mujeres que habían acudido en número incontable. Predicó el Magno VíaCrucis el Rdo. P. Antonio Pericás, francis¬
cano, quien con acierto y oratoria admira¬ bles explanaba el asunto de la estación, ex¬ trayendo prácticas consecuencias muy al

tenor de las necesidades y circunstancias que en estos momentos vivimos. El interés del público fué siempre creciendo al calor de la ardiente y subyugadora palabra del orador siempre llena de sentimiento y un¬
ción.
No pudiendo el extraordinario gentío
ser contenido en los límites de las anchu¬
rosas plazas donde se instalaban las esta¬ ciones, unos Padres Franciscanos daban lec¬ tura a las estaciones correspondientes.
La ingente masa de fieles iba cantando con verdadera unción, el Padre Nuestro de Romeu y solemnes y vibrantes resonaban por las calles de Palma:
Per vostra Passió sagrada adorable Redemptor perdonau alfra vegada a aquesi pobre pecador.
A eso de las 5 y media regresaba al tem¬ plo de San Francisco la procesión rezándo¬
se en*su interior las tres últimas estaciones
Los sermones, corrieron a cargo del elo cuente orador Rdo. P. Antonio Pericás, quien los pronunció desde balcones de los primeros pisos, frente a los cuadros del VíaCrucis. La oratoria llena de unción y de patriotismo cautivaba a los fieles.
En las esquinas unos cuadros señalaban la estación. A los lienzos de la antigua co¬ lección fueron añadidos tres, que son obra, el de la segunda de don Enrique Ochoa, el de la tercera de don Miguel Sacanell y el de la novena de don Pedro Cáffaro, los cuales merecieron elogios.
Desde el púlpito el P. Pericás dió las gracias a los fieles por la magnífica forma con que habían respondido a la invitación al acto conmovedor en que se impetraba del Cielo la paz de España.
Terminado el Vía-Crucis, el Rdo. Obis-
f)oos dfiéeleVsic. h, P. Perelló dió la bendición a
Del acto de Rogativa del Domingo de Ramos que resultó sobremanera grande y conmovedor, reinando en todo el largo trayecto el más edificante recogimiento, quedará indeleble recuerdo, como una
edificante demostración de fé.

64

El Heraldo de Cristo

CRONICA FRANCISCANA

Bendición del

Sólemnisima fiesta

nuevo pendón de
la Pía Unión Eu¬
carística Infantil

celebró el domingo
21 de Febrero del año
en curso, la Pía Unión
Eucarística Infantil de

de S. Antonio de S. Antonio de Padua

Padua de la ciudad de inca.

de esta ciudad de In¬
ca, con motivo de la
bendición de su nue¬

vo Y hermoso pen¬
dón, una obra de arte realizada por las Re¬
ligiosas Franciscanas de esta ciudad y de
cuyo dibujo es autor el escultor D. Miguel
Vadell.

A las

de la ma¬

ñana hubo Misa de

Comunión General

para los niños y niñas
de la Pía Unión y de¬
más devotos del San¬

to Paduano, en la cual

el R, P. Director Fr.

Miguel Tous Coll, predicó sentidos fervorines y se cantaron motetes Eucarísticos.
A las 10 tuvo lugar la bendición del nue¬

vo pendón que apadrinaron los distingui¬ dos y piadosos jóvenes Jaime Mayrata Al¬ varez Y Catalina Bérgamo Llabrés y, acto
Seguido, solemne Misa Mayor, siendo el
celebrante el R. P. Fr. Miguel Salóm, T.O.R. Prior del Convento, ayudado por los Rdos. PP. Fr. Francisco Amengual T.O.R. y Fr. Antonio Muntaner, T.O.R. en calidad de
Diácono Y Subdiácono respectivamente. Predicó elocuente panegírico alusivo al acto el R. P. Fr. Rafael Ginard Amorós, Prior
del Colegio de la Porciúncula. El pueblo cantó la «Missa de Angelis» alternando con
el Orfeón Infantil Antoniano.

