Rew$w ©ensiwt Año II Palma i.° de Abril de 1910 Núm. 14 SE PUBLICA CON CENSURA ECLESIÀSTICA Sumario: —Palabras de Pío X á los católicos flacos y pusilánimes.—El Espíritu de S. Francisco.— Las glorias de una familia.—¡Que hombres Dios mió!—No prevalecerán.—400 pobres socorridos.—Pan de San Antonio.—Crónica Fran¬ ciscana.— Noticias y variedades.— Bibliografía.— Necrología. ■ -- —- - ' PRECIOS DE SUSCRIPCIÓN El Heraldo de Cristo, órgano de nuestras Hermandades en Mallorca, sale á principios de cada mes. Apesar de las notables mejoras en él introducidas, no aumentamos el valor de la suscrip¬ ción, siendo el de una peseta al año en toda España, y dos en el Extranjero. Grandes rebajas á los que toman paquetes.—Para in¬ cremento de la Tercera Orden y mayor bien de todos sus miem¬ bros, suplicamos á nuestros lectores que trabajen en la medida de sus fuerzas para aumentar el número de suscriptores. Redacción y Administración: Convento de S. Francisco. FAJLiIMLA. UDE MALLORCA itwm mmni Dedicada al fomento y propagación de la Orden Tercera de S. Francisco de Asís y demás obras franciscanas. Año II Palma i.° de Abril de 19x0 Núm. 14 PALABRAS DE PÍO X aniiMndo á los católicos flacos y pusilánimes « Me alegro porque la virtud de estos héroes (I) debe reanimará los flacos y tímidos en la práctica de la doctrina y creencia cristiana y ha¬ cerlos fuertes en la fe. El valor, en efecto, no tiene razón de ser, sino en cuanto tiene por fundamento una convicción. La voluntad es una potencia ciega cuando ño es ilumi¬ nada por la inteligencia, ni se puede andar con pie seguro entré las ti¬ nieblas. Mas si la generación actual tiene todas las incertidumbres y du¬ das del hombre que va á tientas, es señal evidente de que no hace esti¬ ma de la palabra de Dios, que es antorcha qeu guíá nüestros pasos y luz que alumbra nuestros sende- (1) La Bta. Juana de Arcó y los Btos. Juán Eudes, francisco de Capillas,.Teófano Vinard y Com¬ pañeros. ros, lucerna pedibus meis verbum tuum et lumen semitis meis. Vendrá el valor cuando será viva la fe en el corazón, cuando se prac¬ ticarán todos los preceptos que la fe nos impone, porque es imposible la fe sin las obras, como es imposible imaginar un sol que no dé luz y calor. Y de esta verdad son testimonio los mártires que hemos conmemorado, porque no debe creerse que el mar¬ tirio sea un acto de simple entusias¬ mo en que se dobla la cerviz bajo la segur para ir derechamente al Paraíso, sino qne supone el largo y penoso ejercicio de todas las virtu¬ des, omnimoda et inmaculata mundi¬ tia. Y para hablaros de aquella que os es más conocida, la Doncella de Orleans, ella así en el humilde lugar de sü nacimiento, como entre la li¬ cencia de las armas, se conserva pu¬ ra como un angel, valiente como un león en todos los trances de la ba¬ talla y piadosa para con los desgra 138 El Heraldo de Cristo ciados y los infelices. Sencilla como sido abiertas en casa de los que me una niña en la paz de los campos y amaban: /¿is plagatus sum in domo en el tumulto de la guerra está siem¬ eorum qni diligebant me; por mis pre recogida en Dios y es toda amor ' amigos que no han hecho nada para hacia la Virgen y como un querubín défenderme y en todo encuentro se para con la santísima Eucaristía: han hecho cómplices de mis adver¬ bien lo habéis dicho, venerable Her¬ sarios. manos. (0 Llamada por el Señor á De este reproche dirigido á los defender su patria, responde á la cristianos pusilánimes y medrosos vocación para una empresa que to¬ de todos los países, no pueden exi¬ dos y ella misma creían imposible; mirse muchos cristianos de Fran¬ mas lo que es imposible para los cia...» hombres, es siempre posible con la ayuda de Dios. No se exageren, por tanto, las (Del discurso pronunciado por el Padre Santo con motivo de la beatificación de Juana de Arco.) dificultades para practicar cuanto la fe nos impone para cumplir nuestros deberes, para ejercer el fructuoso El Espíritu de S. Francisco apostolado del ejemplo, que el Se¬ ñor espera de cada uno de nosotros: IX unicuique mandavit de proximo s¿w. j Instrucción del Pobrecíllo de Asís á Las dificultades vienen de quien las ¡ sus discípulos.—Himno á la santa crea y las exagera, de quien confia Pobreza. en sí mismo y no en los auxilios del cielo, de quien cede cobardemente intimidado por las sátiras y burlas del mundo. De donde es preciso concluir que en nuestros días más que nunca la fuerza principal de los malos está en la cobardía y debi¬ lidad de los buenos, y todo el ner¬ vio del reino de Satanás depende de la blandura de los cristianos. Oh! si me fuese permitido, como lo hacía en espíritu el profeta Zacarías, pre¬ guntar al divino Redentor: ¿Qué son esas llagas en medio de vuestras ma¬ nos? quid sunt plagce istce in medio manuum tuarum? La respuesta, no hay que dudarlo, sería esta: Me han «Hermanos é hijos amadísimos: No tengáis reparo ninguno en ir pidiendo limosna, porque haciendo tal, seguís las huellas del Hijo de Dios, que se hizo pobre en este mundo por nosotros. Por semejante pobreza es como se adquieren de¬ rechos á heredar el reino de los cie¬ los. Id, pues, con la bendición de Dios á pedir limosna; id con más alegría y confianza que si fuerais ofreciendo el ciento por uno, porque ofrecéis la caridad de Dios cuando la pedís por su amor, y porque en comparación de esa caridad no son nada el cielo y la tierra. Acordaos que el pan recogido de puerta en (1) Mons. Touchet, Obispo de Orleans. puerta es el pan de los ángeles, por- El Heraldo de Cristo 139 que los ángeles buenos son los que inspiran á las gentes que os le den por amor de Dios, y así se cumplen en los pobres estas palabras del Rey profeta: Pan de ángeles ha comido el hombre (0. Dios ha dado al mun¬ do los religiosos Menores, á fin de que los elegidos tengan ocasión de practicar esas obras de caridad, que serán su glorificación cuando el Juez divino les dirija estas palabras: Lo que habéis hecho al más pequeño de mis hermanos, á mi lo hicisteis (-z).» En otra ocasión hizo de la Po¬ breza el siguiente hermosísimo y tiernísimo elogio: «¡Señor Jesús, en¬ señadme los caminos de vuestra amada Pobreza! Tened piedad de de mí y de mi dama la Pobreza; por¬ que la amo con pasión y no encuen¬ tro reposo sino en su dulce compa¬ ñía; y bien sabéis que Vos mismo habéis puesto este amor en mi alma. Llora sentada al borde del camino, y hasta sus amigos pasan y la des¬ precian. Ved la humillación en que ha caído esa reina, ¡oh Señor Jesús, que bajasteis del cielo á la tierra para desposaros con ella, y para te¬ ner en ella, con