AÑO XXII.-2.* EPOCA.-NUM. 1053
AÑO XXII.-2.* EPOCA.-NUM. 1053

SÁBADO 8 DE JUNIO DE ¡SO?

SEMANARIO INDEPENDIENTE

FUNDADOR Y DIRECTOR-PROPIETARIO; D. Juan Marqués Arbona. REDACTOR-JEFE; 0. Damián Mayol Alcover. REDACCIÓN y ADMINISTRACIÓN; calle de San Bartolomé n.° I7.-SÓLLER (Baleases)

Sección Literaria
JUAN ÁNGEL
Llegó al antiguo exconvento de la Merced, convertido hacía tiempo en cuartel donde á la sazón se alojaba el regimiento de Infantería de Gerona, y al primer soldado que al paso halló pre¬ guntóle por el coronel del regimiento.
La casualidad hizo que la respuesta del interpelado fuese de todo punto in¬ necesaria é inútil, puesto que el coronel D. Sergio del Roble, asomado en aquel
momento á la ventana del cuarto de
banderas, había visto al paisano entrar en el patio del cuartel, y reconociendo en él á su antiguo y fiel asistente, le gritó desde arriba:
—¡Juan Angel!
Este levantó la cabeza, electrizado por
el eco de aquella voz desabrida y ronca como un trueno, qus despertaba en su alma los recuerdos más queridos y her¬ mosos de su vida, quitóse el basto som¬ brero de anchas alas con que cubría el revuelto greñal de su cabeza encanecida, j cuadrándose como en sus buenos tiem¬ pos de servicio:
—A la orden de usía, mi coronel, dijo. ¿Podría hablarle unos instantes?...
—Por supuesto, hombre: sube, sube... Subió al despacho del coronel, y un instintivo sentimiento de respeto le hi■zo detenerse ¿ la puerta aguardando que Ja voz autoritaria de D. Sergio le man¬ cara pasar adelante. El potente rayo de sol que, como ju¬ gueteando y haciendo brillar en el aire multitud de átomos luminosos é inquie¬ tos. penetraba por la abierta ventana, envolvió por completo la persona de Juan Angel, cuya recia musculatura y atléticas preporciones resaltaban con vi' gorosas líneas, y se ciñó como fulgente diadema de oro á su frente plegada por centenar de arrugas, haciendo parecer majestuosa y simpática su figura bajo aquella rara indumentaria que á la le¬ gua denunciaba al legítimo charro sala¬ manquino; indumentaria compuesta de calzón corto ajustado á la pierna, media oscura y chaqueta de paño burdo, bajo la que asomaba el chaleco, luciendo una doble hilera de botones da cadenilla pla¬ teados, semejantes á moneditas de dos
reales.
—Entra. Juan Angel, gritó el coronel
desde dentro, suavizando la voz cuanto
pudo para hacerla parecer menos áspera y más cariñosa.
Obedeció el paisano y lentamente, con los brazos pegados á lo largo del cuerpo, conforme á la fórmula ordenancista, y el sombrero siempre en la mano, penetró en aquel despacho sencillo y severo á la p3r, con la misma religiosa veneración que si entrara en un santuario. Su mi¬ rada detúvose con fijeza en la noble y cabrileresga figura del coronel, que con su larguísima perilla blanca y la infini¬ dad de placas y cruces que colgaban del pecho de su levita semejaba legendario •guerrero de épocas heróicas.
—Me habían dicho que estaba usía en la reserva, y temía no hallarle, dijo al «ntrar Juan Angel sonriéndose bonacho-
tiamente con sonrisa melancólica.
—Lo estuve. Juan Angel, lo estuve; pero al comenzar la guerra, pedí volver al activo, y mira si ha sido suerte la mía en ser destinado á mi antiguo regimien¬ to...Y á ti ¿qué te trae por aquí?
—El deseo de ver á usía, no más...
Acabo de llegar del pueblo y he venido enseguida al cuartel.
—Bien Juan Angel; como buen vete¬ rano no olvidas que el cuartel es nues¬ tra segunda madre, y le consagras tu primera visita... Pero dime, ¿qué tal te ha ido desde que dejaste la milicia?
—Sin novedad, mi coronel, á Dios
gracias. —Te encuentro algo viejo...
—¡Que ouié usía!... Las penas enveje¬ cen mucho más pronto que los años.
-'¿Tantas has tenido?... Cuéntame, hombre, cuéntame tu vida, que ya sabes que todo lo tuyo me interesa...
a Juan Angel acontecía lo que ordi¬ nariamente acontece á las personas feli¬

ces cuya existencia es un himno cantado El coronel estupefacto, maravillado de

más con obras que con palabras á la virtud modesta y al trabajo honrado. ¡Juan Angel no tenía historia que con¬ tar!... su vida, á partir del día en que licenciado regresó al pueblo para cum¬

tanta sublimidad en medio de sencillez
tan grande, callaba mirando alterna¬ tivamente tan pronto al rostro de Juan Angel, que sólo expresaba una tranqui¬ la tristeza, como aquel montón de bille¬

plir la palabra empeñada á la que había de ser su mujer, sólo había sido un idi¬ lio de amores puros y sencillos, rudos

tes, que representaban las economías y el trabajo de toda la vida de aquel hom¬
bre.

en la forma, de terneza infinita en el

—¿Y ahora? preguntó al cabo de un

fondo; idilio que en labios de aquel hom¬ rato el coronel sin encontrar una frase

bre tosco, de aquella especie de gigante con corazón de niño, tenía las lejanas resonancias del torrente que se despeña

apropiada para expresor bu asombro. —¿Ahora?... interrumpió Juan Angel
con voz firme y acento precipitado, co¬

por los picachos en la sierra, y los acres mo si la misma exaltación nerviosa (jue y fortificantes aroma* de retamas y to¬ interiormente le agitaba le prestase una

millos, y la salvaje grandeza y melanco¬ lía del grito del mastín en la montaña. Había amado... había trabajado... ¿qué más se necesita para hacer diehosa una
existencia?...
Con la ruda franqueza de una alma
noble, con la hermosa sinceridad con
que se habla al amigo, al compañero, con quien por largos años se ha vivido

locuacidad y viveza que nunca en él hu¬ bieran podido sospecharse. Ahora.,, ¡al ‘pueblo otra vez!... ¡á llorar hasta que ya no quede más agua en mis ojos... á rezar por aquel hijo que era mi orgullo y mi alegría... á seguir trabajando hasta que Dios sea servido de llevarme ¿ des¬ cansar por enjamás de los jamases!
— Pero ese dinero... insinuó el co¬

corriendo idénticos peligros y análogos ronel.

azares, Juan Angel siguió refiriendo al coronel su vida en los siguientes tér¬
minos:
—Usía se acordará de fijo del dia en que con mi licencia ya en el bolsillo en¬ tré á despedirme de osté en un despacho casi igual á éste. Seis años llevaba en el servicio, y más de cuatro de asistente con osté. En este tiempo había cogido cariño á la milicia—¿no había de coger¬ le si ella rne hizo hombre?—y sobre to¬ do á usía, que fué para mí uu verdadero padre... Por eso, no era poca la pena que rne daba el marcharme; pero ¿qué iba á hacer?... Del pueblo me llovían lascarías

—No lo necesito, D. Sergio... Con los cuatro terruños que entoavía me que¬ dan, me basta y me sobra pa mí solo... A más, con ese dinero guardado en el fondo del arca, no podría vivir ni estar tranquilo, porque puede que acabara por hacerme creer que era verdad lo que las gentes murmuran de mí. y eso... y eso.
mi coronel, rae mataría, me haría des¬
graciaos siempre... Quédese osté con el dinero, y... adiós.
El cuerpo del corone! sufrió como una
tremenda sacudida eléctrica, y se puso
en pié: sus ojos, que momentos antes re¬
lucían como dos ascuas encendidas, nu¬

llamándome cada día, y, por otro lado,
mi novia me amenazaba con enfadarse
pa siempre si no volvía pronto... en fin, que me resolví á marchar allá...
—¿Y te acuerdas de lo que entonces te

bláronse repentinamente; parpadeó con fuerza repetidas veces, y sus pupilas se humedecieron, apagándose el fuego que en ellas ardía... dió algunos pasos ade¬ lante, temblándole la blanquísima peri¬

dije?