Por la tarde a las byí hubo una velada
literario-musical. Ocuparon la Presidencia los Sres D. Ramón Fortuny, Comandante del Batallón de Infantería de Inca, D. Pedro Mayrata Ministro de la Tercera Orden de Inca, juntamente con su hijo Jaime; el Rdo. P. Fr. Rafael Ginard Amorós y el R. P. Di¬ rector con algunos miembros de la Junta
Directiva de la Pía Unión. Tomaron parte
en el acto varios niños de la Pía Unión al¬

ternando sus bellas disertaciones con cán¬

ticos a dos Y a cuatro voces ejecutados por el «Oorfeón Infantil Antoniano». Hizo, des¬

pués, uso de la Palabra el orador de la ma¬ ñana R. P. Ginard Amorós, versando sobre
la necesidad de educar y formar espiritual materialmente a los niños, y como la P. . E. I. A. cumple con este deber y llena

esta necesidad. Y, finalmente, el R. P. Di¬ rector dirigió a la numerosa y distinguida concurrencia que llenaba por completo el amplio local-inaugurado también este díabreve parlamento, solicitando de todos la cooperación material y monetaria para el sostenimiento de la gigantesca obra de la Pía Unión y dando a todos lás más expre¬
sivas gracias por lo prestado hasta el pre¬
sente. Terminó el acto en medio del entu¬
siasmo general y del contento de los pequeñuelos Antonianos que conservarán toda su vida imperecedero recuerdo de tan sim¬ pática fiesta.

Nuevos Ministros

Día 7 del próximo

del Señor pasado mes de marzo
recibieron la ordena¬

ción sacerdotal de manos del Exmo. e limo.

Sr. Arzobispo-Obispo de Mallorca, en la

capilla del palacio episcopal, los siguien¬

tes hermanos nuestros en religión: Fr. An¬

tonio Martorell Miralles, de Montuiri; Fr.

Juan Gayá Sansó, de Villafranca de Bona¬

ny,- Fr. Jorge Coll Muí, de Lloseta,- y Fr. Mateo Ramis Cladera, de Llubí. El primero

celebró su primera Misa, el 19, fiesta de S.

José, en la iglesia de Las Llagas de Palma.

El segundo, día 8 en el Santuario de Cura. Fr’ Jorge Coll, el Domingo de Pasión en la

capilla de La Porciúncula y Fr. Mateo Ra¬

mis, día 29, segunda fiesta de Pascua, en la

iglesia de S. Francisco de Inca. Nuestra felicitación a los nuevos levitas,

Y a sus respectivas familias.

El Terciario

En uno de los pue-

Dr. Esténaga blos de la Provincia de Ciudad Real era

cabecilla de los rojos un médico paralítico
llamado Arturo Gómez Lobo-conviene fi¬

jarse en esto-. Este señor, al tener conoci¬ miento de haber sido hecho prisionero el
Obispo de la diócesis Dr. Narciso Esíénaga, ordenó su sacrificio, sometiendo el Pre¬ lado ejemplar a toda clase de vejaciones y
mutilaciones. Y cuando cubierto de heridas

se esperaba que le curasen para continuar el sacrificio, le sacaron a la carretera, de¬
positándole en la cuneta, donde murió en
medio de los más horribles sufrimientos.

El Dr. Esténaga era un fervoroso Tercia¬
rio franciscano desde los 14 años. Todos los

conventos franciscanos eran para él algo suyo, y todo franciscano encontraba siem¬
pre en él un entrañable hermano. Era hom¬ bre de vida verdaderamente espiritual que llegó a la cumbre del sacerdocio, desde el puesto más humilde, por medio de la ora¬ ción Y del trabajo.

