Reui$íB densufiL Díftaiia a| fotuto i propasaoió» ús la llnioii lertora Je S, Francisioje ísís) dots otras fraooistaiias. Año I Palma i.v de Noviembre de 1909 NÚm. 9 SE PUBLICA COX CEWSURA ECLESIASTICA Sumario: Por los difuntos.—Lo que hemos hecho. —Himno de la Sección de Her¬ manas Josefinas de Arta.—El Espíritu de S. Francisco. —¿En qué quedamos?— Pan de San Antonio.—Crónica Franciscana. ‘ PRECIOS PE SUSCRIPCIÓN : ^\\A/VV> Durante un ano . . . ... . . . . Por un paq[uete de 100 ejeraplai'es inéusuak'S. » id. de .50 » » » id. de 2.5 », » , > id. de 10 > ^ - . 1‘00 ptas 5‘00 ^ 2‘.50 » i‘2r) ^ 0‘50 » Redacció'N y Administración: Convento de S. Francisco. IDE JN/IAELOEGA ADVERTENCIA Por falta de espacio dejamos de publicar en este número algu¬ nas interesantes correspondencias, que aparecerán, Dios mediante, en el próximo. Reyisífl ®ensuflL Año i Palma i.° de Noviembre 1909 Núm. 9 Por los difuntos I Sin embargo no es tan perfecta la vi da del liombre en general, C[ue no ten- ; gamos que temer por ellos. Su conducta Acabamos de perder un ser querido: i arreglada y cristiana no estaba tal vez la muerte cruel segando sin compasión i exenta do ligeros defectos, que aun sieii- las existencias de los mortales ha busca¬ ; do ligeros repugnan sumamente á la do su víctima entre aquellos á quienes ; santidad infinita do Dios. amábamos, y sorda á nuestros clamores ó insensible á nuestras lágrimas los ha ! I Y ¿podrán, sin estar bien limpios, eiitrar en la bienaventuranza de donde se se})arado de nuestro lado, dejando un vacío inmenso en nuestro desgarrado corazón. (■Quizás ha sido esta víctima el abuelo decrépito, patriarca de nuestras familias; quizás el padre cuidadoso y solícito, ó la cariñosa madre; ([uizás el dulce ami¬ excluye por completo todo lo manchado? No; la justicia rectísima de Dios no,pue¬ de permitirlo. ¿Perderáii, pues, la gloria del cielo por aquellas pequeñas‘faltas que á duras penas puede evitar, nuestra miserable naturaleza? Tampoco. Dios ha encontrado el medio de armonizar las go, complemento de nuestra existencia; ([uizás los hermanos unidos con noso¬ tros por la sangre y el amor; ([uizás los hijos los hijos amados mas ([ue la niña de nuestros ojos, mas ([ue nuestra pro[)ia vida. La muerte no ha cuidado de [)regun- i generosidades de su misericordia con las rectas exigencias de su justicia: en el Purgatorio satisfarán las almas de los justos sus últimas deudas con Dios, y desde este lugar de, expiación saldrán para gozar de las inefables delicias del Paraíso. tarnos que sacrihcio nos será menos cos¬ toso, sino que ha escogido por sí misma Y mientras estarán en el Purgatorio, su presa, sin atención á nuestros afectos, I nosotros podremos auxiliarlas: la ora¬ y arrebatándonos alguno de los precio¬ sos seres ([ue eran objeto de nuestro ción, la penitencia, el sacrificio, las obras de caridad, la comunión, la misa, la li- amor, nos ha privado de él pre ¿Para siempre? No; mas para siem¬ allá de la I mosna, el trabajo mismo, serán con tan¬ tas otras obras de piedad y virtud, los medios que Dios pondrá en nuestras tumba nos esperan; desde el cielo nos manos para c[ue abreviemos sus penas; sonríen y nos aman, y juntos en la así podremos demostrarles que couti- presencia de Dios interceden para no¬ |! miamos amándolas, y Dios mismo ten- sotros. I drá especial complacencia en ver que nosotros hacemos esfuerzos para soco- 74 Kl ÍÍéraldo de Cristo rrerlas, satisfaciendo una parte de las penas que á ellas les corresponden. He aquí lo que nos enseña la fe; lio aquí lo que nos dice la Religión; he aquí como nos habla la Santa Iglesia ante la tumba de nuestros difuntos. Gracia especial quiso hacer Dios á N. P. S. Francisco para los difuntos de sus tres ordenes, y para todos sus do votos. Era el momento más sublimo de toda la vida del Santo Patriarca; Cristo cruci¬ ficado acababa de imprimir en el cuerpo de Francisco las señales admirables de su Pasión, las llagas de sus manos, i)ies y costado, y al comunicarle des[)ués una })arte de los altísimos secretos de su Pro¬ videncia, le dijo; «(;,Sabes el prodigio »que he obrado en tíV Pues te he dado »las señales de mi pasión para (jue tu »seas mi ayudante. V así como yo el día »de mi muerte bajé al Támbo, y tudas »las almas que encontré allí, en virtud »de mis llagas, las saqué y las c(.)nduje »al Paraíso; así también te concedo á tí >;ahora, para que seas conforme en la »mueitc como lo has sido en la vida, »que tu puedas des]>ués do tu muerte »todos los años, el día del aniversario, »bajar al Purgatorio, y todas las almas »dalos tuyos en las tres