ella y por ella hijos perfectos! Estaba en la humildad del seno de vuestra Madre, estaba en el pesebre, y estaba armada, co¬ mo un escudero fiel, mientras Vos combatisteis el gran combate de la Redención. Estaba en la Pasión, y fué la única qne no os abandonó. María, vuestra Madre, estaba al pie de la Cruz, pero la pobreza subió con Vos y os tuvo estrechado entre sus brazos hasta que disteis el últi¬ mo aliento. Ella preparó los clavos que atravesaron vuestros pies san¬ tísimos, y cuando tuvisteis sed, ella, esposa solícita, hizo que os presen¬ tasen la esponja empapada en hiel. El calor de sus abrazos os animaba cuando espirasteis, y cuando moris¬ teis tampoco os abandonó, ¡oh Señor Jesús!, ni consintió que vuestro cuer¬ po reposara sino en un sepulcro prestado. Pues ella es también la que os reanimó en la sepultura, y os hizo resucitar triunfante. Por eso la habéis coronado en el cielo, y le habéis entregado el sello con que marcáis á vuestros elegidos. ¡Oh! ¿Quién no amará la Pobreza so¬ bre todas las cosas? ¡Pobrísimo Jesús! la gracia que os pido es que me concedáis poseer el tesoro de la más absoluta Pobreza. Haced que la marca, señal y rasgo distintivo de nuestra Orden y de mi vida sea, para mayor gloria vuestra, no tener más patrimonio que la Pobreza.» 0) Nada tenemos que añadir de pro¬ pia cosecha en el presente artículo en alabanza de la Pobreza de Nues¬ tro S. Padre; todo cuanto dijésemos, comparado con los caldeados afec¬ tos que dejamos transcritos, sería frío y sin vida; gocémonos más bien saboreando su celestial dulzura. Fr. A. R. (i) Bernardo de Besse, De laudibus B. Fr. (1) Salmo LXXVJ.Í, v. 30. (2) S. Mateo, XXV, v. 40. 140 El Heraldo de Cristo los Glorias de 10 Familia (Varones ilustres de la V. O. T. de nuestro Padre S. Francisco). (continuación) Cardenal Despuig. (1745-813). Hijo ilustre de Palma y vástago esclarecido de los nobles condes de Montenegro y Montoro. Las prendas singulares de que se hallaba dotado, le valieron innume¬ rables cargos. Fue Canónigo de la santa iglesia de Mallorca, teniente de vicario general castrense, conservador de la orden de San Jtcan, rector y procancelario de la •universidad, auditor dé la sagrada Rota, capellán mayor del real cuerpo de maestrantes de Valencia, obispo, de Orihuela, arzobispo de Valencia y después de Sevi¬ lla, caballero de gran cruz de la real y distinguida orclen de Carlos III ó igual¬ mente gran cruz y prelado de la de Mal¬ ta, Patriarca dç Antioquia, consejero de Estado, presidente de la suprema junta de amortización, arcediano mayor de las iglesias de Talavera y Valencia, carde¬ nal del título de S. Calixto y algunas otras dignidades. Amante délas Cien¬ cias y las Artes enriqueció á Mallorca con el museo de Raxa y dejó escritas las siguientes obras: «Relaciones sobre barias vegetaciones metálicas, escritas en francés por Mr. Homberg, traducidas de dicho idioma .al castellano» 1771. 4.° Ms. (Lo cita Bover en su «Dicciona¬ rio de Escritores Baleares, indicando que tal obra se hallaba en su poder). « Apuntes pára escribir un manual de historia romana» -2 tomos 4.° Ms. «Decisiones de la Santa Rota.» Roma. 1 t. fob -- «Vidade laBta. Catalina Tomás etc.» Palma—1816, 1 t. 4.° de XIII—258 pᬠginas y una lámina. «Relación circunstanciada del terre¬ moto que en 1783 padeció la Calabria.» 1 t. fob Ms. Falleció en Lúea en 1813 á la edad de 68 años. (1) V. José Mir. Hermano de la Tercera Orden Franciscana y Bedel de la Santa Iglesia Catedral, vivió una vida de san¬ tidad, y fué asiduo protector de los PP. Capuchinos. (En el convento de es¬ tos religiosos existe su retrato con una inscripción que lo indica.) I). Jerónimo Francisco de Salas. Jo¬ ven angelical, á quien debería imitar la juventud terciaria; se distinguió por su amor á nuestra regla y falleció á la tem¬ prana edad de 18 años el 3 de Febrero de 1712. (Existe un retrato de tan noble ó ilustre terciario en el convento dé PP. Capuchinos.) I). Guillermo Fluxá. (t 1743). Presbí¬ tero y canónigo de la catedral de Palma, fué terciario de nuestro Padre S. Fran¬ cisco y piadoso protector de los PP. Ca¬ puchinos. (En este convento consérvase sil retrato). Fué también doctor en sa¬ grada Teología y dejó escrita la siguien¬ te obra: «Oratorios eucarísticos, rasgos de luz y armonía que en la antigua ce¬ lebridad de la Octava del Corpus, ins¬ taurada por el M. R. ilustre Cabildo de lá Catedral de Mallorca, consagra al Santísimo nombre de Jesús Sacramen¬ tado el M. R. Sr. Dr. Guillermo Flu¬ xá etc.» Palma—1736-tomo 8.°. V. D. Jerónimo de Salas, (f 1642). Es éste, otro noble vástago de la familia citada. Vistió con gran honra el cordón de S. Francisco, siendo durante toda su (1) Sus restos descansan en Lúea (Italia) exoep tuándo el corazón que se custodia en el convento de Sta. Magdalena de . esta ciudad. Cubre la pequeña se¬ pultura una lápida que dice: a Aquí descansa el corazón de Antonio Despuig, Cardenal Presbítero, del titulo de S. Calixto. Rue~ .gtíen á Dios por él. Nació en Mallorca dia 30 de Ata rzo de 1745, y murió en la Ciudad de Lúea dia 2 de Mayo de 1813.» Jlic est cortruum.» El retrato de este cardenal existe en muchas partes. Su vida puede verse extensamente en diversas obras de Mallorca. El Heraldo de Cristo 141 vida un terciario ejemplarísimo. Todos los días rezaba el Oficio Parvo de la Vir¬ gen, y caritativo en sumo grado con los pobres, les repartía hasta su misma co¬ mida, ayunando á pan y agua. La ora¬ ción y el cilicio le alcanzaron grandes favores del cielo, apareciéndole en cier¬ ta ocasión el mismo Crucificado. Murió en opinión de santidad, siendo lloracjo por los pobres de quienes era generoso protector. Fue enterrado en la Catedral, en la sepultura de los Salas. V. H.° I). Pedro Abrí Descallar. (f 1658). «Fue natural de Palma de «Mallorca, y varón insigne en virtudes «y Nobleza, y como hijo de N. S. P. «S. Francisco en su 3.a Orden y muy de¬ svoto á su Religión, quiso qüe fuese «sepultado su cadáver en la Iglesia de «dicho Seráfico Patriarca. Murió día 8 «de Mayo el año 1658. Descansa en la «capilla del Bto. Raymundo Lulio al la«do del altar mayor en un magnífico, y «suntuoso sepulcro.» “Año Terciario,, fól. 254. (1). . V. ¿f.a Juana Oliver, (f 1614). Su pa¬ tria fue Palma, y la T. O. de S Fran¬ cisco se honró con una hija tan rica on virtud y preciosas cualidades. Ayunos, disciplina y oración eran su principal alimento. Concedióle el Señor el espí¬ ritu de profecía, augurando entre otras cosas el día mismo de su muerte. Fué sepultada en la Iglesia del Carmen, ac¬ tualmente derruida. Y. FT.a Juana de Pax. (f 1599). Ma¬ trona esclarecida por su nobleza y vir¬ tudes, se distinguió en la caridad con los pobres y en la protección dispensada á los Religiosos de N. P. S. Francisco. Descansan sus restos en la Iglesia de S. Francisco de Palma. (2). (1) Cubre el sepulcro la siguiente lápida: a Petrus Abrí Dezcallar, qui obiil 8 Maji a. 1658, alai. 56, hoc clauditur sarcophago. Illud mortalitas, id in sodales S. Francisci fecit amor.v Inscripción que se lee en su sepulcro: a Joanna de Pax, virginitate virtutibusque decorata, annorum sexaginta, ad Christum evolavit.