El Heraldo de Cristo

65

CONTALLES DE CAÇADORS
COVERBOS

I
Hi havia un caçador solleric que per fer berbes era el reverend diable. Escoltau aquesta: Un día ell i un atlot seu arribaren a una posesió del pía, a hora en qué a la casa ja havien dinat. Sa madona per obsequiar-los, posà taula, tregüé olives, sobrassada i un for¬
matge sencer.
Es solleric comença e atepir-se de pa i olives i sobressada i a fer gloses a sa madona,-
i aresta, bones riaies! Quan estigué sodoll s'alçava de sa taula, i sa madona que era rumbosa, l'invitava que
menjàs més. -No tenc més gana, madona, no vui res pus. -Menjau formatge, ell no l'heu tocatf -Teniu raò, madona, no hi pensava. Pren es formatge, comença a dar-li voltes i, a la fi, surt amb aquesta: -Aon trobau que l'he d'ensetar, madona?
-Allà B on vós voldreu-li contesta ella-.
-Idò, jas, allot, pósel dins ses beiasses, i ja l'ensetarem a ca-nostra.

II

Un senyor que era molt aficionat a sa caça, sortí una vegada a caçar i matà dues per¬ dius. Tot gojós arriba a caseva i dóna ordes a sa seva senyora de què les aguiàs del millor modo que sabés, perque havia convidat el Pare Tomàs, i volia quedar ben lluït. Era aquest un frare molt conegut de la casa.
Sa senyora, l'endemà dematí, passa l'orde an el cuiner, que era molt vivaretxo i les
aguià. Tan avengudes les troba quan les tasta, que de mica en mica, les s'empesola totes
dues.

-Ah, torpe de mi! i què he fet?...-se preguntava ell maíeix.-Ara vendran ets apuros... veurem com me'n desfàs d'aquest trunfos.
Pensant i cavil·lant se'n va a cercar es frare que estava convidat, i li intima aquesta:
-Mir-se, Pare Tomàs, vostè se creu que es senyor l'ha convidat per dinar i s'engana? lo que cerca de vostè és taiar-li ses dues oreies.
Es frare obria ets uis com uns salers.

-Jo li don aquest avís per bé. M'escolt: si en posar-se a la taula repara que es senyor

esmola es guinavets, ja pot fugir de quatres, que és senyal de que li taiarà ses oreies, ara

si no fa res, estiga tranquil.

Es frare comprengué sa bona intenció des cuiner i li agraí.

Ve s'hora des dinar, i es senyor, així com tenia costum, agafà un ganivet i començà a

esmolar-lo. Encara no ho veu es frare, quan ja li ha estret, cametes amigués, cap an es

carrer. El cuiner que esperava s'ocasió, surí depressa a s'escala cridant ben fort:

-Es frare se'n du ses perdius!

,

I es senyor que ho sent surt cridant an es balcó.-

-Frareí, de dues una!

I es frare, girant-se li responia;

-Ni una, ni ninguna!

III

«

Un caçador d'ofici, que no havia agafat res en tot lo dematí, de cop afína dues llebres
ajaçades, una tan aprop de l'alíra que se tocaven.
Mentres alçava poc a poquet es gatillo a s'escopeta deia baix, baix: -Anímeles santes/ si les agaf totes dues amb un pic, n'hi haurà una per volíros! '
Apunta... tira... queda una liebre en es siti, i s'altra fuig correns. I es caçador signant-la amb so dit, s'esclamava: -Anímeles santes: aquesta morta, aquesta és sa meva! Aquella maleïda que fuig correns de quatres... la veis?... la veis?... aquella és sa vostra!

66

El Heraldo de Cristo

NOTAS VARIAS
Revista de las revistas «Manantial da Vidas de
Zaragoza y «El Granito de Arenas de Falencia, últimamente llegadas a la redacción de «EL
HERALDO DE CRISTOs.

El viático a El interior de la cár-

los presos.

presentaba una es¬

cena que contrastaba

enteramente con el furor y la discordia que

reinaba fuera. Allí todo era paz, serenidad

Y contento. Resonaban los himnos a Cristo

Rey,- el «Cantemos al Amor de los amores»,

«Corazón Santo», «¡Ven, Corazón Sagrado!»,

etc.