órdenes, esto es, «Menores, Hermanas, y Terciarios, y las «de aquellos que han sido tus devotos, «puedas en virtud de las llagas (]ue aho»ra te imprimo sacarlas de allí y llevar- «las al Paraíso.» Asf Iq^reveló el mismo Pienaventuiíi- do Padre ;á un santo religioso, y así lo contaron los ocho testigos (pie presen¬ ciaron la aparición y oyeron las [lalabras del mismo S. Francisco. Y no ha sido esta, con ser tan grande, la única gracia hecha á S. Francisco en favor de las almas del Purgatorio. Porque la Santa Iglesia, atenta á los méritos y santidad del Padre, ha abierto sus tesoros á los miembros de las tres órdenes y les ha concedido gracias iníjontables que pueden aprovechar en favor de las almas benditas que sufren en aquel lugar de expiación. Consultad, [(rescindiendo, si queréis, de todos los demás, el último éatálago de sus indulgencias, y ved las indulgen¬ cias [ilenarias concedidas á todos los hi¬ jos de Francisco para las fiestas prin¬ cipales del año, y para muchos otros días en cada uno de los meses; ved la indulgencia plenaria concedida á la tan recomendada Corona franciscana: ved las indulgencias concedidas á cada obra de [áedad y caridad que practiquen; ved las absoluciones generales y ben¬ diciones papales enriquecidas con in¬ dulgencia [denaria; ved las riquezas in¬ mensas de indulgencias plenarias y par¬ ciales encerradas en los seis Padi'c-nues¬ tros de la estación franciscana: tened en cuenta (|uc todas estas indulgen¬ cias son a[)licable3 á las almas del Pur¬ gatorio, y decid vosotros mismos, si no [)aroce ((ue Cristo y la Iglesia se mues¬ tran deseosos de (pie los hijos do Siin Francisco sean los encargados de au.\\i- liar á las almas (pie tanto sufren en el Purgatorio, y si el [loner en sus manos tantas gracias nos les compromete a ser¬ virse de ellas cu beneticio de los difun¬ tos (lue tanto pueden necesitarlo. yaipiemos, [)ues, todos los terciarios la consecuencia que de ahí so des[)rende; y no nos olvidemos de que si en todo tiempo debemos rogar [)or los C[ue han fallecido, debemos hacerlo principalmen¬ te en el mes de-Noviembre, generalmen te consagrado á la oración por los (li¬ jan los. Cx Terciario. bo que hemos hecho No crean las Hermandades laqu'esen- tadas en la reunión del 23 de Septiem¬ bre [lasado que hayamos dejado do a[)rovechar bien el tieiiqio trascuiTido desde entonces; [mes hemos seguido tra¬ bajando en la obra comenzada á lin de acabarla del modo más [lerfecto [losible; y dentro de poco, si Dios nos asiste, la veremos en marcha. ya lo hemos dicho varias c-eces, y lo repetimos el día 23; no Abamos á fundar sobre la Tercera Orden una sola obra social, sino una serie de Kl Hekaldo de CrísTo ohra..s\\ y [)ara hacerlo con orden y sin Pronto recibirán las Hermandades confusiones hemos creido indispensable desde el principio trazar un plan y esta¬ blecer las bases generales con que han de finieionar todas ellas para (pie ten¬ gan el delíido carácter y la indis])ensa- ble unidad. Esto hemos ])rocurado conseguir por im'diu de los adheridas y las demás que lo soliciten la cantidacl necesaria de Hojas de pro¬ paganda para dar á conocer á sus res¬ pectivos terciarios las ventajas que pue- flen sacar de la Seeción de Socorros mul¬ taos y las principales condiciones para pertenecer á ella. Será bueno (|ue procu¬ ren difundirlas todo b) posible á fin de Estatutos generales que sean muclios los que conozcan es¬ tas ventajas ya que tantos hay á quie¬ que redactados y ultimados desde prin- nes convendría aprovecharse de ellas. ' ci])ios de Octubre, fueron aprobados el Entre tanto se prepararán los im¬ dia. 15 del mismo mes por el Discretorio presos para ingresar en la Sociedad y de la Hermandad de S. Francisco, de los demás necesarios y se darán á los Palma,' iniciador del proyecto, y remiti¬ directores las instrucciones conveniendos inmediatamente á la aproliación de I tes. Anímense todos y dispónganse ál las Autoridades, con la tramitación co- I ti’abajo, ])ué.s ahora más que nunca será ires])ondiente ])ara poder obtener las ! ](recisa su activa cooperación. ventajas que la ley concede á las ins¬ tituciones de semejante indole, Fr. P. J. C. •» -)!e—)5í--)5í- ¥lh )!