—1599. ¡Que hombres, Dios mío! Un amigo acaba de leer la proclama en que se invita á los católicos mallor¬ quines para el mitin contra las escuelas laicas, y después de quitarse los lentes con suma cachaza, me mira con expre¬ sión de sorpresa y disgusto, y moviendo suavemente la cabeza me dice. —No estoy conforme. —¡Hombre! y ¿con qué no está V. conforme? ¿Le parece acaso fuera de lugar que los católicos defendamos nuestra fe? —No. —¿O que los padres defiendan las almas y el corazón de sus hijos? —Tampoco. O que la juventud cristiana de nues¬ tra isla se levante con entusiasmo con¬ tra los enemigos del nombre de Cristo? —Nada de eso. —Pues entonces :—Es que el mitin me parece extem¬ poráneo. —¡Como extemporáneo! A la hora en que todas las principales ciudades de España han celebrado su mitin, y cuan¬ do todos los días trae la prensa noticias de los mitines que han tenido lugar y datos sobre los que van á celebrarse; cuando, por decirlo así, arde en mitines la nación entera protestando contra las escuelas laicas, ¿cree V. extemporáneo nuestro acto, tan justo y razonable? —Pero hay que distinguir; y aquí todo se confunde lastimosamente. Una cosa es la escuela contra Dios; la escuela de Ferrer, verbi gracia, y otra la escuela neutra en que se enseñan matemáticas, ó química, ó gramática, sin tratar de Dios en ningún sentido. Enhorabuena que se proteste contra las primeras, pero pro¬ testar contra !as segundas vamos, no me parece acertado. Y aquí no tenemos nosotros afortunadamente escuelas á lo Ferrer. Por otra parte lo que se consi¬ gue con tales mitines es enardecer los 142 El Heraldo de Cristo ánimos y provocar otros mítines antica¬ tólicos, con lo cual la Religión pierde no poco terreno. Tales manifestaciones son de todo en todo contraproducen¬ tes Figúrense ustedes como quedaría yo que había ido con la intención de invi¬ tar á mi amigo para que hiciera un es¬ fuerzo en pro del buen éxito del mitin. Me convencí de que mi hombre se había llenado la cabeza de las distincio¬ nes de estos días entre la escuela neutra y la escuela laica, y pertenecía al núme¬ ro de aquellos que por prudencia deja¬ rían que la revolución arrasara todo lo existente antes que meter ruido y hacer manifestaciones contraproducentes. Evidentemente las conversaciones del círculo y de la reunión le habían comu¬ nicado la enfermedad reinante, y le ha¬ bían infiltrado el veneno de la apatía que es el que mata con más suavidad, y sin darse cuenta el interesado. Mi amigo había entrado en los últimos períodos. Procuré reanimar su decaído espíritu. Le dije que la escuela neutra, verdadera¬ mente neutra no existe en realidad; pues en la práctica ó son católicas, ó son anti¬ católicas más ó menos veladas. Le hice notar que como las católicas no tienen porqué ocultar su verdadero carácter y nombre, resulta que las que toman el nombre de neutras disimulan¬ do el suyo propio, han de ser por fuerza las anticatólicas. Le di á entender como aun las cien¬ cias que parecen menos relacionadas con la religión, se enseñan, en la prácti¬ ca, ó bien en sentido católico, ó bien en sentido anticatólico; ya por el carácter de los textos; ya por las explicaciones del Profesor; ya por los comentarios que éste intercala entre los párrafos del tex¬ to mismo. Le recordé como por punto general aun las peores escuelas no han empeza¬ do á funcionar sino con el carácter de neutras, para no ser rechazadas desde luego; y que aun los mismos enemigos de la Iglesia llaman neutras ó laicas á 213..°°lasescuelasqueellosmontanparaque sirvan como barricadas desde donde puedan atacar á la religión. Brevemente le hice la historia de la escuela laica en Francia, donde ya dicen claramente los perseguidores del catoli¬ cismo lo que quieren que sea la escuela laica: «Resueltamente, tiránicamente, si es »preciso, la república ha de sustituir á la »enseñanza cristiana una enseñanza ra- :■ocionalista, materialista. » Esto publicaba el periódico de Jaurés, y los manuales recientemente condena¬ dos por los obispos indican bien cuanta afinidad hay entre el laicismo y la im¬ piedad. A todo añadí que según confesión de los mismos periódicos del bloque fran¬ cés, y testimonios de muchos diputados radicales las escuelas laicas han dado por resultado en Francia: Un gran retroceso en la instruc¬ ción popular, aumentando el analfabe¬ tismo, y disminuyendo de un modo alarmante la instrucción completa de los jóvenes, como consta por las esta¬ dísticas. La formación de generaciones destituidas de toda educación, y carác¬ ter, por carecer de los rectos principios en que debe fundarse la sana educación de la juventud. Un abandono increíble en los maestros laicos, fruto en parte de las doctrinas que profesan, y en parte de que los discípulos no asisten á las cla¬ ses, con lo cual resulta que los maestros no tienen para que trabajar. Y la falta de asistencia se debe ya á la mala Conducta, inmoralidad y borra¬ chera de los maestros, como dice Fourcroy, Consejero de Estado; ya á la bru¬ talidad de los mismos que ha llegado. El Heraldo de Cristo 143 hasta el punto de que han tenido que fundar una sociedad que les asegure contra los gastos é indemnizaciones que tienen que pagar por las heridas, frac¬ turas, dislocaciones, etc. causadas á los discípulos ¿chitante las clases. La socie¬ dad tiene poco mas de un afío de exis¬ tencia, se llama la Laica roja y cuenta con 30.000 maestros y maestras laicos asociados. Por último le presenté una estadística comparativa de la criminalidad en Fran¬ cia atendido el desarrollo de la enseñan¬ za laica, con la cual pudiera conocer cual es el fruto que la sociedad reporta de la enseñanza sin Dios. Hela aquí: Años N.