Intimamente unidos, formando un solo
corazón y una sola alma, están en lóbregos calabozos sacerdotes, religiosos, adorado¬ res nocturnos y Luises. Los sufrimientos se aminoraban viviendo aquella vida de cielo.
En las cárceles de las catacumbas, los
cristianos lograban algunas veces, por me¬ dio del soborno, penetrar en aquellas re¬
pugnantes mansiones para proporcionar consuelos espirituales y temporales a sus hermanos. Pero aquí, ni aún ese lenitivo se les permitía: padres de familia quç no po¬ drían besar ya más a sus hijos.. , esposos
que no sentirían más las dulces caricias del
amor conyugal... Toda lo sufrían pensando que el único
delito que habían cometido era el de con¬ fesar la fe Cristo que sus antepasados les
legaron. Lo que no no podían sufrir era el pasar sin recibir la Santa Eucaristía.
Por la noche los iban sacando en grupos
para «darles el paseo» y acabar con svxs vi¬ das junto a la playa de la ciudad. ¡Pobres sacerdotes que no podían tener el consuelo de estrechar entre sus manos, por última
vez, al Rey de reyes! Uno de ellos, allí preso, conoce a un ofi¬
cial de la Prisión y sabe que es fervoroso
católico.

«¡Dios mío! ¿No se atreverá él a entrar¬
nos furtivamente el Cuerpo de Cristo?» Sus ansias no le permiten aguardar y lla¬
ma al empleado. «Mire, le voy a pedir el favor más grande que puede hacerme y
seguramente será el último de mi vida. Us¬
ted sabe cómo nos van sacando poco a po¬
co de esta cárcel y cómo el que sale ya no vuelve. Por lo que más quiera en este
mundo, no me niegue esta gracia. Vea cómo
me proporciona unas Formas consagradas y
usted mismo me las entrega secretamente.»

£1 buen oficial recuerda aquellas escenas de Catacumbas en que los cristianos, que iban a ser conducidos al martirio, recibían
también sigilosamente, por modo de Viáti¬ co, el Pan consagrado. Y, con lágrimas en sus ojos, le responde: «Como yo pueda,

tendrá usted mañana aquí las Hostias con¬ sagradas».
Sale de aquella cárcel, convertida en templo, donde se alaba continuamente a Dios Y va en busca de un sacerdote que, disfrazado con su mono y gorro de milicia¬ no, se encarga de administrar los santos sa¬ cramentos en la capital. Celebra su misa en un dormitorio, que es a la vez capilla y
sede confesional.
«Mire, D. ... me ha llegado a lo hondo del alma la petición de unos pobres presos que allí tengo. Los van llevando poco a poco a la muerte y ellos no quieten morir sin reci¬ bir por última vez el Pan Sacramentado. Si mañana, al decir su Misa, quisiera consa¬ grar diez Formas, de Comunión, yo le en¬ viaría a mi hijo y él, que vive conmigo en uno de los pabellones de la cárcel, me las traería y mañana tendríamos comunión de
Catacumbas».
Aceptado, repuso el joven sacerdote emociado. Y a la mañana siguiente el hijo de aquel valiente empleado (que más tarde había de ser objeto de las iras de los rojos), con su camisa de sport, su guardapolvo y sus alpargatas, se dirigía a la casa donde se
celebraba la Santa Misa.
¡Qué misa aquella! Sobre una cómoda, dos palmatorias, un pegueño crucifijo, el
ara sacrosanta, que disimuladamente cubría (cual piedra de mármol) la mesita de noche, un cáliz que se pudo salvar del robo sacri¬ lego de las iglesias y ante aquel altar im¬ provisado un sacerdote que ofrecía la Hos¬ tia Santa y se ofrecía él también como hos¬
tia al Señor.
Al elevar trémulo la Santa Forma, el jo¬ ven vió también caer una lágrima amorosa sobre el paño blanquísimo del ara.
Ha terminado el Santo Sacrificio. Sobre
el altar quedan aquellas blancas Formas,recógelas el sacerdote entre dos tarjetas de visita Y metiéndolas en un sobre, coge su pluma Y, con asombrosa tranquilidad, escri¬ be la dirección: Señorita.., calle..., núme¬ ro..., Ciudad.
Y, tomando aquel sobre con respecto, le dice al joven: «Acuérdate de Tarsicio, que dió su vida antes que consentir se profana¬ se el sagrado tesoro que llevaba'. Evita los sitios públicos; si acaso te cachean, di que eso es una tarjeta para tu novia. Acuérdate sobre todo que «las cosas santas no deben ser pasto de los perros, ni las perlas arrojar¬
se a los puercos».