í- “Huxilio Mutuo Popular,, ' hemos titulado la Sociedad, ])orqne, si lilimio lie la teceióii le Ecriiiauas Josenaa,? bien se mira, cada una ele sus diferentes DE ARTA ,'lecciones tiene el carácter do auxilio En una crónica inserta en el número pues por ella se presta al asociado un do 1." do Octubre dijimos que la Her¬ socorro,material ó moral; de mutuo, ]>or- mandad de Artá tiene una sección de (pie unos á otros se ayudan y socorren los socios; y do popular puesto que para bien del ])ueblo pobre y trabajador están establecidas, aunque no dejen de concuriir con su caridad los que más pueden. Faltan ahora los Reglamentos espe¬ ciales ))or qué ha de regirse cada sección de nn modo címforme á bastases apro¬ badas; ])ero j-iodemos decir con satisfac- cióii que hermanas que bajoMa protección espa¬ cial de S. José, y ayudadas de las perso¬ nas do buen corazón que no {)ertencrciendo á la Tercera Orden quieran coo¬ perar á su obra, cuidan de visitar en su casa á los pobres tan amados y rfes- [(otados por nuestro seráfico Padre. Hoy j)ublicámos; el himno que les ha dedicado una Terciaria do Palma, D.·'' Margarita Estelrrch, y cuya inspira¬ El Reglamento de Socorros mútuos está terminado: y pronto podrán ente¬ rarse de él y firmarlo los répresentantes de las nermandades que lo deseen. Bien hubiéramos queri(io poder decir otro tanto dos ó tres semanas atrás, co¬ mo teníamos indicado; pero la evidente da miisica compuso I). Antonio \\hcéns, autor de tantas piezas religiosás de'canto para el pueblo. Sant Josejdi, el vostrq estol Caiitatiu vol honrar A n’ els pobres,: dantlos pa. Amor, doctrina y consol. necesidad de activar en primer término lo de los Estatutos, y por otra parte el tiempo empleado en consultar ,y estu¬ diar de nuevo los puntos más elifíciles del mismo Reglamento, nos han obliga¬ do á un ligero retraso, que al fin ]rodrá quedar convertido en mayor bien de los (]ue contiibnyan al buen éxito de la obra. Filies (Pel Pobret d’ Assís Nos encanta la pobresa, No feim mina de l iquesa Y tresor del Paradís. L‘amor de aquell Xereft Jai nostiámima nodreix, Ell á Vos nos ofercix, - Sant Joseph, vet nos t‘-ac(uí. 76 ' El Heraldo de Cristo Si estau al iiostro costat Trabayarem en constancia, Per la vellesa y 1’ infancia P’ el malalt y atribiüat. Feismns imatjés feels 'De'la caritat divina:.. ¡No’ n falt cap de Josepbina Devora Vos’en los cels! ^ -^oíe oce oce- El Espírílu de 5. francisco valido lo que pasaba en su interior, co¬ nocía claramente que en la espiritual milicia el hombre ha de empezar por ne¬ garse y vencerse á sí mismo. No le fal¬ taron ocaciones de alcanzar esta comple¬ ta victoria. Paseaba un día á caballo por la fértil llanura que rodea á Asís, y encontró en un camino á 1111 pobre y horrible lej^roso que le tendía las manos deformes en demanda de.una limosna. No pudo con¬ tener Francisco un movimiento de re¬ IV El Tesoro escondido.—Jesucristo en figura de leproso.—Sus mejores amigos.—La dama de sus pensarnientos. pugnancia y de horror; pero dócil á las inspiraciones y santos movimientos ele la. gracia, bajó del caballo, fuese hacía el pobre cuya mano temblorosa tomó y be¬ só con efusión depositando en ella una limosna. Montado otra vez á caballo, Vuelto á Asís Francisco empezó á de¬ jar sus diversiones y á alejarse de los negocios,'entregándose á la oración en la cual pedía á Dios con fervorosas ins¬ tancias que se dignase manifestarle sus ocultos designios. Empezaba á brillar en su entendimiento luz sobrenatural á cu¬ yo resplandor descubría la vanidad de las cosas, terrenas, y en su co¬ razón germinaba un nuevo amor mu¬ cho más grande, noble y generoso cjue el amor quo hasta entonces habia hecho de Francisco el héroe de muchas aven¬ dirigió su vista á donde estaba el lepro¬ so, y no divisándole en toda la llanura, comprendió que aquel leproso era el mismo Cristo en persona é inundada su alma ele celestial alegría, y prorrum¬ piendo en devotos cantares, tomó la re¬ solución de hacer cada día algo grande hasta alcanzar de sí completa victoria. Algunos días después tomando una considerable suma de dinero se dirigió al hospital de los leprosos, y reunién¬ dolos á todos, dió á cada uno una limos¬ na besando su mano con piadoso afecto; turas y el ídolo de su pueblo. S. Francis¬ y al separarse de aquellos pobrecitos ob¬ co, objeto de tan singular transforma¬ servó que lo que hasta entonces le había ción, iba encerrándose en si mismo co¬ sido amargo y repugnante, es decir, la mo la crisálida en su capullo, esperándo vista y trato de los leprosos, con el au¬ la hora en que su espíritu pudiese volar xilio de la gracia se le había hecho dul¬ libremente y descansar con seguridad ce y agradable. El mismo Seráfico Padre en Dios, bondad y belleza infinita. Y al dejó consignado este singular favor de compás que crecía en su corazón este no¬ Dios en su celebre Testamento que em¬ bilísimo amor que todo lo linde y ava¬ pieza con estas palabras; «Por la mise- salla, iban cediéndole su puesto