° medio de críme¬ nes y deli¬ tos. 1831-1835 1836-1840 1841-1845 1846-1850 18-51—i 855 113.OOO 144.OOO 169.OOO 226.OOO 280.OOO 1856-1860 266.OOO 1861—1865 272.OOO 1866-1870 283.OOO 1871-1875 25o.OOO 1876-1880 1881-1886 1887-1790 1891-1895 1896-1900 1901-1905 372.OOO 422.OOO 461.000 521.000 514.OOO 556.000 La dirección de la instrucción pública se retira á la Iglesia y se entrega á maestros lai¬ cos. La criminalidad au¬ menta rápidamente. La ley Falloux resta¬ blece la organización religiosa. La criminalidad dis¬ minuye. El imperio liberal po¬ ne trabas á la acción de la Iglesia. Ligero aumento de ■ criminalidad. La ley Falloux se me¬ jora en provecho de la Iglesia. La criminalidad dis¬ minuye en grandes pro¬ porciones. Regimen del bloque y laización progresiva de la enseñanza. La criminalidad pro¬ gresa rápidamente de un modo espantoso. Poco á poco iba mi amigo formáttcl'pse cargo de lo que es la escuela laica, hasta que se dió al fin por vencido; y pude contar con uno más para el mitin. Pero, Señores, mi desencanto fué tre¬ mendo. Visité á otro, y otro y otro y todos lo mismo. Casi me rendí al ver que los contagia¬ dos se llamaban legión, procuré sin em¬ bargo repetir á todos lo que había dicho al primero, con éxito no siempre igual;, y quiso Dios que pudiera encontrarme después con gentes de recto sentido, que, dispuestas á todo sacrificio, traba¬ jaban de veras para que la manifesta¬ ción resultara grandiosa. Y veo que sus trabajos resultan fe¬ cundos, que las multitudes se agitan que los pueblos se mueven y que de extremo á extremo de Mallorca resuena un grito inmenso. ¡Viva el catolicismo! ¡Muera la enseñanza laica! Esto es para consolar á cualquiera, y repara con creces el profundo disgusto que causan ciertas personas con su pru¬ dencia y distinciones. Un detalle curioso Me retiraba agitado por impresiones tan contradictorias, cuando de repenteme eché á reir en plena calle. Observé que uno de los visitados, que no quedó convencido sino á medias, en todo el trascurso de la discusión no ha¬ bía llegado á sacar del bolsillo su mano izquierda, ni apartaba su derecha del voluminoso abdomen. Yo no había dado á este detalle importancia alguna; pero* después lo recordé y casi me pareció que envolvía una revelación. ¿Sería que aquel buen hombre; se aprestaba instintivamente á defender lo que constitu};e las dos únicas ilusiones de tales personajes y que consideraba amenazado por la promoción del mitin? ¿Pensaría que iban á quedar compro¬ metidos su digestión y su dinero? Fr. Junípero. 144 El Heraldo de Cristo fio prevalecerán i Empeñada es la lucha que estamos sosteniendo los católicos españoles con los enemigos de nuestra religión y de nuestra patria. Estos, más prudentes que los hijos de la luz, se han enseño¬ reado, en gran parte, del parlamento, de la prensa, de los centros de ense¬ ñanza y de los cargos públicos. Con sus malas artes y con una constancia digna de mejor causa han hecho que el espíritu liberal y revolucionario im¬ perase en las leyes, y no perdonan medio para infiltrarlo en las costum¬ bres. Para que se vea la magnitud del mal, cuéntese el número de los di¬ putados que sostienen los principios liberales condenados mil veces por la Iglesia, de los profesores racionalis¬ tas é impios, de los periódicos que no hacen caso de la autoridad y doctrina de la Iglesia, de los centros de perver¬ sión y libertinaje que se hallan dise¬ minados por todas partes. Los católicos unidos y compactos en ordenada falange debíamos opoenrnos al empuje de esa ola devasta¬ dora y disolvente. Debíamos sostener todas nuestras posiciones y pelear con denuedo hasta vencer; pero fuer¬ za es confesar que hasta el presente muchos de nosotros no hemos cum plido con nuestro deber. La más es¬ pantosa confusión de ideas y opues¬ tas tendencias ha reinado en nuestro campo, y ésta ha sido la causa de que muchos hayan optado por el cómodo retraimiento,y otros, desertando de las filas católicas, hayan ido á engrosar los partidos liberales, para gozar de los beneficios y ventajas que ellos dis¬ tribuyen largamente. De esta manera se ha ido reducien¬ do el ejército de los que sostienen los principios católicos en todos los orde¬ nes de la vida, de los que quieren en la teoría y en la práctica que estos imperen en todas partes, lo mismo en el orden religioso que en el social y el político; así en los parlamentos y asambleas públicas, como en el hogar doméstico; en las universidades é ins¬ titutos, igualmente que en las escue¬ las primarias públicas y privadas. Da esta manera el liberalismo ha ido pe¬ netrando en todos los organismos so¬ ciales y la revolución mansa, minando poco á poco los fundamentos del orden social crisiiano, ha allanado el cami¬ no á la revolución fiera. Así han ido creciendo como legión los enemigos de Dios y de la Iglesia, los hombres sin fe y sin conciencia que no creen más que en la vida presente, que en ella quieren ver satisfechas todas sus concupiscencias y que no encuentran otro medio eficaz para lograr su in¬ tento, sino la revolución y la anar¬ quía. Tanto ha crecido el número de estos desdichados, que se han creído con fuerzas y elementos suficientes para dar la batalla contra todos sus adver sarios y destruir la Iglesia, el estado, la milicia, l'fy magistratura y todo el edificio social existente. Testimonio irrecusable de ello es la revolución organizada en Barcelona qne estalló en Julio del pasado año, la cual tenía sus ramificaciones en muchos puntos de España y no llegó á hacerse gene¬ ral, porque los revolucionarios barce¬ loneses se adelantaron á los demás, lanzándose á la calle antes del plazo previamente fijado para todos. Allí se vió bien á las claras cuales son los sentimientos de los socialistas y anar¬ quistas y adonde intentan llegar con sus propagandas y planes políticos. Allí se vió en todo su fatídico esplen¬ dor el término fatal á que nos condu¬ cen con la libertad desenfrenada del error los partidos liberales llamados dé orden; pero que atienden solo al orden material y son fuente y ori¬ gen del desorden moral más lamenta¬ ble y espantoso, ■ , El Heraldo de Cristo ï45 Al grito de las víctimas sacrifica¬ das en la revolución de Julio, al ruido de los templos y conventos que se desplomaron, al resplandor siniestro de los incendios que en pocos momen¬ tos redujeron á cenizas las moradas de los siervos de Dios, han desperta¬ do los católicos españoles y se apres¬ tan á dar la batalla á la revolución. Se han dado cuenta del peligro que les amenaza y quieren conjurarlo antes que se convierta en catástrofe general é irreparable En todas partes se congregan los católicos formando imponentes y nu¬ merosísimas asambleas. Y así como la causa próxima é inmediata déla semana trágica han sido las escuelas láicas que se pretende implantar en toda In nación, contra éstas se diri¬ gen en primer