£1 Heraldo de Cristo

67

«Moriré-respondió el joven-antes que
abandonar este tesoro». Y metiendo en su
cartera aquel sobre bendito, exclamó: «An¬ tes que caiga en poder de los milicianos, tragaré, si hace falta, el sobre y las tarjetas».
Y, despidiéndose, se alejó con alegre re¬ verencia mientras el sacerdote quedaba orando por el feliz éxito de la empresa.
Llega a la cárcel, entrega el sobre a su padre y éste se apresura a ponerlo en po¬
der del sacerdote encarcelado.
El venerable ministro del Señor, levan¬ tando los ojos al cielo, recita las oraciones prescritas; se le aproximan devotamente los presos y reciben de sus manos consa¬ gradas la Víctima Sacrosanta.
La vida de Cristo anima exterior e inte¬
riormente aquellos corazones de mártires.

¿Y ei Seminario Leemos en el «Grani¬

ci e Málaga?

Arena»: Recon¬

quistadas ya, gracias

a Dios, por nuestro glorioso Ejército la ca¬

pital y provincia malagueñas, hemos teni¬

do más noticias de aquel Seminario tan

querido por nuestros lectores, que siguie

ron paso a paso su edificación material y

espiritual. Sabíamos que los rojos le habían

convertido en «Cuartel de Azaña». Hoy

nos dicen que aún que el edificio se con¬

serva, su interior tiene grandes destrozos

que aún no ha sido posible apreciar dete¬

nidamente, y las pérdidas en mobiliario,

clases, biblioteca y Capilla, son enormes.

Entre los Sacerdotes fusilados, está el

Rector, don Enrique Vidaurreta, uno de esos

Sacerdotes cabales, en toda la extensión

de la palabra, cortado a la medida del Co¬

razón del Jesús y como hecho exprofeso

para regir aquel Seminario, inteligente y

cultísimo, joven, unos cuarenta años,

aunque con la madurez de los ancianos,

padre, maestro y dechado de Seminaris¬

tas y jóvenes Sacerdotes, querido de

todos y de todos respetado, alma del Semi¬

nario y sin el cual no se concibe este Semi¬

nario del «sueño pastoral», cuya misión tan bien había comprendido y realizado...
Preso con los demás hasta 31 de agosto,
llegó la hora de elegir los rojos las vícti¬ mas de aquel día. Entre los elegidos esta¬ ba un joven Sacerdote enfermo, de los for¬ mados en aquel Seminario. Intercedieron por él los compañeros: «Bueno, que se quede-respondió uno de aquellos criminalespero en su lugar tiene que ir otro». Y don Enrique, en la plenitud de su vida y de su apostolado, con la serenidad que le ca¬ racterizaba, se adelanta y se ofrece a ocu¬
par el sitio del enfermo. Asistido por el P. García Alonso, jesuíta
y director de nuestra Obra en Cádiz (que pudo salvarse), cae su cuerpo en la tierra mientras su alma de mártir por la fe, por el Sacerdocio santo, por el amor a Dios y a un herrnano, sube al Cielo para seguir tra¬ bajando por sus Seminaristas, por sus Sa¬ cerdotes jóvenes. ¡Qué dura es esta poda! ¡Que doloroso sembrar con semilla de már¬ tires! Pero, ¡qué fecunda debe ser esta siem¬ bra cuando Dios así permite que también caigan en el surco los, a nuestro parecer,
insustituibles!
La imagen principal de la Iglesia de aquel Seminario, que levantó la confianza y la caridad, era un Pastor Eucarístico que se
dejaba ver como una aparición por el gran
círculo abierto en el retablo del Altar ma¬
yor, retablo que era una ancha cruz monu¬ mental, en cuyos brazos con grandes letras de oro se leía: «PASTQR BUENQ, HAZNQS BUENQS PASTQRES, PRQNTQS A DAR
LA VIDA PQR LAS QVEJAS». Probable¬
mente ya no existirá, pero si los Seminaris¬
tas y Sacerdotes no volvieran a ver aquél
gráfico ni aquella oración, en sus algias
quedará para siempre la visión de sus com¬ pañeros de sacerdocio y seminaristas már¬ tires, y sobre todo de su Rector entregán¬ dose por salvar a un hermano, que llega¬
ron a la meta refrendando con su sangre
la aspiración del Seminario: formar Sacer¬
dotes-hostias...