los entu¬ »ricordia de Dios, yo Fr. Francisco co- siasmos y las alegrías y las inocentes di¬ »meneé á hacer penitencia de este modo. versiones y las caras amistades cqie has¬ »Cuando vivía la vida del pecado me ta entonces habían llenado su vicia y for¬ »costaba muchísimo mirar á un leproso, mado su carácter. De tal modo había »pero el Señor me llevó entre ellos, y de triunfar de tan dulces aficiones el »con ellos ejercí misericordia. Y cuando suavísimo amor de Dios, cjue podríamos »me alejé de ellos lo que me habia pa- sintetizar la vida de Francisco, después »recido costoso se trocó en fácil y agra- de su conversión, en acpiellas hermosas »dable para el alma y para el cuerpo. palabras por él mismo muchas veces re¬ »Después de esto tardé poco en abando- petidas: Dios mío y todas mis cosas. »nar el siglo.» Pero los afectos'naturales y las cos¬ Importnnábanle sus antiguos camara¬ tumbres arraigadas no se vencen y des¬ das para que asistiese á sus fiestas y cerran sin dificultad y sin empeñados ])artici]iase de sus diversiones, y él con¬ combates; y Francisco cpe iba obser- j descendiente y afable les prepaió un sun- Kl Heraldo de Cristo // tuoso coiiyite. Acabado el festín salieron todos por las calles de Asís, yendo el último de ellos Francisco con las insi^i;- nias de jefe de ac[uel ejército indiscipli-, nado y alégre, j procurando sustraerse á la tumultuosa algazara de sus compa¬ ñeros. De repente celestial visión inun¬ da su alma de inefable y nunca gustada dulzura, y se queda mudo é inmóvil. Dijo despues él mismo á su confesor qne aunque le liubieran despedazado todo su cuerpo, nada habría sentido: tanta era la dulzura c{ue embargaba su alma. Vuelto en sí, le preguntan los amigos la causa de su desmayo y ensimismamiento, y alguno de ellos le dice en son de burla: Qué es e.sto Francisco ¿Acaso piensas en tomar esposa? Sí, responde el vivamen¬ te, y será una e-posa tan noble, rica y hermosa como no se lia visto otra ja¬ más. Hablaba entonces Francisco de la Pobreza, esposa predilecta de Cristo N. S., la cual desde la muerte de su ce¬ lestial esposo era objeto de las burlas y desprecios de los hombres, y con la cual queria nuestro enamorado joven cele¬ brar místicos desposorios haciéndola la Señora de sus pensamientos y la com¬ pañera inseparable de su vida. Fr. A. R. ¿EN QUÉ QUEDAMOS? Protestas ¡Desacierto! ¡Escándalo! ¡Injusticia! ¡Asesinato! Así se ha calificado la muerte de Fe¬ rrer y Guardia, el fundador do la JAcac- Ja Moderna de Barcelona. Y se ha dicho que el Gobierno Español «con m desa¬ tentada conducta lia 'provocado la pro¬ testa airada de Europa entera:» incluso oí yo mismo á un buen señor que «se ai:ergonzal)a de ser español» pues decía que España estaba haciendo un inal pa¬ pel á los ojos de todo el mundo. Y por cierto que protestas las ha ha¬ bido en el extranjero. Han protestado periódicos socialistas del km pie ó des temple de L'Humanitó: han protestado los apaches que gustan de protestar con¬ tra todo lo justo; ha protestado la gente perdida que con su protesta misma de¬ muestra la justicia de la causa contra la cual combate; y han protestado una do¬ cena más do hombros, por razones fáci¬ les de adivinar. Fero vamos á cuentas: y esos perió¬ dicos y esa chusma que mueve ruido fuera do España, ¿está más enterada del proceso de Ferrer y de los hechos por qué .^e le condena, que el Tribunal mili¬ tar que pronuncia la sentencia después del estudio de la causa? ¿O será que so han hallado en el extranjero razones do defensa para Ferrer, que no pudo hallar¬ de ningún modo cu España el amigo encargado fio deVndoi'le, á pesar del vi¬ vo empello que en ello tenía? Y lo gi'acioso del caso es que ahora que ciertos espailoles «se arerf/üen.?an» cíe serlo, toda la prensa extranjera seria, enterada do las cosas, dá la razón al Go¬ bierno ospailol, y alaba su disposición no solo como recta y justa, sino también como conveniente y aun necesaria. ]3uono es que tomen nota do esto aquellos á quienes asustó el ruido de la protesta, pai-a que sepan en que situa¬ ción queda el asunto. iVaça un padre! Alguno do los protestantes so ha mos¬ trado lleno de compasión jarra coir las hijas de Ferrei-. ¡ l’obrcs hijas, haber pci-dido á su jiadre! Y sin embargo, el cariñoso padre, que disponía do una for¬ tuna do dos millonos de francos, estaba tan desprendido de sus hijas, que sufría muy bien el que una de ellas trabajara en Paris por un joiiral de dos francos y medio, insuíiciente ¡rara sostener á su fanrilia, lo cual la obligaba á tener en el hospital dos niñitos enfermos de dos y ti-es arlos de edad. Otra vivia del teati’o en qrre trabajaba tambiéir por neceísidad; y daba muestras de quei’cr do ve¬ ras á su padre; pero su padre le dejaba trabajar á pesar de sus colosales rentas. Y este padre que abandona á sus verd.'