lla, y echando los brazos al cuello de

—Usía rae cogió con mucho cariño la Juan Angel.

mano, la apretó con la suya, y me dijo: Anda, Juan Angel, cásate, que ya tienes edad, y si Dios te da hijos, críalos pa la patria y enséñales á tener ley á la ban¬ dera del regimiento...
—Eso te dije... veo que tienes buena memoria... Y qué ¿cumpliste mi consejo?
—¿Que si lo cumplí?... ¿Cree osté que me atrevería á presentarme hoy delante de mi coronel si no lo hubiera cumpli¬ do?... Las palabras de usía fueron dere¬ chas al corazón, y aquí quedaron muy

—Juan Angel, le dijo, eres de la raza de los verdaderos españoles. Muchas amarguras ha tenido para mí la vida, pero de todas rae compensan con exceso el placer de estos momentos... Vete con Dios, y por si de algún consuelo pueden serte mis palabras, sabe que tu coronel te bendice, te admira y... te envidia.
Y mientras que Juan Angel salía del despacho, alta la frente, satisfecho y tranquilo, el viejo coronel sacó del bol¬ sillo de la levita el pañuelo, y llevándo¬

adentro, muy adentro, resonándome continuamente en el alma. Un hijo solo me dió Dios, y ese hijojva la patria ha sido, pues ha muerto en Cuba como leal

selo á los ojos, ocultó en él aquel enter¬ necimiento, aquella debilidad, la prime¬ ra, la única que en su larga vida de
soldado había tenido.

y como honrao defendiendo el honor de

su bandera, como buen soldado y buen

Norberto Torcal.

hijo de España. Pude haberlo comprado y hacer que
no fuera 4 Cuba, que dinero bastante tenía yo en el arca, pero ni yo quise

LES ARTENENQUES

comprarlo ni el chico lo hubiera consen¬ tido nunca. Las gentes dieron en decir

An En Joan Alcover.

por todo el pueblo que si no había com¬ prado á mi Agustín era por codicia, por¬ que tenía el corazón pegao á los dineros, y porque era mal padre, y no sé cuántas cosas más por el estilo... Mentira, mi co¬
ronel. mentira...
Pa que vea usía que no fué avaricia, aquí traigo los «eis mil reales del soldao, pa que osté se los dé A esos señores de Madrid, que, según rne han dicho, an¬ dan ahora recogiendo dinero por todas partes para los pobres soldaditos que en¬
fermos ó lisiados vuelven de la guerra.
Y así diciendo, Juan Angel se metió

Donzelles artenenques, sembla qu’ us veig encara diumenge d‘ horabaixa, disperses pels camins de tres en tres, alegres, girantvos desiara, donant a les quintanes un ayre de jardíns. Us agaféu pels braqos ab lleu cadencia clara, els vostros cossos tallen el cel—esbelts y fins!
Una frescal serena vostres cabella amara,
ompliu els ayres pálits de riures argentina. Els grans aubons us vinclen llur joventut rosada, y us besa ab infinita recan<;a perllongada la seuyorial bollesa del día que s‘ en va. Yoldrla qu' ab les vostres garlandes me lliguessiu oh hereves de les Gracies, y a mes estrofes dessiu aquesta gentilesa del vostre camina!
J. Carnee.

la mano en un bolsillo reservado en el

interior del chaleco, sacó una mugrienta

cartera de cuero de descomunales pro¬
porciones atada con una cinta negra, y sin afectación ni vanidad alguna, como

Días históricos

quien hace la cosa rnáa natural y co¬ rriente del mundo, fué dejando caer uno

En el Congreso

por uno sobre la mesa del despacho del coronel una porción de billetes del Ban¬ co de diferentes tamaños y coloies... ¡Mil quinientas pesetas en junto!...
—Los tenía guardaos, añadió, para cuando mi Agustín volviera de la guerra y se casara; muerto él, sirvan al menos

Camino del Congreso, bajando por la carrera de San Jerónimo, piensa el pro¬ vinciano en los orígenes del sistema
constitucional. Consulta sus recuerdos
universitarios, su erudición más ó menos selecta, sus viejas lecturas de Toreno y Martínez Marina. Dedica, in perfore, una memoria fugaz á las cortes de Castilla,

para socorrer á los soldados y enjugar otra memoria á las cortes de Aragón. Si-

algunas lágrimas...

I gue, poco más ó menos, el orden de los

programas de la asignatura de Derecho político y administrativo en todas las cá¬
tedras del reino. Acaso ha entendido al¬
go de Jovellanos y de los patriotas que, con él, querían aprovecharse de los ves¬ tigios históricos de la antigua constitu¬ ción española, más bien que entregarse al jacobinismo importado. Acaso conoce la historia de las ideas políticas desde las Cortes de Cádiz, con algo de sus prece¬ dentes en el regalismo jansenista del si¬ glo XVIII. Sean las que fueren sus opi¬
niones acerca de este punto, reconoce
que en 1810 hubo entusiasmo, ardor, bue¬ na fe, un verdadero empacho de buena fe, derroche de ingenuidad candorosa...
Entonces, preparándose á penetrar en el santuario de las leyes, consagra un piadoso tributo mental á las Extraordina¬ rias de la isla de*León; á los repúblicos incipientes; á los oradores inexpertos conducidos por Arguelles, conocedor del sistema británico; á los gaceteros y plu¬ mistas de El Conciso, La Abeja y El Pro¬ curador General; á los galeríos ó mani¬ festantes de la tribuna pública, irrecon¬
ciliables con el bueno de don Blas de Os-
tolaza y otros «serviles» por el estilo. Le parece revivir aquellos días, participar de aquellos entusiasmos y sentir en su sangre los ardores de aquella calentura. Está seguro de la sinceridad y la abne¬ gación de los representantes, así del uno como del otro bando. Sabe que la cosa iba «de veras» para todos y que, como testimonio de la lealtad de sus palabras,
no solían ofrecer holocausto menor que
el de su hacienda, su libertad y su vida. No ignora que aquel período se distin¬ guió por la nota común de la sinceridad.
Entonces no habían nacido todavía las
convenciones parlamentarias.
Todo tenía una significación directa, natura], no deformada por corruptelas ó
valores entendidos. Las cortes no repre¬
sentaban una comedia, no interpretaban una partitura ensayada en la sombra, con arreglo á un reparto de papeles con¬
venido de antemano. El mismo local era
improvisado é incómodo; las mayorías ó minorías resultaban, a posteriori, en ca¬ da debate, siempre en forma incierta é imprevista según la convicción inmedia¬ ta determinada por los argumentos. Lo que ahora parece de esencia en el régi¬ men constitucional: los partidos, fué con¬ siderado durante largo tiempo como el azote más grande que pudiera sufrir el país y se intentó por todos los medios so¬ focar é impedir la excisión del criterio público en parcialidades cerradas, con¬
fiando la suerte total de la reforma espa¬
ñola á la simple virtualidad de las discu¬ siones y al estado de convencimiento pro¬ ducido por ellas en cada caso.
Al penetrar ahora en el consabido templo que, como saben todos los españo¬ les, es un inmueble situado al final de la carrera de San Jerónimo, con dos leones de bronce, una escalinata y unas colum¬ nas según los cánones de Vitrubio; al dis¬ currir por los pasillos, el buffet, la esta¬ feta, los escritorios y el salón de confe¬ rencias; al sentarse un rato en el diván, leer los nombres, mirar los bustos y re¬ tratos que allí campean, y cazar al vuelo las frases que allí se dicen; al contrastar la fiebre de Jos doceañistas y la trágica pasión de aquellos debates y de aquellos grandes días, con las simulaciones y ama¬ ños de ahora, de los cuales casi todo el
mundo está en el secreto.... entonces el
observador experimenta una sensación análoga á la de pasar bruscamente desde una fragua á una cámara frigorífica.
Penetra, poco á poco, en el conoci¬ miento de aquella muchedumbre, sobre cuyas cabezas domina el sombrero de copa, ese simpático armatoste parlamen¬ tario. Se entera, con la natural curiosi¬ dad isídrica, de quienes son aquellos per¬ sonajes en general tan compuestos, de barbas tan bien recortadas y dóciles, de levitas tan primorosas, de chalecos tan serios ó tan llamativos. Unos son diputa¬ dos; otros senadores; otros periodistas. Otros son ex-diputados, ex-senadores, ex¬ periodistas; algunos nunca fueron más que simples aficionados. Pasa ahora un primate, un prohombre, un orador de ta¬ lla, y se convence el buen isidro de la radical inutilidad de la fotografía para conocer á las personas, que siempre sa len más guapas ó más feas. Se fija espe¬ cialmente en los diputados anónimos, que no hablan nunca, que no forman parte de ninguna comisión, que jamás dicen cosa que valga la pena ni que deje de valer, que nunca son otra cosa que diputados ni nunca pasarán más allá, pero que, en cuanto á ser diputados, lo son siempre; y