ó8

El Heraldo de Cristo

Necrología

Palma.-Día 1 del pa¬ sado mes de febrero
entregó su alma al Se¬
ñor el fervoroso Ter¬
ciario D. Juan Carbo¬
nell, Teniente de Ar¬
tillería. No sabemos
con que palabras en¬
carecer la caballero¬
sidad, piedad y hu¬
milde obediencia de
este bizarro caballe¬
ro, mimado de supe¬ riores, de iguales y de inferiores, siempre dispuesto a defender la Religión y la Patria.
Dios le haya acogido piadosamente en su seno y dó la resignación cristiana a su desconsolada esposa y demás familia.
Campos del Puerto.-Después de larga y penosa enfermedad sufrida con gran resig¬ nación cristiana, y recibidos, a petición propia, los santos sacramentos, el día 6 del pasado enero falleció la distinguida y fer¬
vorosa terciaria D.® Antonia Ballester Oli¬
ver, a los 84 años de edad y 65 de profesión. En su prolongada vida fue siempre mo¬
delo de virtudes cristianas y fiel cumpli¬ dora de las obligaciones de Terciaria Fran¬ ciscana. Lo que le valió ser elegida Presi¬ denta de Coro y Vocal del Discretorio; car¬ gos que desempeñó hasta la muerte y por
espacio de 31 años, siempre a satisfacción
de todas.
Sencilla por naturaleza, practicó siempre la virtud y las obras de caridad, ocultando su nombre, para huir de la vanagloria y evitar la recompensa en este mundo, según el consejo de Jesús. Se distinguió por su amor a la Eucaristía y devoción a las Stas. Almas del Purgatorio. Mientras su salud se lo permitía asistía todos los días a la santa
misa acercándose a recibir a Jesús sacra¬ mentado. Frecuentemente se la veía oran¬
do en la capilla de las Almas y confirmó
esta devoción mandando que, a su muerte, fuera celebrado un Novenario en sufragio
de las mismas y por la suya. Que el Señqr le haya dado la recompen¬
sa en el cielo, y en la tierra dé la resigna¬
ción cristiana a su familia.
-Día 12 del mismo mes de enero falleció
el hermano Terciario D. Cosme Garcías, a la edad de 71 años, y 56 de profesión. Fiel
cristiano y fervoroso Terciario, cumplidor siempre de los deberes de familia y funcio¬ nario incorruptible, acercábase frecuente¬ mente a recibir el Pan de los Angeles con el cual recibía fortaleza para defender in¬ trépidamente la causa de Cristo. Descanse en pas. Nuestro pósame a su familia.

(palatia ^cattal de
i-jetaldo de ^tiúto
•
La< buenas representa¬ ciones pueden efercer una influencia profun¬ damente moroiizadora sobre los espectadores.
PIO XI
Esta Galería ha sido acogida muy favo¬ rablemente por el pueblo mallorquín.
Aún no transcurridos tres meses desde
su aparición, su primer número «El Mes¬ tre d'escoia» ha sido representado con éxito, varios veces, en distintos salones de la Capital y del interior de la isla.
Obras publicadas:
El Mestre d'escola
Sainet mallorquí en tres actes i en vers. (Ámb il-tustracions musicals).
El fustereí de la Parròquia
Sainet mallorquí en un sol acte i en vers. (Amb il-iustracions musicals).
En preparación
Fray Junípero
Orama en tres actos en prosa y en
verso. (Con ilustraciones musicales).
L'escolà petit
Comèdia de costums mallorquines
en tres actes i en prosa.
Santa Clara (Para señoritas)
Drama en tres actos y en verso.
Bunyols de vent
Sainet mallorquí en un acte i en vers.