.doras hijas y vive divorciado de su legítima esposa, anda en comparlia de Soledad Vilafranca, la amiga que le me¬ rece toda su confianza, á cjuien escribe en sus últimos momentos una cariilosa carta. ¿Habrán perdido mucho sus hijas? Honor de mala leç Un periodista que se firma Mario An¬ tonio, y que se confiesa como uno de los 8 Ml llLRAi.no DL Cristo ires promotores de los sucesos de la se¬ i sino igualdad completa en todo: igual- mana trágica asegura i^or su honor que dad en el trabajo, igualdad en la fortu- Ferrer es inocente y no ba tenido parte ; na, igualdad en la representación so¬ en ellos. cial, etc. Y pensamos nosotros: ese hombre, ó Y al ver que después de tantos con¬ dice Ja verdad cuando se presenta como sejos de guerra, cjue han pasado casi uno de los directores de la semana roja ■ inadvertidos, se protesta tan alto contra ó no la dice. ^ el de. ]"errer, me digo: Y ese ¿no debía ISi no ¡a dice, ¿que motivos tendremos ser igual á los demás? ¿(¿,uó se ha hecho ])ara creerle al afirmar la inocencia de de la igualdad? Los demás ¿no eran para Ferrer? Si es falsa la primera parte de ; lossocialistas de tanto valor como Ferrer? su aserto, ¿porque no ba de serlo la se¬ : ¿íla}^ j)ara los socialistas diferencias dé gunda? En tal caso tenemos derecho á clases? ¿atienden á las diferencias de no fiar de su palabra. fortuna ó de representación social? Se- y si dice la verdad al afirmar que es : ñores socialistas y ácratas, que protestáis uno do los autores do los sucesos de Ifar- airados conti'a la sentencia de un tribu- cclona, cabe preguntar: ¿cuantos grados i nal legítimo, que no queréis la existencia mide el henor de un hombre que, según ■ de clases y os proclamáis defensores de confesión })ro]ua, es autor do tantas pro¬ la igualdad ¿en qué quedamos? fanaciones, incendios, robos, asesinatos Fr. Jt’XÍPERO. y todo lo demás (juebubo en Barcelona? En este segundo caso tainbien tene¬ mos derecho á no fiarnos en lo que dice por su honor. La razón de la proíesía Si se d'ce que las protestas hechas con motivo de la muerte de Ferrer obe¬ decen á sentimientos do compasión y humanidad, que rechazan el rigor y ; severidad con que se ha procedido, ! ^ Pan de 5. Antonio Mes de Octubre Cepillo de la iplesia de San Francisco en Palma Limosnas recogidas. . Por ñfi-t kilos de pan . Repartido en metálico . ¿)10'r)Dj)t s. lífT'ñO » 41‘0() » Ilemanente. . . . 7?’0() » cabo preguntar: Y las víctimas de la : -Xé-íCe-ll!ll·~^-¥fr· ){( -“* -)!é- Çróniea j última semana de Julio ¿no merecen compasión? ¿No eran hombres los reli- j ^ranei^eana giosos y sacerdotes asesinados.por los re- znsTTEPiion volucionarips? Y los que fueron arroja- ¡ Palm.'V. — Fiestas centenarias. — Con dos de sus propias casas, y tuvieron que j vagar por el cam[)o sin tener que co | mor? Y el párroco que hubo de morir j asfixiado por defender el Santísimo Sa- j grande pom])a y esplendor se ha ceh'brado en la iglesia de San Francisco de esta ciudad el sé])timo centenario de la fundación de la Primera. Orden Fran¬ era men to? Y ¿no eran débiles é indefensas muje¬ res, las que sin considei'ación á su sexo, ni á su edad, ni á su delicadeza, fueron arrojadas de su retiro y maltratadas de ])alal)ra y de obra? Y esos señores c^ue en nombre de la ciscana, La grandeza y trascendencia del acontecimiento que se ha conmemorado y la fama del orador encargado de anun¬ ciar la palabra de Dios y de exponer las glorias de S. Francisco y de su Orden, despertó desde el jirincipio el interés y la devoción de los ])uenos católicos de humanidad protestan d.p que se administre justicia á los criminales; no tienen humanidad para quejarse de que se ha¬ ya perseguido á las inocentes víctimas? i | esta ciudad y en especial de los Tercia¬ rios. Luego la solemnided de las fun¬ ciones, lo esj)léndido de la iluminación, el canto |>opular y más que todo la asis¬ Contradicción tencia de nuestro amadísimo Prelado al Y <l propósito de la misma protesta. acto religioso más culmiriante, que fué Continuamente oigo decir que los so¬ j¡ la Misa mayor de la lieda del Seráfico cialistas no quieren clases, ni diferencias. I' Patriarca, han dado á la celebración de El Heraldo de Cristo 79 este centenario nn carácter de imponen¬ ángeles el M. I. Sr. D. Mateo Garau, Pe¬ te grandeza y majestad que lia produ¬ cido impresión profunda y duradera en todos los