entonces se pregunta: ¿por qué será re¬ presentante en Cortes este buen señor?
Tal pregunta debe repetírsela • diez, veinte, cincuenta veces. Y entonces se abre ancho campo á su reflexión y re¬ cuerda los casos de esta variedad políti¬ ca, que ha ido conociendo en su propia provincia, en su propio distrito: el dipu¬ tado de afición, por sport, que necesita ser diputado, como otros han de ser han* dicapers ó jueces de llegada en los veló¬ dromos. Hombres, en suma, que no en¬ carnan ninguna opinión efectiva; que no
responden al menor jrrupo de intereses;
que no pueden sentir el acicate de su am¬ bición personal puesto que no tienen ni preparación ideológica ni don de palabra, ni aptitud manifiesta; que no son siquiera traficantes ó agentes de negocios de aque¬ llos que necesitan su acta como un sal¬ voconducto universal y que forman, sin embargo, el lastre y obra muerta del sis¬
tema.
Estos veteranos, estos inveterados; mejor dicho, estos crónicos del Parlamen¬ to, son los que segregan sin descanso una
viscosidad corrosiva contra todo lo nue¬
vo y los que mantienen el fuego sagrado
de los convencionalismos opresores y ru-
tinai ios. En los comienzos de toda legis¬ latura se les conoce por cierto desdén iró. nico, por cierta burla é inspección, mo¬ lesta y presuntuosa, del recién llegado, aunque venga asistido de facultades no¬ tables y de un sufragio veraz, legítimo é inconfundible, Parece que le piden sus tí¬ tulos, como si no fueran ellos los intrusos en la casa y los usurpadores de la volun. tad nacional; y, entonces, se aprestan á la tarea insoportable de reventar nova¬ tos, como en caló parlamentario se dice. Gracias á ese lastre ha sido posible á un miifistro hundir para siempre en el Con¬ greso á un diputado de baja estatura, que le dirigía cargos más ó menos agrada¬ bles, sólo con decir: «¡Levántese su se¬
ñoría!»
Esto pinta el espíritu, el viejo espíritu de unas Cámaras en las cuales, durante largos períodos, lo de menos ha sido te¬ ner ideas, representar intereses, corres¬ ponder á la voluntad y sentido de sus electores y hacer uso de su mandato y de una investidura que la ley declara invio¬ lable aun para la justicia; porque lo prin¬ cipal es ser persona grata, que no disue¬ ne, que no rompa ningún prejuicio ni nin¬ guna rutina, que se someta á toda la red de ficciones y caprichos de los profesio¬ nales. Por este procedimiento vienen á ser árbitro de los destinos del país, el «golpe», la buena sombra, la chispa: todo lo demás es lata, y «congrios» ó «merlu¬ zas» los que no alcanzan á distraer á los
asiduos con oratoria altisonante ó con
amenidades y audacias de tertulia.
Esta subversión ó aberración del sen¬
tido parlamentario ha hecho que en mo¬ mentos gravísimos para la patria una cuestión de prosodia ó de sintaxis, una pronunciación defectuosa del castellano, un resabio provincial, haya sublevado á la Cámara en peso, más, mucho más que las ineptitudes, las traiciones y los latro¬ cinios de que se trataba... Así va pensan¬
do el observador novel. Los grupos se
animan; suenan los timbres, llamando á la votación; pasan nuevos personajes, nuevos curiosos, nuevos profesionales. En poco tiempo ha visto cruzar á siete ú ocho ex-gobernadores de su provincia y recuerda sus hazañas y albedríos, las eta¬ pas de su mando, las elecciones que pre¬ sidieron, los pucherazos inéditos- ó reedi¬ tados que prosperaron á su sombra... Diez ó quince años de política local pasan, co¬ mo una ráfaga, por la memoria del pro¬
vinciano. Y vuelve á sus reflexiones y
piensa si ha llegado el caso, por decoro nacional, de soplar definitivamente sobre el espíritu viejo con el espíritu nuevo y
acometer una cruzada conti a esas peque¬
ñas tiranías que suelen ser las más inso¬ portables. Hay que ventilar el Parlamen¬ to y abrirlo á todas las auras, para que los ministros no puedan decir á los dipu¬ tados de baja estatura: ¡Levántese su se¬ ñoría! y para que los insignificantes no puedan dedicarse á la incivil batida del novato, sin que el párlamento, el país y hasta las piedras de la calle se subleven contra este atropello.
Miguel S. Olíver.
Madrid 23 de mayo de 1907.
(De La Vanguardia.)

«fe»*

SOLLER

«España no es lo que vosotros queréis

Había el Sr. Maura Insiste en las afirmaciones que ha Dicho sujeto so suicidó «disparándose

consignar en vuestras constituciones de

hecho.

un tiro de revólwer en la sien derecha

en el Senado
En la sesión del Senado del día 1.® del
^títüal habló la Solidaridad, por primera ■■"vez, en el parlamento, por boca del se¬
ñor Abad ah

papel. «Vosotros habéis gastado todas vues¬
tras energías en forjar un país artifi¬
cioso.
«Al lado de la constitución artificiosa
en que consignabais deberes y derechos, habéis creado otra inconfesable, que es

El Sr. MAURA usa de la palabra. Comienza diciendo que se felicita de la presencia de los representantes de la Solidaridad, de los cuales espera mucho
en pro de los intereses de Cataluña y de toda España.
Rechaza el dictado de crueldad de que

Entiende que se debía haber entonado
un himno al movimiento catalán, en
vez de calificarle de apasionado. Repite que á la realización de las as¬
piraciones de Cataluña les ha traído aquel pueblo; pero pidiendo la colaboración
del Parlamento.

en el mismo cuarto que habitaba del se¬ gundo piso de la casa número 20 de la calle de Artá, de la citada villa.
Se cree que le indujo á cometer el he¬
cho las contrariedades en las cuestiones
amorosas que sostenía con una jóven de

JELibíu deseos de conocer las declara¬ la de la oligarquía y el caciquismo.

ha hablado el Sr. A\_badál.