Si precisa artículos de vestir
Acuda a los
ALMACENES LA PRIMAVERA
Le Printemiis
y encontrará de lo más módico ’'a lo mejor
Sastrería ■ Modistería Teléfonos 2133 - 2252 - 2560
Bombones
ESTEVA y toda ciase de dulces a precios
de Fábrica
P. Juanot Colom, 7
Palma de Mallorca

Plaza Libertad, 9 Borne ELECTRICIDAD
RADIO SANITARIO
TALLER MECANICO
SEMILLAS
seleccionadas de hortalizas
y forrageras Francisco Gallent
Calle del Acete, 3 PALMA DE MALLORCA

Ipaliríel Esteva
SUCESOR DE
KOSCAKA
PLAZA DE CORT, 28
PALMA
DROGUERIA ARTICULOS PARA LA
FOTOGRAFIA PINTURAS AL OLEO
PARA ARTISTAS PINCELES Y BROCHAS
OPTICA
Qraduadón gratis de ía vista
por médico Oculista

PASTAS PARA SOPA

son de puro sémola

FABRICA: J. A. Clavé, 14

Teléfono 1528

DESPACHO; Sindicato, 123

„

2520

PALMA Olí MALLORCA

DIABETICOS
i
Encontrareis pan especial reco¬ mendado por los médicos en la panadería
i,A MODERNA
Peletería, 22 - PALMA Teléfono 1930
Relojería San Miguel
DE
M. MIRÓ
Extenso y variado surtido en re¬ lojes de todas clavSes. Especiali¬
dad en composturas. o. San Mls^uel, 27 - PALMA

flÍNtoMio Mut Jaumt
ContratisU <le ObrM
Maestro i^ll?añ»l
mayor Gracuk.iG

farmacia ó. posé
COLON, 54 e PALMA DE MALLORCA

Pildoras para la Tos • Jarabe Vermifug^o •
M e d 1 o a m e n t o 8 iD
Químicamente puros •

COLMADO
LA PAJARITA
San Nicolás, 5 Teléfono, 1844
FALUA DE BLALLORCA FIAMBRES Y EMBUTIDOS

Papelería y abjetos de escritorio

CA'N PLANELLS

Vda. de Antonio Cañellas

Papeles para fumar de las

mejores marcas

DEPOSITO DEL PAY - PAY

Sindicato, 59

PALMA

fotojirafía A ¡Sí E K
Ernesto Guardia
QUINT. 19 - PALMA Es la preferida del público distinguido y visitando sus salones, se convencerá V. del buen gusto y perfecto acabado de todos sus trabajos. Lo más.Selecto y distinguido de la sO' ciedad mallorquina se retrata en la an¬
tigua y acreditada Fotografía AMER. Ernesto Guardia - l|uint, 19 - Teléfonos: íarSór

Sastrería
j:hekkbs

Especialidad en CHAQUETAS PIEL PARA MILITARES Y MILICIAS-

Gran surtido en GABANES Y PELLIZAS DE TODAS CLASES

Extenso surtido en cortes

x

ULTIMA NOVEDAD

CAVN CHERRIS
Galera 6 (Frente C. Hostales). PALMA
oooooooooooooooooooooooooo

DISPONIBLE

OOUIXM3P00<XXXXXXX>0C30CX3O0CX>

FáLrSca Je CaJéna Oro y Piafa
ROSARIOS Y COLLARES PLATA Y COLLARES ORO EN CADENA ALPACA

Re,stauraGÍón de objetos religiosos. Especialidad de la Casa
BARBADA LIMADA DE

Antonio Yall«

Yaileriola

Calle Zavellá, 23 -T.°

Baleares

PALMA DE MALLORCA

Esmero y prontitud en
servir a sus clientes
•OOOOOOOOBOQOOCXXIOBgÓOOOOOO

Vd. no t)a visto tas boHms do
Matlom si no
jja visitado tas
6800 Vich - Inca -Palma