término las protestas y reivindicaoiones de los católicos; pe¬ ro todos reconocen que es necesario sobre todo conquistar lo que se ha da do en llamar el santuario de las leyes; pues ahí está la fuente principal de los males que .deploramos, y solo des¬ pués que el ejército católico haya re¬ conquistado este alcázar, podrá asen¬ tarse en sólidos cimientos el orden mo¬ ral hoy tan perturbado. Por eso todos confiesan que no hay que contentarse con ésas manifestaciones y actos de protesta, que es preciso luchar en to¬ dos los terrenos y luchar sin descan¬ so; que en defensa de la santa causa que sostenemos hay que acudir á la prensa, á la cátedra, á la tribuna pú¬ blica, á la asociación y principalmen¬ te á los comicios. El maravilloso despertar de los ca¬ tólicos empieza á causar asombro y temor á los enemigos. Estos que ya daban por descontada su victoria y esperaban coronarse pronto con los laureles del triunfo, ven que habran de sostener rud^ combate y resisiir al empuje y tesón de las fuerzas católicas. Los dos ejércitos reúnen sus fuer¬ zas, las cuentan, las organizan, las adiestran para el combate y Ja guerra está declarada. De una parte están los verdaderos católicos, los que con¬ fiesan á Cristo en público y en priva¬ do, los que reconocen que su ley san¬ ta ha de imperar en la política y en las relaciones sociales, lo mismo que sobre ias familias y lus individuos, los que proclaman á Cristo como sobera¬ no dueño y señor de todas las cosas. De otra parte están*todos los demás, poique Cristo ha dicho: quien uo está conmigo está contra mí. Y así, con¬ tra Cristo están todos los partidarios del estado liberal, que se proclama independiente de las leyes divinas y eclesiásticas, sea cual fuere el título ó mote con que pretendan disfrazarse ó darse á conocer. Contra El están los socialistas, los anarquistas, lós masones, los herejes, los cismáticos y cuantos no quieien someterse á Cris¬ to y á su Iglesia. Y aun están contra El los que quieren conciliar los dos bandos opuestos, la luz con las tinie¬ blas, el error con la mentira, á Cristo con Belial. ¿Cual de los dos ejércitos vencerá? El de Criño tiene asegurada la vic¬ toria. Podrá ésta permanecer indecisa por mas ó menos tiempo. Podrán los. enemigos producir numerosas ó esca¬ sas -bajas en nuestras filas. Pero la victoria final, el triunfo defluitivo esta reservado á nuestras gloriosas hues¬ tes. La palabra de Cristo, que es pa labra divina é infalible nos lo atesti¬ gua: las puertas del infierno no pre- valecerán. Fr. Pacífico. +■ ‘j-i— La Obra del Pan de S. Antonio produ¬ ce maravillosos resultados. Con el pro¬ ducto de las limosnas recogidas en el ce¬ pillo de la iglesia de S. Francisco en Pal- 146 El Heraldo de Cristo ma, han sido socorridos durante la cuarta I de las limosnas las señoras: D.a Ana Su- semana de cuaresma 400 pobres. El so¬ I reda, D.a Josefa Peña, Sra. Marquesa de corro ha sido no solo corporal, sino tam¬ la Fuen-Santa, D.a Juana Rullán y D.a Jo¬ bién espiritual. El lunes 28 de febrero en sefa Mir, todas ellas pertenecientes á la la iglesia de la Hermandad de S. Francis¬ Pía Unión de S. Antonio. co se dió principio á una tanda de ejerci¬ Por la reseña que acabamos de deli¬ cios espirituales dirigidos á los pobres near podrán ver nuestros lectores el bien por el M. R. P. Provincial de la O. T. R. incalculable que hacen á los pobres los y el presbítero terciario D. Claudio Fus¬ i devotos del glorioso S. Antonio qne de¬ ter. Desde el primer día el concurso fué positan limosnas en su cepillo, para soco¬ ya muy numeroso y aun fué aumentando rrer las necesidades de los indigentes. El en los días posteriores. Causaba ver¬ Santo de todo el mundo, como le llamó dadera alegría mezclada de tierna com¬ León XIII, á todos atenderá con su pode¬ pasión ver á tantos pobrecitos reuni¬ rosa intercesión, colmando de bienes á dos para escuchar la explicación de las sus devotos generosos con los pobres. verdades eternas y de las disposiciones X. para cumplir con el precepto pascual; y al escuchar sus religiosos cánticos que modulaban muy bien, y especialmente al Pan de 5. Antonio percibir sus gemidos de dolor y arrepen¬ timiento, no podía uno dejar de sentirse Mes de Marzo profundamente conmovido en su corazón. Seguramente que aquellos suspiros y lᬠCepillo de la iglesia de San Francisco en Palma grimas penetraban los cielos é inclinaban la misericordia divina no solo á favor de Por 790 kilos de pan . 276’50 ptas. Por 1050 libras de arroz 168’00 » los pobres que lloraban sus pecados, sino también á favor de los generosos devo¬ tos de S. Antonio que los socorren con sus limosnas. Repartido en metálico . 20’00 » Total repartido. . . 464’50 » Limosnas recogidas. . 338’00 » El domingo 6 de Marzo, cuarto de cua¬ resma, celebróse misa de comunión gene¬ ral en la referida iglesia de la Hermandad, y después de una plática preparatoria que les dirigió el celebrante D. Claudio Fus¬ ter, Pbro. acercáronse á recibir el pan de los ángeles 367 pobres que unidos á los que hubieron de comulgar particularmen¬ te forman el número de 400 pobres soco¬ rridos con el Pan de S. Antonio. Terminada la misa de comunión se re¬ partieron á los pobres 1.050 libras de arroz y 790 kilos de pan, más 20 pesetas en metálico que se distribuyeron particu¬ larmente: todo lo cual importa la suma de 464 ptas. 50 cts. Hicieron la distribución Déficit de este mes. . 126’50 » ^róniea franciscana INTERIOR Inca.—El día 13 de Marzo se consti¬ tuyeron en esta ciudad los Discretorios de Hermanos y Hermanas de la Tercera Orden en la forma siguiente: Hermanos: Director Rdo. P. Fr. Pedro J. Cerdá. Ministro D. Pedro de A. Mulet Reinés. El Heraldo de Cristo H7 Vice-Ministro D. Bartolomé Nicolau Ramis. Maestro de Novicios D. Miguel Durán Seurina. Vice-Maestro de Novicios D. Pedro Miguel Baile Seurina. Secretario ' D. Miguel Seguí Mateu. Tesorero I). -Juan Estrany. Enfermeros D. José Campins Seguí. » Antonio Llinás Garau. Vocales D. Juan Prats Coll. » Sebastián Mulet Martorell. •.» José Campins Beltrán. » Sebastián Llabrés Perelló. Ilennanas: Ministra D.a María Monserrat Borrás Llacer. Vice-Ministra D.a Catalina Fiol Pujades. Maestra de Novicias D.a María Ignacia Llabrés Buades. Vice-Maestra D.a Magdalena Ramis Janer. Secretaria D.a J.a María Mulet Carrió. Vice-Secretaria D.a Antonia de Montaner Gual. Enfermeras D.aJ.a Ana Ferrer Seguí. » Catalina Verd Gual. » Teresa Jaume Beltrán. » Esperanza Socías Llabrés. Vocales-Celadoras D.aMargarita Beltrán Beltrán. » Antonia M.a Ramis Ramón. » Magdalena Seguí Trias. » Juana