Afirma que á raiz del desastre de la la ciudad de Valencia.

ciones “que---haría, y por eso la sesión faé

«Habéis laborado para crear una Es¬

Todos los problemas juzga que son guerra surgió la Unión Nacional, que por

Se personó en el lugar de la ocurren¬

realmente interesante. Hé aquí un ex- paña ficticia, y cuando la España real se pavorosos: pero él los acometerá sin que ser una negación no logró nada en la cia la autoridad judicial respectiva, la

frtete de ella:

ha percatado de esa ficción que habéis nada le arredre, porque entiende que ese obra de regeneración que se proponía. que ordenó el levantamiento del cadáver,

Habla el Sr. Abadal

creado, ha huido de vosotros. «Por eso es necesaria una rectificación

es su deber. (Muy bien en la mayoría.)
Tacha de fantástica la afirmación que

«Nosotros no rechazamos las reformas siendo trasladado al cementerio. económicas; al contrario, venimos á co¬

El ¡Sr. ABADAL comienza pidiendo benevolencia aUSenado por ser el encar¬ dado por ía -minoría de Solidaridad cata¬ lana,de abordar el llamado problema de
lu Solidaridad.

absoluta, para buscar el alma verdadera de España, donde se baila escondida, para reivindicarla.
«Hay que desintegrar la soberanía tal como hoy se ejerce por el Poder público.

ha hecho el Sr. Abadal de que fueran ellos, los solidarios, los únicos represen¬ tantes del pueblo y del país que los ha elegido.
Todos los que han sido elegidos son

laborar en ellas.»
Explica que desconfía del partido con¬ servador porque sólo ha tenido palabras para Cataluña; pero obras, no.
Añude que ha visto que el partido

El sábado se recibió en el Gobierno
civil un telegrama del señor Ministro participando que en la subasta verificada en la Dirección general de Obras públiblicas, para contratar las obras de re¬

«Si mensaje de contestación tiene las mismas vaguedades que todos los men¬ sajes.
«Nosotros representamos ese espíritu ■de renovación que se ha llamado pavo¬

«Es preciso reconocer que son deseme¬ jantes entre sí las diferentes regiones de España para que progresen y desaparez¬
ca ese estado artificial en que se preten¬
de que continúen encerrados todos.
«Por eso nosotros reivindicamos la au¬

representantes del país. Añade que todos, y no sólo ellos, se
sacrifican por buscar la felicidad de Es¬ paña y todos sus intereses particulares por colmar las aspiraciones del pueblo.
Dice que es injustificado no reconocer

conservador ha hecho mucho por alejar mas todavía al pueblo del Gobierno con
las elecciones.
Rectifica el Sr. MAURA y califica de errónea la interpretación que ha dado el Sr. ABADAL á la omisión de elogios

forma en el Lazareto de Mahón, se ha¬ bían presentado dos postores, siendo la proposición más baja presentada de 22 499 99 pesetas.
En consecuencia el mejor postor es

roso problema, y venimos contra voso¬ tros los que ocupáis el poder y que po; liéis esas vaguedades que nada dicen.
«Nosotros- aspiramos ¿ implantar esta •* renovación #ue ha de ser la felicidad de

tonomía de las regiones y de los muni¬ cipios, para que todos puedan desarro¬ llar todas sus energías y ejercitar todas sus funciones, que han sido secuestradas por el Estado político.

el esfuerzo del actual Gobierno, para de¬ purar el sufragio y para dar á los pwebloslos progresos de mejora que juzga, necesarios, y añade que bien pronto co¬ nocerán el texto y el fondo de esos pro¬

que este senador quería que hubiera ha¬
bido en el discurso de la Corona.
Afirma que si dijo que la vida de la Solidaridad será corta, es porque el
Gobierno calmará los anhelo* manifes¬

D. Juan Garau Sastre, á quien será adju¬
dicada definitivamente dicha subasta.
Una compañía catalana de pesquería establecida eu Barcelona, ha adquirido

la patria. ■ o>Nojqueréis entendernos porque nos-otros traemos aspiraciones nuevas en pugna con vuestro rutinario proceder.
«Nosotros representamos un pueblo y no un partido como el vuestro y los que ■medís con vuestro pequeño rasero.
>>Es tan amplia nuestra significación <pue en ella caben desde republicanos
basta carlistas.
«Hemos sacrificado todas nuestras
* ideas emarag de la renovación total de
la política que hasta ahora ha regido á España.
«El pueblo nos ha seguido, nos ha en¬ tendido y por eso, siu fijarse en la diver¬ sidad do opiniones, se ha fundido en la

«Esto es lo que queremos, lo que sig¬ nificamos y lo que vamos á recabar.»
«¡Está poco claro!» interrumpe el se¬ ñor ARAMBURO. (Rumores.)
El Sr. ABADAL repite; Cuando digo que nosotros reivindicamos la desinte¬ gración de la soberanía como la ejerce hoy el Poder público y pido la autono¬
mía de esos núcleos sociales, creo que
no puedo hablar con más claridad.
El Sr. ARAMBURO: O está demasiado
claro, ó está demasiado obscuro.
El Sr. AB.ADAL insiste en afirmar que
lo que pide la Solidaridad es que se le dé á Cataluña todas las funciones y li¬ bertades necesarias para su perfecto de¬
sarrollo.

yectos en que han de entender las Cor¬
tes.
Y emplaza para entonces al Sr. Aba¬ dal para que reforme su juicio y para que presente cuantas enmiendas juzgue
necesarias.

tados por los representantes de la Soli¬ daridad para bien de Cataluña y de Es¬ paña toda. (Muchos aplausos.)
• Senadores y diputados se acercan á
felicitar al Sr. Maura.

Rechaza lo* anatemas que el Sr. Aba¬ dal ha descargado sobre los partidos po¬ líticos en su comparación con la Solida¬
ridad.

De la Península
En breve empezará en la isla Corte¬

El Sr. Abadal ha cometido un error al
suponer que todos los partidos están vicia¬ dos y que no son capaces de hacer nada. Así ha podido comparar con ventaja pa¬
ra la Solidaridad, añade el Sr. Maura.
Apóstrofa al senador solidario negán¬ dole el derecho de despojar á los parti¬

jada el palacio que ha de servir de resi¬ dencia veraniega de los Reyes.
Será de estilo mudéjar y de aspecto
suntuoso.
Para unir la isla con la costa, se cons¬
truirá un puente de un kilómetro de ex¬
tensión.

el yacht á vapor francés «Ste. Marthe» para dedicarlo á la pesca, en especial á la de crustáceos por las cosías de Italia y Baleares.
El lunes se reuuió eu Palma el partido republicano mallorquín para aprobar ó desaprobar la orientación dada por e señor Salmerón á los republicanos de Cataluña y apoyar á los elementos que
forman la Solidaridad Catalana.
Asistieron representantes de todos los pueblos de la isla.
Se aprobó casi por unanimidad la con¬ ducta del señor Salmerón y se nombró á los señores Fusot y Alemany para que

única sola aspiración grande que nos mueve-y nos ha traido á esta Cámara.
«Somos distintos á vosotros, porque
ceñíamos la fisonomía del pueblo. «Somos distintos, porque en vez de
querer, como vosotros, infundir vuestra .fisonomía y vuestros sentimientos al

El Sr. ARAMBURO: Ahora está dema¬
siado claro.
El Sr. ABADAL afirma que no se pue¬
de creer peligrosa la desintegración de soberanía que pide, y que pide también con ellos el pueblo.
«Nosotros desconfiamos en absoluto

dos políticos de toda cualidad buena. Añade que las conjunciones de fuerzas
híbridas, sólo servirán para las protesta*, para las negaciones; pero nunca para
buscar soluciones concretas beneficiosas
para el país (Grandes aplausos).
«Cataluña tendrá las reformas que ne¬

La primera piedra la colocarán los Reyes.
El diputado á Cortes señor Cambó, que juntamente con el señor Salmerón fué objeto de un atentado en Barcelona, á raiz de las elecciones, saliendo del

representen al partido republicano en la próxima Asamblea, adhiriéndose por com¬ pleto á la Solidaridad Catalana.
Hicieron constar su voto en contra
tres de los asistentes los señores Llopis, Pomar y Agustí.