fieles asistentes. El novenario empezó el día 2 de Octubre y la concu¬ rrencia c[ue acudia á oir los sermones nitenciario, proparando • á los asistentes á un acto tan sublime con una muy sen¬ tida y fervorosísima plática. El domingo día 10 celebró la misa de comunión el Rdo. P. José M. Aicardo y del Rdo. Ib José Manuel Aicardo, 8. J. alimentó con el pan eucarístico á los que fué ya numerosa desde el primer día; ya había sustentado con el pan de la di¬ pero el número iba en aumento todos vina palabra. En este día por la noche los días, basta concluir con la iglesia terminó el novenario. El orador hizo un completamente llemi, como ])ocas veces maravilloso resumen de todo lo expues¬ se vé, dada su grande extensión. El te¬ to en los demás sermones. Boi’ siete ma de los sermones fué: «El espíritu ■ cristiano del siglo XtlI personificado en S. Francisco en oposición á los errores modernistas condenados [lor el Sumo Pontífice Fio X, en su encíclica Fas- ceiidi.-^ Con argumentación sólida y con¬ cuartos de hora tuvo pendiente de su boca al inmeuso auditorio que llenaba, completamente la iglesia y al final, en una tiernísinia y conmovedora súplica imploró las gracias y bendiciones celes¬ tiales sobre nuestro celosísimo l’reladf), tundente, con suma claridad y energía sobre el (.fiero, sol)re las (órdenes Reli¬ demostró el orador la falsedad de los giosas, sobre todos los fieles, á lin de <|ue errores y tendencias modernistas y lo todos luchemos cada cual en su puesto, pernicioso de su espíritu y de sus máxi¬ mas; y como remedio de estos males hizo ver la necesidad de volver el espítitu del siglo Xlll, del siglo de S. Fran¬ cisco y Sto. Domingo, del siglo de Ino- i cencio 111 y fie Bonifaeió Mil, de Sail- : to Tomás y San Buenaventura, de San Imis y S. Eernando, de llamón Lull y | Jaime el Conquistado]’, del siglo délas ca- ^ tedrales góticas, en una palabra, procla- | mó necesidad de informarnos en el es- por el triuntú de la Iglesia y el reinado social de Jesucristo, ti’abajando sin des¬ confianza ni desmayo liasta f|ue su espí¬ ritu reine en nosotros y en la sociedad. La función terminó con solemne j)ro- cesión i)or el ámbito de la iglesia. Lle¬ vaba el Santísimó que había sido ex¬ puesto en todos los . días de la novena, el M. 1. Sr. D. Matias Company, ofician¬ do de diácono el M 1. Sr. D. Xadal Garau, Doctoral, de subdiacono D. José liíritu de aquella edad de oro de la ciidlización cristiana en que C'ristO’ reinó en las artes y las ciencias, en las leyes y en las costumbres. En la misa nia.yoi’ del día de S. Eran- Auba y del presbítero asistente D. Juan Alcover. Sostenían las bastas del palio ilustres jefes de nuestro ejército y toma¬ ron parte en la procesión distinguidos miembros de la nobleza mallorquina y cisco, nuestro queridísiuio Prelado cele¬ bró de medio pontifical asistido por los MM. II. Si•es. Canónigos 1).Matías Com¬ gran número de hermanos terciarios con sus respectivos cirios y llevando al frente su [frecioso estandarte, regalo del pany, Cluuitre y D. Juan Ramón, ambos Rmo. Padre (fieueral do la (Jrden Ter¬ hijos de la t). (faiitó la misa el cera Regular. M. L Sr. I). Antonio M.-^ Alcover, \\hca.- Al concluir la solemne procesión se rio General, Itaciendo de diácfnio D. Jo¬ entonó solemne Te-Deum.y después dióse sé Auba, de subdiácono 1). Federico la bendición con el Santísimo á todos los A'alenzuela y de presbítero asistente don asistentes. Sea todo para la mayor glo¬ Juan Alcover. Terminada la misa el se¬ ria de Dios, incremento de la (.). Ter¬ ñor Obispo dió la bendición papal á to¬ dos los asistentes. Durante la novena los terciarios han celebrado dos comuniones generales, una el día de S. Francisco y otra el df)- cera y bien de las almas. Vestícíones y Frofes-iones.—El día 10 de Octubre profesaron un hombre y una mujer y vistieron el santo hábito cinco mujeres. mingo siguiente, ambas muy concurri¬ Acción Social.—Ei día 15 de Octubre das, sobre todo la primera. En esta cele¬ reunido el Venerable Directorio bajo la bró la misa y distribuáó el pjin de los Presidencia del Rdo. P. Ahsitador, exa- 8o Kl Mi-raldo de Cristo minó .y aprobó los Eslalutos Generales de la Institución que se propone estable¬ cer la Hermandad con el nombre de Auxilio Mutuo Popular, para promover la acción social. Por acuerdo unánime El 24 de Octubre fueron bendeci¬ das por el M. Reverendo P. Bartolomé Salvá, debidamente autorizado por el limo. Sr. Obispo, dos campanas para el servicio de la iglesia de nuestro Fouven- se resolvió solicitar, la aprobación de las Autoridades eclesiástica y civil. Felanitx. - Los fervorosos Terciarios to bajo la advocación do los dos santos patronos de la Tercera,Orden, S. Luis y Santa Isabel. Pesa una de ellas 240 ki¬ de dicha ciudad celebraron el sejiundo domingo do Octubre la fiesta do Nues¬ tro P. S. Francisco. La noche del sábado logramos y fué apadrinada por los acau¬ dalados consortes D. Mateo Amorós y Bárbara Esteva; y la otra de 55 ki¬ se cantaron en la iglesia parroquial so¬ logramos, lo fué por los distinguidos lemnes completas, y á la mañana del jóvenes D. Monserrate Esteva y D.'