Salas Janer. » Catalina Fiol Beltrán. » Francisca Salas Ferrer. D. María Salas Seguí. » Ana Coli Domenech. » Francisca Bennassar Baile. » Francisca Ana Castañer Mulet. » Antonia Pol Figuerola. » Isabel Palou Mateu. » Clara Gilabert Verd. » Catalina Boeras Mateu. » Magdalena Seurina Domenech. » Modesta Gimeno Calvo. » M.a Antonia Sampol Antich. » Margarita Noguera Seguí. » Matilde Gomila Quintana. » Juana Ana Ramis Alzina. » Luisa de Montaner Gual. » Magdalena Font Molinas. » Jerónima Escarrer Campins. I Durante el mismo mes han ingresado en la Tercera Orden como novicios 35 hermanos y 58 hermanas. La comunión general del día 19 fué concurridísima, y edificante por el buen orden y compostura con que comulga¬ ron los Terciarios; los cuales acudieron también puntualmente á la reunión i mensual de la tarde á pesar de lo desaj pacible del tiempo. Son también muchos los que solicitan inscribirse en el «Auxilio Mutuo Popu¬ lar» demostrando con ello que se han j hecho cargo perfectamente de las venta¬ jas de esta benéfica sociedad. Randa.—Tampoco Randa ha querido permanecer ageno al regenerador movi¬ miento franciscano que se ha iniciado j en Mallorca, y el 19 de Marzo recibieron j el santo Hábito de manos del P. Franj cisco Fornés, 36 hombres y 66 mujeres j de aquel pintoresco caserío sito á la fal- j da de aquel monte santificado con las huellas del santo y sabio terciario, Bea¬ to Ramón Lull, gloria de nuestra isla y de nuestra Orden Tercera. El día 28 recibieron el Hábito de ma¬ nos del mismo Padre 3 hombres y 7 mu¬ jeres. i48 El Heraldo de Cristo Abrazamos fraternalmente á todos y ¡Ojalá que el camino de Asís sea para en particular á los señores Vicario y dicho diputado el camino de Damasco! capellán, quienes, ingresando en la Or¬ den, animaron á todo aquel pueblecito. De los Estados Unidos Arta. - El 27 de Febrero pasado pro¬ fesaron en aquella villa 5 hombres y 6 mujeres, y se dió el Hábito á 6 mujeres. En San Francisco de California inau¬ guróse no ha mucho con el nombre de Club-Landmarh una agrupación de sa¬ bios, cuyo fin único es la conservación Andraitx.—El día 13 del pasado mes de los edificios de las antiguas Misiones de Marzo el Rdo. P. Juan A. García im¬ Franciscanas que amenazan ruina en puso el Hábito de la Tercera Orden á California, Nuevo Méjico, Arizona y 77 mujeres. Pronto, Dios mediante, se Tejas. instalará canónicamente la Orden Ter¬ cera en este pueblo, pues son muchas las j personas que desean ingresar en ella. San Hntonio, Patrón por elección de un pueblo Los habitantes de Ancino, pueblecillo EXTERIOR de la. diócesis de Novara, Italia, eligieron Importante hallazgo Recientemente se ha encontrado en la Biblioteca Nacional de París un manus¬ crito oculto hasta ahora á los ojos de los á San Antonio de Padua por patrón, y rogaron al Obispo que pidiese á Roma la confirmación. El 12 de Mayo del año pasado la Sagrada Congregación de Ri¬ tos sancionó dicha elección. eruditos. Dáse como cierto que este manuscrito es un fragmento del Opus Tertium dèl Hijos de San Francisco predicadores cua¬ resmales en la ciudad de los Papas célebre franciscano Rogerio Bacón. De la lista de los predicadores (en nú¬ Un terciario ilustre mero de 25) que han predicado la Cua¬ resma en otras tantas iglesias de Roma, En Cividate (Italia) se ha inaugura¬ las más principales, entresacamos los do un monumento al célebre Terciario nombres de once religiosos franciscanos, Franciscano, Giuseppe Torini, muerto y son los siguientes: en 1897. En Santa María la Mayor, P. Severim La provincia de Brescia le debe todas Mambrini, de los frailes Menores; en las obras católicas y sociales que hoy Santa María de Vallicella, P. Francisco constituyen su prosperidad. de Seiano, capuchino; en la Inmaculada El diputado Ferri ç 5an Francisco Concepción (piazza Barberini), P. Do¬ mingo de Origgio, capuchino; en San En el mes de Agosto del año pasado, Carlos del Corso, P. Norberto Guerrini, Enrique Ferri, diputado socialista del de los frailes Menores; en Santa María parlamento italiano, fué á Asís, no en de Aracoeli, P. Severino Mambrini, de los calidad de peregrino, sino de futuro his¬ frailes Menores; en Santa María deTrans- toriador. pontina, P. Leonardo Baroncelli, de los El diputado Ferri quiere estudiar la frailes Menores; en los Santos Doce vida de S. Francisco, á fin de compren¬ Apóstoles, P. Luís Manni, de los Meno¬ der su obra y el maravilloso poder de res Conventuales; en Santa Práxedes, regeneración religiosa y social que ella P. Justo Trovatelli, de los frailes Meno¬ contiene. Ha anunciado una Historia del res; en San Antonio (vía Merulana), Pa¬ Serafín de Asís, y como no ha de care¬ dre Francisco A. Giordano, de los frai¬ cer de originalidad es esperada con an¬ les Menores; en San Lorenzo (extramu- sia por todos. sos), P. Agnello de Guarcino, capuchino; ElHeraldo de Cristo 149 en San Lorenzo in Lucina, P. Fidel de Giuliano, capuchino. En la sala del Trono del Vaticano, hallándose presentes el Papa, el Sacro Colegio y toda la Corte Pontificia, ha predicado el elocuentísimo P. Lucas de Padua, capuchino, quien ha logrado pro¬ ducir con su palabra de fuego honda conmoción en su selecto auditorio. Péndulo cosmográfico y astronómico En el convento franciscano de Ciniez existe un curioso péndulo, inventado y construido por un fraile. Este péndulo, pequeño chef d’ ceuvre de mecánica, cons¬ ta de un globo terrestre con movimiento de rotación sobre su eje; un ecuador fijo que marca las 24 horas del día; un sol con su horizonte que cambia de un solsti¬ cio á otro y señala la salida y puesta del sol, la aurora y el crepúsculo de todos los lugares de la tierra. Lleva además seis cuadrantes; uno que marca las horas y minutos locales, otro los meses y los días de cada mes, el tercero las fases de la luna; y los años comunes, bisiestos y día de la semana el cuarto. Para señalar el número de minutos que el sol ade¬ lanta ó retrasa con relación á los relojes, tiene el minúsculo aparato otro cuadran¬ te de ecuación. Y, por fin, otro cuadran¬ te universal indica, cuando se quiere, la hora y minutos de todos los puntos del globo. Este cuadrante está unido á un meridiano universal, y puestos ’ ambos en movimiento adelantan ó retroceden, según se desee, hasta el punto cuya hora se quiere averiguar. ¡Oh! ¡la ignorancia de los frailes! EI P. Gemelli El R. P. Gemelli, franciscano, doctor en Medicina, dió una interesante confe¬ rencia científica, el 11 de Enero, en la Asociación Sanitaria de Milán, ante un auditorio solamente de médicos, los úni¬ cos para quienes