pueblo, nosotros procedemos á la in¬
ve v-su.
«Estamos orgullosos de nuestro triun¬ fo, porque él ha purificado el sufragio en Cataluña, y esto puede ser el princi¬ pio de la renovación á que tendemos. Y esto queda d*esde luego como ejemplo.
(Entra-el Sr. Maura.) Sigue diciendo el orador que no ha habido gobierno después de un siglo de lucha y á pesar de las muchas leyes dic¬ tadas que haya conseguido traducir en el sufragio la, libre emisión del voto, hasta que el pueblo catalán ha dado es¬ te trascendental ejemplo, cuyos resulta¬ dos serán fecundísimos y serán seguidos

de que el partido conservador pueda lle¬ var á cabo la renovación á que aspira el país, porque de sus palabras juzgamos que el Sr. Maura desconoce el problema, no comprende la Solidaridad, ni el re¬ gionalismo ai la necesidad de esa reno¬
vación.
«No ha sabido comprender que la So¬
lidaridad ha existido en Cataluña en
1904 y antes de esa época.» Justifica su afirmación, recordando
que cuando en cíicho año fué á Cataluña S. M. el R>\\y con el actual presidente del Consejo, dijo éste que había vencido al regionalismo.
«Y aún no había salido de Cataluña el

cesita, pero por nosotros y con noso¬
tros.»
Dice que de no padecer la ceguera pa¬ decida en la polvareda de la lucha no habría afirmado el Sr. Abadal que hay que desintegrar la soberanía.
«Hay que hacer todo lo contrario, ex¬ clama, hay que fortificar el espíritu y el poder nacional. (Muchos aplausos).
No son vaguedades los propósitos del
Gobierno, anunciados en el discurso de
la Corona».
Agrega que sería indigno de ocupar su puesto si desconociera la Solidaridad.
«A veces, prosigue, ve mejor el que mira de lejos que el que está dentro del

mismo gravemente herido, paseó el miér¬ coles en automóvil con el concejal señor Durán y Ventosa, siendo probable que
uno de estos días se traslade á su do¬ micilio.
La Junta encargada de la reparación del palacio de la Alhatnbra, (Granada), ha acordado ejecutar cou toda urgencia las obras necesarias para la perfecta conservación de aquel monumento de ar¬ quitectura árabe.
La importación de vinos españoles á Francia durante él periodo del 1.® de

Leemos en El Bien Público, de Mahóti: «Muy pronto se dará comienzo á la* obras de los trozos 1." y 2.° de la carre¬ tera de Mahón á Fornells, pues lo qu« lo entorpecía era el expediente de expro¬ piación que hoy toca á su término.»
Colaboración
CARTA ABIERTA
Sr. D. JAIME TORRENS Querido amigo: En contestación á tu

por las demás regiones. «Veo con tristeza que estáis apartados
de nosotros porque aseguráis que somos un peligro.»

señor Maura, cuando todas las diferen¬
cias entre los que formaban en la Soli¬ daridad desaparecieron y la unión se
hizo.»

bosque.
«La Solidaridad es el momento de una evolución. Nació de errores ó de omisio¬
nes del poder público, Y no debéis olvi¬

enero al 31 de abril de este año ha sido de 108.594 hectolitros contra 253.683
que importamos en igual tiempo del año anterior, por lo que resulta en contra de

carta en la que me pedías algo referen¬ te á la época en que se levantó el Colldt Sóller. la edad que tiene el monte y los. materiales que se encontrarán en su

Tacha de crueles las manifestaciones
que ©l Gobierno ha puesto en boca de
S. M. en el discurso de la Corona, cuan¬
do le hace calificar de apasionadas con¬ mociones las legítimas aspiraciones de
Cataluña.
«Esa aspiración ha producido el movi¬ miento que trae al Congreso 40 diputa¬ dos y al Senado 15 senadores que han restado ese número de los que se dicen

«El problema que hemos traído, es problema de un pueblo. No queráis ma¬ tarlo aquí, porque estaríais equivocados, puesto que es un problema que vive fuera de aquí y continuaría su fructífera labor; no lo podréis dividir, porque nues¬
tra fe en él es indivisible.
«Nuestra aspiración es el movimiento de un pueblo.
«Acudimos al Parlamento desvane¬

dar que hoy se labora para deshacer esos errores, para reparar esas omisiones.
«La Solidaridad existe porque se de¬ moró una reforma por parte del poder público.
«Ningún Gobierno mira las pequeñeces locales; gobierna sin fijarse si se unen ó se separan fracciones de un par¬ tido. Pero gobierna con un gran amor
hacia Cataluña como hacia las demás

1907 una diferencia de 145.089 hectoli¬
tros.
La importación de aceite español en Francia en el pasado mes de abril ascen¬ dió á 39 300 kilogramos, que, unidos á los 957.300 llegados en Ies tres pasados meses, suman 996.600 kilógramos. En el mismo mes de 1906 importamos 353.000 kilógramos, ó sea 313.700 kilos más que

perforación para construir el túnel, voy á darte cuatro datos, que tenía haca tiempo recopilados, y que me ha costado mucho trabajo encontrar, pues á causa de mis achaques físicos, ha «ido necesa¬
rio, como tu sabes, valerme de manos
ajenas. Aunque en Geología todo es opinable,
tal como se presentan las cosas al Coll de Sóller se levantó á principios de la

representan al pueblo y lo representan
de modo ficticio.
Afirma que los partidos turnantes en ©1 Poder están cada días más incapacita¬ dos <ie representar al pueblo, y no está lejano el día en que lo tengan que reco¬
nocer.
Recomienda al partirlo conservador

ciendo todo género de suspicacias. Espe¬
ra mos encontrar un eco á nuestra voz,
á nuestro patriotismo para la renovación de España.
«Lo que queremos para Cataluña, lo queremos para todas las regiones de Es¬ paña. y así se transformará la vida de
todos estos núcleos sociales del Estado

regiones. «Los vituperios que dirigís al partido
conservador son una prueba de ce¬ guedad.
»Ei Gobierno conservador y este Par¬ lamento han de ser los que realicen esas reformas que antes de conocerlas vitu ¬ peráis y á las que negáis vuestro apoyo.»

en el citado abril de 1907.
En los cuatro primeros meses de 1906 se importaron 4.177.500 kilógramos, ó sea 3.180.900 más que en los cuatro de
1907.
Crónica Balear

época cuaternaria. Parece que el calor central, terminada
la época terciaria, rompió la ccfttra déla
tierra formando chorros, ó sean volcanes
silenciosos de materia candente, cuyo
empuje levantaba la superficie de la tie¬ rra en algunos puntos hasta formar al¬
tísimos montes.

que coadyuve con la Solidaridad á la

completa purificación del sufragio.

español.» (Muy bien.)

(Muy bien.)

Este fenómeno fué general en todo el Los estudios para las obras de dra¬ globo, y en Mallorca de un modo tan

«¡Ay de vosotros si asi no lo hacéis!

El Sr. Lastres

Rectificaciones gado y ensanche del puerto de Ciudadela considerable que motivó el relieve que

«Todas las regiones seguirán el ejem¬ plo de Cataluña, el partido conservador se distanciará más del pueblo, y habrá
dos estados: el de derecho en la sobera¬
nía de !a voluntad del pueblo, y el de las oligarquías, que sería vencido.

El Sr. LASTRES contesta en nombre
de la Comisión.
Saluda al Sr. Abadal y le felicita por el discurso que ha pronunciado.
Excusa la modestia de contestación

Retifiea el Sr. ABADAL y dice que no ha querido rechazar la representación que los partidos tienen en el Parlamento, sin decir que éstos han venidq apoyados por sus respectivos partidos y no por la

estaban suspendidas por falta de fondos y el Diputado á Cortes Sr. Olives ha conseguido la remisión de ellos á la Je¬ fatura de Obras públicas y en breve continuarán dicho trabajos.

forma la actual cordillera del Norte, de¬
jando la isla en la forma de un buque varado en medio del Mediterráneo, tum¬ bado sobre la parta de babor, con la proa
hundida en los abismos de la Albufera
de Alcudia y la quilla colada .sobre 1*8

«El Estado que no es capaz de impedir
que se infrinja el derecho está incapaci¬ tado para ejercitar sus funciones.»
Afirma que tiene que ser restablecido el derecho para que no se produzcan perturbaciones y atentados terroristas
como los de Barcelona, una de las cua¬
jes víctimas ha sido el señor Cambó.

porque el Sr. Abadal ha hecho un dis¬ curso meditado y porque va á hablar el presidente del Consejo, al cual corres¬ ponde verdaderamente recoger lo dicho por el Sr. Abadal.
Hace ligeras indicaciones respecto del problema de la Solidaridad y juzga que es legítimo responder á las palabras que

más genuina representación del pueblo. «Nosotros queremos que este estado se
purifique.» «Y lo queremos todos» interrumpe el
señor MAURA.
«Lo queremos todos, sí», continúa el
señor ABADAL.
«Y lo procuraremos todos y lo podre¬