‘ Es¬ domingo se celebró misa de comunión : ter Tous. Predicó en el oficio D. Sebas¬ general á la que asistieron todos los tián Esteva, quien en su elocuente ser¬ Terciarios. En la misa mayor á la que món explicó al numeroso auditorio el asistió numerosa concui-rencia, ])rcdicó importante papel que desempeña la cam¬ el Rdo. P. Arnaldo Rig^y Franciscano, pana en la sagrada liturgia. y por la tarde el mismo impuso el hábi¬ Después del oficio hicieron la profe¬ to do la Tercera Orden á 5 hombres y sión de votos solemnes en mano,3 del 11 mujeres. M. Rdo. P. Provincial los coristas Fray Alegra el ánimo el fervor y espíritu i .Miguel Vidal y Fr. Sebastián Llinás, y Seráfico que, sostenido por su digno | la profesión do votos simples el novicio Director D. Jaime Sureda, Pbro., anima i Fr. Jorge Riutort, y recibieron el hábito á nuestros hermanos de Felanitx, y me- ; do la Torcera Orden Regular los [)03tu- recen por ello la más cumplida enhora¬ lantcs Julián Niell y Damián Fornés. buena. Ojalá en todos los pueblos se A todos, lo mismo que á sus familias rcspii'ase el mismo ambiento do pie lad que sa hallaban presentes al acto, en¬ y humildad franciscana. viamos nuestra más cumplida enhora¬ Art.-v.— Celebróse en nuestro conven¬ buena. to de S. Antonio de Padua la coilmemo- | iTición del 7.'^ centenario de la fundación SixEU.—El domingo, dia 10, se cele¬ ! de la fundación de la Orden de Menor3.s i bró en este pueblo la fiesta que dedica- con un solemne triduo de cuarenta lio- j : ron al Serafin de Asís sus devotos y los numerosos terciarios c[ue hay en aquella ras que tuvieron lugar los días 2, 3 y 4 de Octubre. Estuvo encargado de los sermones el Rdo. D. Antonio Artigues, Ecónomo de Algaida, el cual en sus cinco sermones logró cautivar y entu¬ siasmar el auditorio, haciendo notar en N. S. P. S. Francisco los rasgo i y virtudes que constituyen su ])ersonalidad especial I i Ï ; : : parroquia. El Rdo. D. Jaime Sastre, \\'i- cario de Algaida pronunció en la misa mayor el panegírico del Santo, presentándole como imagen vivísima de Cristo, no solo por los númerosos detalles de su vida, «que son pei’petuamente se- mejantes á la vida del Salvador, sino también por su carácter de reformador y su santidad característica, y que tanto pueden contribuir al remedio de los vi¬ cios y defectos de nuestros tiempos. El pueblo tomó parte en los himnos del Santísimo todos lo.s dias; y en las c impletas del dia 3; y en la Misa De An¬ gelis, Tfisagio y Te Benin del dia 4. Los terciarios asistieron á todos los I ' ; de los pueblos y restaurador de la vida evangélica. Llabló después de la iiifluencia que ha tenido en esta reforma la Tercera Orden, de cuanto ha hecho por la Iglesia y por la Sociedad; y de lo que está llamada á hacer hoy dia para con¬ trarrestar el avance de la revolución que amenaza la vida de las naciones en actos; y formando corporación junto nuestros días. con los socios de la Adoración Nocturna contribuyeron niucbísimo al esplendor La fiesta resultó muy lucida. de la procesión de reserva en la última iiüclie. Tip. Católica de S. l'iicá. —.Slo. Cristo, 2o.--Pai ma K !^ ^ /“) K~ '.- - , ï. < >' ■■ , ''í^ - '■ '.v.s s!s>- -'«. ■%tt. -fl’i'^Y ^ \_ > \_j. IT' -·?,’^· 'oC ^ '■""- •- 4> «4'tusí·ifí t V 'í:’ -i ^ S: 'H, •“ -fcJ ï Kj ^ ^ -> , ^ ^ ^ 'j ■f* ^ *'^"O·r:'-^K 4'< i(.«^í*·'"í^,ií « -E ^j, í- X ^ Tí~ 1 s. jr ^'^^•N ^4^ -Vtï^¿/ '*^- ■^’f:>-·rt~j ^i. ^>r14-^ J^i-.í %-* -y b/'"^'f:;: v^-Xfvy ^x...\_.«..^.4,.^;,>.< r^: ^t;b-.4..,: •'^ J ^ ^^71 t?■ 'ífb'b '%3*.'^ b, *, ' V b' ' ^^ ' '*^'t·^·^ í" b \_jr , ^ ' '* ^^ K >kv “ ^ b "jf—' 'í , /■‘· 3 i i «■ "í f! Jp-b ’· ' 1^.- k''' í ^ y . br*-’^''^lí '‘ ?>'t' ’-'r-^' ': ‘bbi f '4.^-^ ' jt;. :ji..,' v-: ■: .'¿r. <: ~-.-. -■•. b^y \_. -b, t ■tJb 'bb' 'j f , ■,■y^.,3 .-• í -x \\;':;·\\',f'7';.:.-··' ^ ·' 5;*r3S;·^^-3-·"' ’‘;V;.rí '·^íí -; >íb.^ í;^í,,a V^ ■è'>-.'.·. ..*• b,'- "--..■'■-■/‘■' ‘‘v ‘í IT í ^t ■■'b‘bbv«Çbs ^ '“y 4?b. i t;r sa.-^i’Ví-X-:. •:A*'■^. J-'.:- ' ■~b.>4 4 4“ ^ r^-- V- ïï-i ■ *'**'“„'-^3'^, ■^."i· ,.r-- .,3.'v.a;. •^«.