valía la tarjeta, sin que faltase en él ninguna notabilidad. El doctor Denti hizo la presentación del sabio franciscano. Comenzó el P. Gemelli haciendo la historia de la invitación que le dirigió la Asociación Sanitaria, en la que se le rogaba que repitiese la conferencia que en otro lugar había dado sobre los mila¬ gros de Lourdes. Expuso el aspecto filo¬ sófico de la cuestión de las milagrosas curaciones y de lo que sobre ello puede hablar la medicina, y de lo que tiene que confesar la verdadera ciencia ante esos casos estupendos. El efecto que produjo en el auditorio puede comprenderse, atendiendo á que el P. Gemelli es el paladín de la Inma¬ culada, que en congresos científicos se ha sostenido casi solo contra todos los sabios anticatólicos, presentándese, ade¬ más, en desafío científico ante el Sr. Podreca, director de L'Asino, periódico sa¬ tírico y satánico, que nunca se ha atre¬ vido á dar la cara, huyendo corrido, de ciudad en ciudad, del P. Gemelli. Obras y trabajos realizados por los fran¬ ciscanos de Cierra Santa desde el Ca¬ pítulo General de 1903 al de 1909 Celebraron por el Papa, Príncipes cristianos, bienechores y Religiosos di¬ funtos 300.000 Misas; administraron 12.578 bautismos, 12.484 á niños y 84 á adultos; admitieron 867 abjuraciones y conversiones; frecuentaron sus escuelas en cada año 45.000 niños; alimentaron á 350 huérfanos; sustentaron 2.500 fami¬ lias con más de 11.500 individuos po¬ bres; administraron 3.281 matrimonios; hicieron 8.481 entierros; hospedaron en sus Casanovas 88.692 peregrinos, y rea¬ lizaron tantas otras obras de caridad que sólo puede ejercer la virtud informada del espíritu de Jesucristo. Los Franciscanos en el Japón Hace solamente dos años que los hijos de S. Francisco se establecieron en Sap¬ poro, donde se han hecho muy populares. Hoy día más de cien discípulos frecuen¬ tan las clases que han establecido de in¬ glés, francés y alemán. 150 El Heraldo de Cristo Noticias ? variedades Elocuente contraste Para los inundados de Francia ha dado el Papa, despojado de lo suyo, 30.000 francos. El Presidente de la República francesa y representante oficial de la Masonería expoliadora se ha contentado con dar 10 000 Ha¬ ga ahora cada cual el comentario á estas cifras que mejor le cuadre. Predicando con el ejemplo Los jefes de la Iglesia no cesan de insistir en la necesidad de sostener y propagar la Prensa católica, y empie¬ zan por predicar con el ejemplo. El venerable Arzobispo de Turin, Cardenal Richelmv, acaba de vender una propiedad suya en 70.000 fran¬ cos, cuya suma remitió como donati¬ vo al periódico católico de dicha ca¬ pital II Momento. El Cardenal Sarto, hoy Pío X, sien¬ do Patriarca de Venecia, vendió su rico pectoral para sostener La Difesa de dicha ciudad. Una lieroina Una maestra laica de Thaon, obli¬ ga á sus alumnas á que estudien un libro de historia condenado por los obispos. Una de ellas, joven de diez años, no sabe la leccióta. —¿Qué ha hecho Vd? —No he leídu el libro porque mi conciencia me lo prohibe. —Ah, bien; copiará V. la lección literalmente en este cuaderno. La niña toma el cuaderno y se dis¬ pone á escribir, silenciosa, pero re suelta á no faltar á su conciencia de cristiana. Cuando la maestra toma la copia en sus manos y se dispone á leer, que¬ da pálida de coraje. La niña había escrito en caracte¬ res limpios y claros el Credo. Era la única manera que tenía de protestar contra aqu'lia tiranía, y proclamar su fe de católica. ¿Quién le había enseñado á obrar así, y sobre todo, quién le había in¬ fundido, en tan corta edad, aquellas energías. Fácilmente se adivina; tenía una madre profundamente cristiana y de bastante talento para educar á sus hijos y formar su carácter... ella ha¬ bía enseñado á la niña, y sobre todo, le había sabido infundir, á tan corla edad, aquellas energías. Frutos de las escuelas laicas El Tribunal del Sena ha publicado, que entre 1 200 niños condenados á las cárceles correccionales, de cada 100 nuios proceden 11 de las escuelas católicas y 89 de las escuelas laicas. Nadie se maraville, pues, de que ante semejantes horrores los mismos liberales, librepensadores y libertinos se espanten y se vean forzados á de¬ cir, como Victor Hugo, qu|j los padres que envían sus hijos á las escuelas laicas, merecerían ser ahorcados en medio de la plaza. Barriada obrera En Burgos ha sido colocada la pri¬ mera piedra de una barriada obrera, costeada por un legado piadoso, y con el fin de dar á los obreros casas bara¬ tas. El Sr. Arzobispo de Burgos colo¬ có la primera piedra y dirigió la pala¬ bra á la inmensa concurrencia que asistía al acto. Avances del Catolicismo En Alemania.—Ha causado profun¬ da sensación, en los Círculos univer¬ sitarios protestantes de Alemania, la conversión al Catolicismo del profe¬ sor de la Universidad protestante de Halle, el Dr. Albert de Rouville, el cual publicará en breve un libro titu¬ lado Ingreso en la Santa iglesia, en el El Heraldo de Cristo i si¬ cual, bajo el epígrafe «Experiencias y creencias de un convenido», dará á conocer los motivos que le ban indu¬ cido á abjurar el protestantismo y abrazar la fe católica. En Inglaterra.—Se han converti¬ do ai catolicismo, durante estos diez últimos años, 446 pastores protestan¬ tes, 417 miembros del Parlamento, 205 oficiales del Ejército, 162 litera¬ tos, 127 jurisconsultos, 69 médicos, 39 oficiales de la Armada y 66 miem¬ bros de la nobleza. De todos estos convertidos 209 han llegado á ser sacerdotes y 158 abra¬ zaron el estado religioso. En Rusia.—Según la última Memo¬ ria publicada por el Santo Sínodo, ascienden á 300.000 las conversiones al catolicismo desde la publicación en 1905 del ukase imperial estable¬ ciendo la tolerancia religiosa. Universidad Católica Muy pronto será una realidad la fundación de una Universidad Católi¬ ca en Buenos Aires, llenándose así los deseos del Episcopado Argentino y las aspiraciones de los padres de fa¬ milia, que ven en los centros oficiales de enseñanza un foco de increduli¬ dad. La Universidad Católica comenza¬ rá modestamente, como suelen co¬ menzar los caudalosos ríos, y como comienzan siempre las obras de Dios. Lección práctica Para dar á conocer el verdadero espíritu que se cubre con el nombre de socialismo y anarquismo, Aserta¬ mos las siguientes líneas: «El suceso produjo hondísima sen¬ sación á cnantos lo presenciaron. Y fué que el hado benéfico que rige y gobierna á los hombres, cogió de una oreja ai obrero que más se distin¬ guía por su presuntuosa locuacidad, lo plantó en medio de la asamblea d* arregladores