El jurado de recompensas de la V Exposición Internacional de Artes que
se está celebrando en Barcelona, ha con¬ cedido medalla de tercera clase, de la
sección de pintura, al conocido pintor mallorquín Lorenzo Cerdá, por su cuadro
«Costa del N. de Mallorca »

últimos terrenos de la época primaria en los pueblos de Estallenchs y de án-
draitx.
En Sóller, parece que al levantar el Puig Mayor este se pa rtió por en medio y despidió un bloque que forma un pelda¬
ño de más- de setecientos metros de altu¬
ra, sobre el cual existe ahora el prédiode

Y pregunta al Gobierno qué medidas
va ¿ t.omar„para restablecer el derecho.
Dice que para restablecer ese derecho tienen los solidarios en su programa la supresión de la ley de Excepciones.
«Nosotros entendemos que ha de ser

ha oído el Senado al Sr. Abadal.
Luego añade que no sólo son repre¬ sentantes de la opinión de Cataluña los que figuran en la Solidaridad, sino ios
demás.
Defiende al partido conservador de las

mos hacer nosotros», replica el señor
MAURA.
El Sr. ÁBADAL se felicita de que'todos lo quieran v de que se procure realizarlo.
Hace ver la diferencia que exisreentre la vida sana del sufragio en Cataluña y

A las tres de la tarde del miércoles se suicidó en la villa de Manacor el carabi¬
nero de 2.a clase de la 3.a compañía de la Comandancia de esta provincia, To¬ más Navalón Cano, que prestaba servi¬

Munnaber y cuya cima fué llenada toda por la roca eruptiva.
Parece que la Sierra de Alfabiay el Teix. en el punto donde se halla el Coll de Sóller, estaban ya separados al princi¬ piar la era terciaria y que toda la cordi¬

rectificada en absoluto la conducta del imputaciones que le ha hecho el Sr. Aba¬ lo que ha enfermado con el Caciquismo cio de ordenanza con el capitán de dicha llera estaba ya emergida rancho antea

Gobierno hacia Cataluña.

dal. (Muy bien.)

en otras regiones y en otras provincias. compañía don Francisco López.

de empezar la época tercian».

SOLLER

El Coll, pues, es un monte formado de de esto, ofrecerían una explotación

Fuerzas de carabineros apresaron el vo de haber sido brutalmente asesinada Ayuntamiento duraDte el actual mes d©

una gran parte de roca eruptiva que sa¬ abundante y rica.

martes en la costa, en las inmediaciones la anciana Catalina María Frontera y Junio mediante escrito ó comparecencia

lió de en medio de la falla que forman
, los dos montes circunvecinos y esta «s la única manera como puede explicarse la formación del Coll de Sóller.
En mis recreaciones geológicas, bus¬ qué durante largo tiempo una fórmula material que, traducida en números, me diese lo que me preguntas. Al fin la en¬ contré en el. Torrent dé Pareys y puestos los términos en regla de proporción me

El calor que s@ experimentará al lle¬ gar á la mitad del túnel no excederá de mucho los cuarenta grados centígrados,
que modificados por la ventilación arti¬ ficiar para conservar la vida de los tra¬ bajadores, no impedirá el trabajo.
El carbón de piedra solo existe en los terrenos de sedimento y por tanto no puede existir en ningún punto del Coll
de Sóller.

del punto conocido por «Es Gall», 28 bul¬
tos de tabaco de contrabando.
En algunos carros fueron conducidos á Palma é ingresados en los almacenes de la Compañía Arrendataria de Taba¬
cos.
En obras practicadas por administra¬ ción municipal durante el pasado mes de

Bisbal, en el desván de su casa de Binia¬
raix (Sóller), se ha extendido ya el ne¬ gro manto del sobreseimiento provisio¬
nal.
Esto no significa que este crimen haya de quedar impone, por cuanto á toda hora puede de nuevo abrirse el sumario para practicar en él nuevas diligencias, pero significa que todas las practicadas

solicitando se incoe el expediente de au¬ sencia que determina el citado artículo y Rs Os. indicadas, advirtiendo que de no presentarse durante el actual mes,
se entenderá renuncian al derecho que
les asiste y eu consecuencia á todos ios beneficios que nacen del mismo.
Se dió cuenta de varias instancias so¬
licitando el permiso indispensable para

dieron por cuarto término el número 30 Tampoco se hallará en dicha perfora¬ Mayo se invirtió la cantidad de 383T6 hasta hoy han resultado inútiles, que to¬ la construcción de obras particulares.

rail; de modo que el Coll de Sóller que. ción manantial alguno, porque la mul¬ pesetas.

dos los desvelos de los funcionarios judi¬ Enterada de ellas la Corporación, acordó

en mi concepto es gemelo del referido
torrente, cuenta la friolera de 30 mil
Abriles y si tratáramos de ajustar la
cuenta con instrumentos matemáticos
tal vez alcanzaría aun mayor edad. Respecto á tu pregunta ¿que materia¬
les encontrarán en la perforación del tú¬ nel? podría contestarla diciendo, que salvo en las entradas que, visiblemen¬ te presentan el material de que se

titud de fuentecitas que circulan en la vertiente de Sóller no se apercibirán del taladro porque la arcilla eruptiva no filtra el agua. La Sierra vierte las aguas de lluvia que recibe á la font de $' Olla y el Teix las vierte en la Sala Verdea. De modo que á no ser ó las entradas del tú¬ nel no se hallará filtración alguna.
Los terrenos colindantes á la vía en
la parte de Sóller y cercanos á la entra¬

Dichas obras consistieron en recom¬
poner el piso de varias calles y caminos vecinales; construir unas aceras en la ca¬ lle de Real; reparación practicada á la fuente de la calle de Rullán; recomponer el tejado de los almacenes del puerto; reparación practicada á la acequia que conduce las aguas al lavadero y abreva¬
dero públicos de la calle del Príncipe y

ciales se han defuminado en la densa nu¬
be en que supiera ocultar su criminosa
acción el verdadero asesino.
En principio, se creyó haber descu¬
bierto al criminal con la detención de un
convecino de la interfecta, á quien el pueblo señalaba como tal. Esto dió moti¬
vo incluso á alteraciones de orden so¬
cial. Aquellos pacíficos y honrados ciu¬

pasarlas á informe de la Comisión dé
Obras.
Fué aprobado el extracto de los acuer¬ dos tomados por el Ayuntamiento y Jun¬ ta Municipal en las sesiones celebradas en el mes de Mayo último y se acordó
remitirlo al señor Gobernador civil para su inserción en el «Boletín Oficial».
También fué aprobada la distribución

componen, lo demás es roca eruptiva; da del túnel podrían mejorarse mucho surtidor de la plaza de la Constitución y dadanos, ante el bochorno que para ellos de fondos para satisfacerlas obligaciones

pero con esto quedarías poco satisfecho, si sus propietarios les repartiesen una arreglar guarniciones y confeccionar ele significa que su terruño sirviera de tea¬ del presente mes.

pues comprendo que deseas saber algo fuerte cantidad de arcilla eruptiva que, nuevas para las caballerías que posee el tro á tan malévola escena, presos de in¬

No habiendo otros asuntos de que tra¬

más, que ahí va.
En la parte de Sóller. desde luego ten¬ drá que perforarse un grueso maciso de conglomerado formado por grandes can¬ tos, piedra y arena, unido todo con cemeuto de cal. Kn algunos puntos apare¬ cerán balsadas de tierra que harán necesaria la manipostería. Pasado este material, que será bastante larg’O por que el túnel costea mucho tiempo el to¬
rrente. se hallará un terreo® de color fe¬

como tiene una pequeña cantidad de hierro, serviría como abono para dichos
terrenos, mejorando de esta manera sus fincas que bastante lo necesitan; porque el suelo peca por demasiado arenoso.
Aquí tienes, amigo Torrens. mi modo de pensar referente á tus preguntas y termino esta carta que lleva por fecha el 3-de Junio de 1907, dia en que una bri¬ gada de operarios catalanes en la parte de Sóller y otra de aragoneses en la par¬