‘'· 3->‘'>..'-j3—, a'-i..r.’t-J r. "v -/-.,-3b'-fv\_^4.,*, -■- fb. íf íia-aí^í^Çï^ .-a..'‘»■^/;: a ■ ^ \_ ,-..i ^ ' —'i,- t-3(-V .- -A . -! .•■^ k' - Á J^.'í,. .». 4-*^e. ••-¿.‘^-J·'·^·' t' : T:í'>'?*■·^■: .. . T'-·'·^·sr'·^^’ •': ■ V -- •; s\_¿jr.:' '■ --■L-í f. -. ^ k,.. ■ • •w-"4'5.;¡,-).-.-v,. . .i' 4. .V >-'. -.i' ^ ., ^rr^.-y-•; . ^T.-.- " í ..sA4-^3;:ír5i<Pi;.:w>i-A*£;rA..-'jí3sc;: >-ii.i.j;A*V3i‘:-3't';i.-4i, - ^ ^t 'V^ — ^ ■*■ ,>( * À. '— - -■a.^.a-.j > ‘ S\\ .Vív y-w » r ,lç ■ ■ ■ ■ * - ri·ç^Ja·'*;^ i I~ A ^ í *£jíá¿ "’jk í -Jí 'k I' b ■ >3 ^r;bb j -^4 . n í,^ > < '^* b’^bb"’byí %i b~ ^i>3·’.b:'···','.rs^bic.--'3b^·-^.^ks^: ‘.rb. * bb"-^ ^''^bcr rb "33"-cíb- '- k'-^bo 7-f Aki'4 vv-. * r . 7^ í- -^'' V-v^-’".• -'*,,=j<4,'f^5ví . .r.-- ^ í. .»»-». ; •‘TCsda·»--i ' :íX - v' ""íifbbj y-Ja :--''' j .^""vb-^.. ■ ’ ^í-kí .b/b4?C' 3\_ '■'"C-" ‘■' kb ;7 *3 i\_ak * 'ï^! t<l * k'b'' * bk 'b ’■ ~- k' b - ,' ï' -y-^ y - -^-,. ■ ^.^,3 > -,-3.- r'^ ^ 7,^^^ - 5.,— ., f\_ '"^.3 ^·4.-y , ^ ^ «'' b t. ■ í ï-x/'í^^ • -i ■ " IX-3,33,^^ .3,lbi3bf#kbJbk^|'k-kkibbbbib®l s/'· *^ ’.'b- b·' -b ^■•·*. 4í’'^:àr ykS bi k. kb^b^^-jbf^bb'kTJííb'líiiJ '■\\"í3'^7-3kl'-'·''·7’v*t 7'?-'í?r 'b7bbk"^y ■'•· ^ -■'7a:,'-■*,*' i'bf 7 ^ ■ \_- ¿ ff *•'-“77 rt ^^ ■ .,b /^'\\¿ - 7^ '^ ->sba' ’-'·ïé··aVt-b. kbi-f;;’ ’^¿3b y ''*'"" bkbbvkyb::,bíjbkb|7 -, ^ ts^ " - "-X ^ . ;'í' bk ^ T 7rí» **’ ò" ^ - 7 'asa ^ y b' "fÍ Ví- 7 3-* 4 r ■>í3·"b«fï|· b' .- >- •-V-.-:-.b:/-t. b..7b-:v^-V - 7'--7^:*-r-:2J'': yj' ■:·>^ ’■'■y ^ T•: X bii^ab-i ^^ k-^ bb-b.^wi^Vx-^k ' -^^ ' \_ f75\_:\_\_í^'-^^, 7\_ ;4't-js*b, 3. ^ yb-b- '-k'bb?; \_\_■; ^.7 ••■‘'· *r .'V^ b x k^bf ^'^>Si í*! ‘· . 3 ^ ‘■í 7 ** 4 .* ^ rTí «'í· ''· -rf a>> / '* f '’•' ■>i3.y ,1 4,v ^ I y "i ^ t <..Q.™ £4í.,\\ a* » -^r.^ '*.'.'->:fí| \_ TsV Cb ■' kcb--^yç- iakcí-f <-b \_" -r^r’ j-7b^ b*b^ ryí ^íbr^y "b’ítybí·àf·- 3.-^' b,-;A.,a\_v 4 b'·*'^ X^á->\_ *’• 7'b' ’ Vj b** 3 "'■7 t -ía «<'■'".3. b^' ^ b .■' ' V-.;'í.• ■•■; ' 'k X V«s .’*'*t ■■ •■'f •>" <* 7.-- ík. L -S ^M\\y^ ^t>$:r.im^ y-bi .'· <• k5;N33-....■', - va* ■ . a V--—- a, ...,, V K'.-S * kfbf akybi y yj·-.·kSV·bk- 7'^ fa--^.- V \_/" \_••' =• '. „...'■■ -.4. b'--'7- .3Í> a-..r--'*j' f’k:- 3, \_\_ ■i J ïr*, ■ --^ • 'Ï=-V'ts. '; ;^' « 7'tíiTibb"^ V' 'V-7s- >'■ .N·:.-'.;.-:*'.: 3- -V-'-^ . K ■>'■> , , -í. í- 3 -*- b^v'f 7í t*bb'' / ""7 "b ■■ t ■- 7 ^ "t^' "'~ \\b k' bbir:'"í: 7 ,.b bb ' "i - Vj- „1 b., bb ^ -' "3, --y -A J tí "ib- -, b '.■7 X T-r" *■ .3 '' 7^1 '" ''íbb- -kv ^ >a y 7- í b'ii.v*-- 7¿í;.:ir.i¿j;'4-3 , ,,\_. ^ 73ííSa§|V# 7- b-b^ ?- .. .■■Ib . ■. ít..,^ , X- ^3aC<- a. ,af ^ ^ ’*'4'!,^ ÍVO.W V ' Indulgencias concedidas á los Terciarios Siempre que rezaren cinco veces el Patei\\ Ave y Gloria por la prosperidad de la fe, y otro á intención del Sumo Pontífice, en cualquier lugar y tiempo, pueden ganar los Terciarios las muchí¬ simas indulgencias, así plenarias como parciales, concedidas á los que visiten las Estaciones de Roma, los Santos Lugares de Jerusalén, Porciúncula y Santiago de Compostela. (Según S. Alfonso M.^dc Ligorio estas indulgencias ascienden á quinientas treinta y tres plenarias; las parciales son innumerables.) Cada vez que rezaren la Corona Franciscana de los siete Go¬ zos de la Santísima Virgen María, pueden ganar indulgencia ple¬ naria, aunque recen las decenas separadas, con tal que sea en un mismo día. Por cada obra de caridad ó de piedad que practicaren ganan 300 días de indulgencia. ^ Durante el presente mes pueden ganar indulgencia plenaria, confesando y comulgando y visitando las correspondientes iglesias franciscanas, ó bien la iglesia en que está establecida la Herman¬ dad, ó la -Parroquial en su defecto, los días siguientes: Día 12, S. Diego de Alcalá. Día 16, Sta. Inés de Asís. Día 19, Sta. Isabel de Hungría, Patrona de la Tercera Orden. Día 26, S. Leonardo de Puerto Mauricio, Día 27, Bta. Delfina. Día 28, S. Jaime de Pisa. Día 29, Fiesta de todos los Santos de las Tres Ordenes Serᬠficas. El día 19, Fiesta de Santa Isabel de Hungría, pueden recibir la Absolución general. CÉDULAS DE PROFESIÓN Y CARTAS DE NOVICIO Para mayor comodidad y economía de nuestras Hermandades hemos hecho imprimir en Mallorca dichos documentos que deben entregarse á los que visten el Hábito y profesan la Regla de la V, O. Tercera. Los Directores ó encargados de las Hermandades podrán en¬ contrarlas en la Administración de esta Revista á precios suma¬ mente módicos equivalentes á los gastos de papel é imprenta. Su precig es: Cartas de Novicio . . , . . . .1 pta. el 100 Cédulas de Profesión . . . . . , 3 ptas. el 100