del mundo y le mandó contestar á esas preguntas. — ¿Qué harías si yo pusiera en tus manos mi omnímodo poder? —Señor—contestó el obrero algún tanto alarmado—lo primero que ha¬ ría sería unir á todos los hombres del mundo en sociedad de resistencia. —Vamos, poner puertas al campo. Está bien. ¿Y después? —Después les infundiría un sólo pensamiento y una sola voluntad. —La segunda parte de la cuadra¬ tura del círculo. Corriente. ¿Y des¬ pués? i — espués, pediría rebaja de horas de trabajo y aumento de jornal, y si no lo concedían, declaraba la huelga general. —Concedido todo, y no haya huel¬ ga. ¿Y después? —Después, volvería á pedir más aumento de jornal y rebaja de horas. —No perdamos tiempo: supón que las horas d^ trabajo bajan á cero y el jornal sube á mil. ¿Y después? —Después, como sobraría el tiempo y el dinero, nos dedicaríamos á com¬ prar muchos libros, á estudiar mu¬ cho, á viajar mucho, á darnos buena vida, á gozar. — ¡Perfectamente! Ya sois todos los obreros ricos, todos sabios, todos feli¬ ces. ¿Y después? —Después... después... después de ser ricos y felices, la verdad, no sé que reste nada por hacer. — ¡Comoque si resta! ¿Pues quién había de hacer tus pantalones y tus zapatos, y tu casa, y todo lo necesa¬ rio á la vida? — ¡Ah! Todo eso que lo hicieran los otros, los infames que antes nos ha¬ bían explotado. —De manera que tu gran solución se reduce á un simple cambio de esta¬ do; á que pasen a obreros los que hoy son burgueses, y á burgueses ó archi burgueses los que hoy son obreros. Y 152 El Heraldo de Cristo como aquellos predicarían después lo propio que vosotros, se impondría in¬ mediatamente un nuevo cambio de estado, el cual provocaría otro luego, y otro, es decir, un cambio continuo; un círculo vicioso, sin salida. ¿Y para esto luchar? ¿Para esto conmover el mundo? ¿Para esto inventar sistemas, derrocar poderes, abatir colosos, des¬ truir la sociedad toda? Resulta, pues, quede cualquier mo¬ do, unos han de ser ricos y otros po¬ bres. Pues, caballeros, el sistema ra¬ cional será aquel que haga cumplir á los unos con los otros como buenos hermanos, y eso es lo que quiere el catolicismo.» El tabaco y los niños El incremento que toma el vicio del tabaco entre los niños, ha inducido á Mr. Lino Ferriani, procurador gene¬ ral de Roma, á publicar una estadis tica que demuestra los desastrosos efectos de la nicotina en la infancia. De ‘200 niños fumadores, cuyas eda des oscilan entre los siete y los diez años, se encontraron: 9 atacados de nictalopía; 28 con afecciones gastro¬ intestinales; 15 con defectos cardía eos; 82 padecían irascibilidad é in¬ quietud; 110 experimentaban apatía y rebeldía para el estudio; 6 sufrían contracciones nerviosas, y 5 eran neurasténicos Es decir, que ni uno solo gozaba de salud completa. Con razón en varios países, como en Noruega, el Japón y gran número de los Estados de la América del Nor¬ te, la ley prohibe el uso del tabaco á los menores de dieciseis años. La Trapa y la acción social Con este título ha publicado el Pᬠrroco de Dueñas un interesante artí¬ culo acerca de los Religiosos Cisternienses (vulgo de la Trapa) del mo¬ nasterio de Venta de Baños. Aquellos buenos religiosos trabajan manual¬ mente, comen tan sólo legumbres, y el producto dé su trabajo lo reparten entre los pobres, la enseñanza, la prensa católica (á la que se suscri¬ ben por miles de pesetas, y en la cual anuncian sus chocolates), los obreros y las religiosas pobres, etc. Es la eterna historia de los frailes, de los que renunciaron al mundo para no tener nada propio, ayunar, orar y mortificarse. De una de estas comu-, nidades antiguas de Sevilla, afirma el P. Gago, que dió ella sola en una ca lamidad pública, 50.000 duros, aho¬ rrados á fuerza de comer de vigilia todo el año. Actualmente dan sus aho¬ rros y su trabajo y su saber, y se les quiere expulsar de España. Pero éñ cambio, en una calamidad pública, hay qu« conmover á Europa, expri¬ mir los teatros, los bailes, los toros etcétera, y no se reuDe ni la mitad de los 50.000 duros. .j. j. ♦ ■}. j. +■ » Bibliograíía Hemos recibido uu ejemplar de la Memoria que ha publicado la Caja de Ahorros y Montepío de Sa Pobla titulada' Un sol Cor. Dicha Memoria revela con la elocuencia de los hechos el estado próspero y floreciente de la benéfica so-, ciedad. Felicitamos de corazón á la Jun¬ ta Directiva por el éxito alcanzado y en especial al dignísimo fundador y presi¬ dente de tan benemérita institución nues¬ tro buen amigo D. Juan Parera y San-' só, Pbro. Les deseamos nuevos progre¬ sos y triunfos y agradecemos el obsequio.' Necrología Durante el mes de Marzo fallecieron en Artá los terciarios Catalina Morey y Ribot, Antonio Alzamora y Servera y Pedro José Sureda y Gili. .. A. E. R. I. P. ; Tip. Católica de S. Pizá.—Sto. Cristo, 20.--Palma CULTOS EN NUESTRA IGLESIA DE S. FRANCISCO DE PALMA DURANTE EL MES DE ABRIL. Día 17.—Domingo.—Por la mañana á las diez, bendición so¬ lemne de una hermosa imagen de Ntra. Sra. del Carmen, obra del escultor catalán D. Francisco de P. Gomara. Acto continuo Te*Deum y Misa mayor cantada por el pueblo y la Schola Can¬ torum. En el ofertorio predicará el Rdo. Sr. D. Jaime Sastre, Vi¬ cario de Algaida. } " - Día 24.—Cuarto Domingo.—Por la mañana á las siete y media misa de comunión general para los Terciarios. Por la tarde á las seis y media, tendrá lugar la reunión mensual con exposición de S. D. M. y plática. Después se impondrán el escapulario y cordon á los que previamente lo hayan solicitado y reúnan las condiciones que exige la regla. Día 30.-Empieza en este día el ejercicio del mes de Mayo dedicado á la Purísima Concepción. Se practicará todos los días, con toda solemnidad, por la mañana á las cinco y media y á las once y cuarto durante una misa, y por la noche despues del rezo de la sagrada corona. En los domingos y fiestas, por la noche se hará con sermón. El pueblo tomará parte en el canto. INDULGENCIAS PLENARIAS CONCEDIDAS A LOS TERCIARIOS Con las condiciones ordinarias pueden ganar los Terciarios indulgencia plenaria lde días siguientes de este mes: Día 3, S. Benito de Palermo.—«15, Bto. Luquesio, primer Terciario.™ 17, Él Patrocinio de S. José.—20, Bto. Gil de Asís.—24, S. Fidel de Sigmaringa. —28, S, Pablo de la Cruz; y además el día de la Reunión mensual y otro cualquiera del mes á su libre elección. El día 16, aniversario de la profesión deN. P. S. Francisco, ó el domingo posterior, si estuvieren legítimamente impedidos aquel día, pueden ganar también los Terciarios indulgencia plenaria renovando la profesión.