Municipio.
En la mañana de ayer fondeó en nues¬ tro puerto, procedente de Cette y Barce¬ lona, el vapor de esta matrícula «Villa de Sóller», siendo portador de numero¬ sos efectos y bastantes pasajeros.
Dicho buque saldrá nuevamente para los mismos puntos el próximo lunes á la
lora de costumbre.

dignación, promovieron un verdadero conflicto, que fatales resultados pudiera haber tenido si la guardia civil no inter¬ viene oportuna y hábilmente.
Pues bien, juzgando por el auto de sobreseimiento dictado estos días por la Audiencia Provincial, es de deducir que el vecindario se equivocó al señalar á Pedro Juan Deyá y P.uig como autor del asesinato de aquella infeliz anciana.

tar se levantó ia sesión.
ütS3S> & ftS!»*»1»
CULTOS SAGRADOS
En. la iglesia parroquial.—Mañana do
mingo, día 9. Se celebrará fiesta votiva eu obsequio de la Purísima Concepción de María. A las nueve y media, se cantarán las horas menores y después la Misa mayor con sermón por el Rdo. Sr. Cura-Arcipreste. A la tarde, habrá explicación del catecismo; y al anoche¬

rruginoso mezclado con piedras calizas de diferente magnitud y después empe¬ zará á encontrarse la roca eruptiva que no cesará hasta cerca.de la cúspide del Coll; pero como esta roca, cuando ha estado mucho tiempo bajo la acción de la humedad queda convertida en arcilla,

te de Buñola habrán empezado las obras de perforación del túnel mayor denomi¬
nado de la Sierra de Alfabia.
José Rullán Pbro.
Sóller 3 de junio de 1907.

Leemos qué los pintores catalanes don Santiago Rusiñol y don Joaquín Mir, muy conocidos eu esta ciudad, han obte¬ nido medalla de primera clase en la Ex¬ posición Internacional de Arte de Bar¬ celona; el primero por su cuadro Flors

Lo único descubierto hasta hoy, es la perpetración de un repugnante delito. ¿Quien es el autor? Aquí está aún la in¬ cógnita; en ninguno de los docientos y pico de folios del sumario ha existido un solo dato concreto para pod«r dirigir la

cer, después de vísperas y completas, se con¬ tinuará el ejercicio del mes del Sagrado Cora¬ zón de Jesús con exposición de S. D. M.
En la iglesia de San Francisco.—Mañana domingo, día 9. A las cinco y media de la
tarde, se continuará la novena en honor de S. Antonio de Padua.
Miércoles, día 12. Al anochecer solemnes

muy <lura de penetrar en la perforación,
'vendrá transformado en arcilla ferru¬
ginosa en todo @1 trayecto indicado, á

Crónica Local
En la Secretaría del Ayuntamiento de

llaves y el segundo por su cuadro Rovell (Torrent de Pareys.)
Les felicitamos.

investigación contra persona determina¬ da, y, naturalmente, las diligencias se han sobreseído, la causa se archiva.

completas en preparación á la fiesta del día siguiente.
Jueves, día 13. Se celebrará la fiesta de S. Antonio de Padua. A las siete, habrá Misa

K?ausa de la humedad que le comunican la multitud de fuentecitas que circulan
sobre dicho material, en toda la veitien
de del Coll que mira á Sóller y vierten sus aguas en el torrente.
Llegado á la cúspide del CoU aparece¬ rá un gran bloque d@ sulfato de cal, ó «ea de yeso, que puede ser tenga algu¬
nos centenares de metros de espesor.
Estudiada la otra parte del Coll que
mira á Palma, se hallarán los mismos

esta ciudad se hallan expuestos al públi¬ co, á efecto* de reclamación, los apéndi¬ ces al amillaramiento de este término, que han de servir de base para la forma¬ ción de los repartimientos de la contri¬ bución territorial sobre la riqueza rústi¬ ca, pecuaria y urbana para el próximo
año de 1908.
En Biniaraix, además de la fiesta re¬

En este estado las cosas, aquellos ve-

Eutre algunos jóvenes de esta locali- 1 cinos pacíficos y laboriosos de los dora-

dad. se formó, días pasados, una empresa dos valles de Sóller, en quienes perdura

para contratar una compañía de zarzuela aun el recuerdo triste de la noche del

que actúe en el teatro «Defensora Solle- trece de Noviembre último, son los obli¬

rense» durante la actual temporada.

gados ahora á suplir su acción personal

AI efecto, algunos comisionados salie¬ por la de la Justicia.

ron para Barcelona á principios de sema¬
na y ayer en el Vapor de ésta matrícula
vinieron ya con una compañía compuesta

Esta ha terminado su labor, que de no haber sido fructífera, no puede culparse á su falta de celo, ni de actividad. ¿Qué

de Comunión general por todos los miembros de la Pia-Unión y devotos del Santo. A las nueve y media, tercia y la Misa mayor con música, en la que pronunciará el panegírico del Santo protector de los pobres, el distingui¬ do orador sagrado Rdo. P. Fr. Eliseo de la Victoria capuchino. A las siete de la tarde, se cantará el trisagio, acto seguido habrá sermón por el mencionado orador y Te-Deum en acción de gracias al Altísimo por los pri¬ vilegios que se ha dignado conceder á S. An¬
tonio.
En el oratorio de las Hermanas de la Cari¬

materiales pero en forma diferente. Desde luego tendrá que desmontarse

ligiosa, que se celebró el domingo eu aquella iglesia con toda solemnidad, hu¬

de numeroso personal. Será dirigida por don Antonio Barce-

se ha de hacer ahora? Pues, que cada vecino, ávido de resucitar el proceso de

dad. -—Manana domingo, á las cinco de la
tarde, se celebrará el piadoso ejercicio de la
Buena Muerte en honor del Santo Cristo do

una cantidad considerable de conglome¬ bo música por la banda que dirige el ló y el maestro coneertador don Ricardo aquel delito, envuelto en las sombras de la Salud.

rado, ó sea de tupi. como aquí decimos, señor Marqués.

Pastor, y mañana noche poudrá en esce¬ la impunidad, se convierta en policía y

idéntico al que ya hemos visto en la par¬
te de Sóller.
Después se presentará un maciso de yeso que no será de mucha extensión;

La animación no pasó de regular.
Durante el pasado mes de Mayo ocu¬
rrieron en esta ciudad 12 defunciones:

na las bonitas zarzuelas La Mala Sombra, ha Trapera y El Barbero de Sevilla.
El próximo jueves habrá también fun¬
ción.

en cuanto se procure algún dato, acuda al troquel de la autoridad para que lo ponga en claro.
No están solos los vecinos de Sóller

itegílstr© Ovil
Nacimientos

vendrá otra vez e) conglomerado calizo 4 varones y 8 hembras.

y á este seguirá la roca eruptiva basta

En el mismo mes s© registraron 17

el maciso de yeso que hemos dejado á la nacimientos: 9 varones y 8 hembras.

""cúspide del Coll.

Se ha abierto un abono por diez fun¬ ciones y se nos dice que el número de
inscritos en las listas es á estas horas

que pretendeu esclarecer los hechos que el Tribunal no ha podido. También La Tarde, que vino al mundo para defender

Yarones

Hembras 2.- -Total

Matrimoneos

Ninguno.

Aquí empero la roca eruptiva se pre¬

Como decíamos en nuestro número úl de bastante importancia.

las justas aspiraciones de cada uno de

Defunciones

sentará en forma de piedra muy dura, de colores muy variados y muy apropia¬ da para jaspes. Estos son los materiales que tendrán que desmontarse en la per¬
foración del Coll.
Como l,a arcilla se presentará en un estado durísimo, la parte del túnel en
ella construido ofrecerá un techo sólido
y elegante que con el tiempo se conver¬ tirá en piedra, de modo que nuestro tú¬ nel, apesar de la variedad de materiales que se presentarán, será sólido y elegan¬ te, ó, eu términos más claros, bueno y
barato.

timo, el domingo se acordó definitiva mente el punto donde ha de emplazarse
la estación del ferrocarril Palma-Sóller.
Celebró sesión la Junta Directiva de la
sociedad explotadora el domingo por la mañana, y en la misma quedó acordado por 16 votos eoutra 2 el que la estación se construya en «Can Bauzá», calle de Isa¬ bel II, distante algunos cientos de me¬
tros de la Plaza de la Constitución. Des
d© el punto designado se podrá prolongar la línea férrea hasta el puerto, cuando convenga á los intereses de la compañía

Nos encontrarnos en la primera quin¬ cena del mes da Junio, y si la calma y el buen tiempo han reinado durante uua parte del día, y no en todos, en la otra el viento fresco unas veces, y el cálido y huracanado otras, se ha enseñoreado de nosotros con tendencias á dejarnos semi-
asfixiados como sucedió en las tardes y
noches del martes y miércoles. En cam¬ bio por haber rolado anoche el viento al primer cuadrante, refrescó la temperatu ra, volviendo hoy á su estado normal. A mayor abundamiento, vino después la

los pueblos de Mallorca, aportará su gra¬ no de arena, seguirá como hasta hoy, el derrotero de este asunto, y continuará informando á sus lectores, y naás que á sns lectores á las Autoridades, de todas
aquellas noticias que algún día puedan dar verdadera y claraluz con la que poder resucitar el sumario, muerto, ar¬ chivado ya, é ir luego á la persecución del vil criminal que manchó su mano con sangre de indefensa anciana, para lograr quizás fútil venganza ó interés mezquino, ya que no pudo perseguir el lucro con
matar.

Día 3.—Juan Cardona Miró, de 25 años, soltero, calle de Batach.
Día 4.—Esperanza Sastre Castañer, de 72 años, casada, calle de Moragues.
Día 5.—Apolonia Llabrés Martorell, de 63 años, viuda, calle de Serra.

Ultimas cotizaciones

Madrid 7 Junio
Interior al 4 p §. . . Amortizable al 5 p §.

82‘50 iOO‘40

Dentro de los indicados materiales
eruptivos que siempre suelen ir acom¬ pañados de grandes bloques de yeso, co¬ mo proceden del centro de la tierra en au salida pasando por las capas de tierra primaria, arrastran consigo los materia¬ les que eu la misma se encuentran; y como en los terrenos primarios se hallau casi todos los minerales de metal, puede ser muy bien que dentro de la roca erup¬ tiva se hallase minerales de plomo, pla¬ ta. cobre y hasta de oro. ¿Te ries? Bien podría ser.
Respecto del cobre, en la cordillera de roca pura eruptiva que se halla en Só11er partiendo del Coll d' en Borrassá hasta el prédio de Moncaire. se han ex¬

El ingeniero de la compañía, D. Pedro Garau, había presentado un plano y me¬ moria detallados indicando, además del sitio en primer lugar señalado: Can Cue¬ ra, otros tres, ó sean; Can Bauzá, Can Regañol y Can Mayol.
El señor Garau en la memoria, minu¬ ciosamente detallada, ponía de relieve
los inconvenientes y las veiítajas que en¬
cerraba cada proyecto. La Junta Directiva, como decimos
más arriba, designó para punto de em¬ plazamiento Can Bauza, propiedad de
don José Ferrer Oliver.
Los trabajos en la línea empezaron ya el lunes. Una brigada en las inmediacio¬

segunda parte de esta variación que fué igual ó peor que la primera, tanto que bien podemos continuar diciendo que la nota dominante, durante la quincena,
han sido los continuos cambios atmosfé
ricos producidos por la densa niebla, y rápidos descensos de temperatura que han perjudicado bastante, no solo á las hortalizas y cereales, que necesitan, en esta época, tiempo clhro, sereno y mayor temperatura que la que ha reinado du¬ rante todo el pasado mes y lo que va trascurrido del presente, sino que ha da¬ ñado también algo á los olivos que se encuentran en el mas delicado período,

A este asunto pensamos dedicar espe¬ cial información. Si quieren los sollerenses ayudarnos, con gusto escucharemos las noticias que nos suministren, apro¬ vechándolas para el honroso fin que per¬ seguimos.»
EN EL AYUNTAMIENTO
Sesión del día l.° de Junio de 1907
La presidió el Alcalde don Miguel Ripoll, asistiendo los Concejales señores Morell, Rotger, Joy, Castañar Arbona, Rullán, Frontera y Colono.
Fué leída y aprobada el acta di la

Banco de España . .

Tabacos .

.

.

.

.

Francos .

.

.

.

,

Libras

445f00 404100
IU20
27l93

MÁQUINAS^SINGER,,
Ventas al contado y á plazos do
diez reales semanales.
Se venden igualmente toda clase de accesorios para las mismas,
dirigirse á
MATÍAjS MONEiq
Luna., 9—SÓLLER

plotado ya en diferentes ocasiones varias minas de cobre y recuerdo haber visto un pedazo de este metal que era de una
riqueza extremada.

nes de Alfabia y otra en la parte de Sóller, un poco más arriba del Pont d' en Valls, se ocupan en abrir las zanjas con¬ tiguas á las bocas del túnel mayor. La

el de la eflorecencia, cercana á la grana
zón.
El crimen de

sesión anterior.
En virtud de lo dispuesto en el artículo 69 del Reglamento dictado para la eje cución de la vigente ley de reclutamien¬

Amador Sastre
GALLE DE LA LUNA.—SOLLER

Estas minas ó yacimientos son difí¬ ciles de explotar, porque las obras han de hacerse valiéndose de pozos y ofrecen dificultades que á veces son insupera¬ bles; teniendo que abandonar las minas

perforación de éste empezará probable¬
mente alrededor del 20 del actual.
Ha sido nombrado vocal de la Junta

Miniarais:
Con el título de Crimen en la sombra, escribe nuestro apreciable colega La Tar

to, así como de las Rs. Os. de 27 de Ju

pió y 23. fie Diciembre dó anunciar al público

de 1903, se acoren legal forma,

i

Ofrece aT público toda clase de
máquinas «Singer» y-accesorios pa¬ ra las mismas. Se practican toda

que cuantos mozos fian de ser compren¬ clase de composturas.

cuando más probabilidades ofrecen de un buen filón. Y como en la perforación

provincial de Instrucción pública, don Jerónimo Estades, en concepto de Di¬

de, en su número del miércoles, las si¬ guientes líneas:

didos en el próximo alistamiento r’e 1908 y necesiten comprobar, para las excep¬

Ventas al contado y á plazos de 10 reales semanales. v

del túnel no sería lo mismo, te aseguro qua,si aparecieren dichos minerales á
«fia profundidad tan considerable apelar

putado provincial.
Le felicitamos.

«Sobre la causa criminal, que allá por el mes de Noviembre del año último, tanto dió que hablar, instruida con moli¬

ciones que se propongan alegar, la au¬ sencia de ignorado paradero de sus padres ó hermanos, deberán presentarse á este

CALLE DE LA LUNA N.° 101.

m

SOLLER

FOLLETÍN (2i)

"

—

EL-UÁZ© DE FLORES

^fsero me tenía miedo: bastaba.¿que yo le dijese.-—Mujer, hoy tiene poca sal el puchero,—para que se echase á llorar, ■*88 vez de decirme: Tienes razón,‘Jacobo.
inañana 1 e pondré más. Por otra parte, señora, la pobre An¬
drea, solo sabía hacer una cosa: hilar con
primor; pero-en cuanto á cuidar de la opa de su marido, en cuanto al guiso y
lavado, en cuanto al gobierno de la
-casa, en cuanto borrar por acá un ocha* vico y otro por allá, Dios guarde á usted
^muchos años.
Pasaba el día hilando, y yo iba súeio
'
-y roto, y empezó á darme vergüenza de -verme entre los demás jóvenes de mi «dad, todos soltero», libres, alegres, lim¬ pios como un oro.
Poco después de un año de habernos casado cayó Andrea mala: yo Je habla dado algunos golpes, y roe echaron ía colpa de su enfermedad; pero fué porque Dios quiso-y nada más; cuando volvía á casa del trabajo, la encontraba silencio¬

sa y triste, la sacaba veinte conversacio nes, y ninguna me seguía; era buena, mas para un hom bre de mi génio, señora, no basta eso solo: empezó á agobiarme el silencio de mi casa,y nuestra pobreza, que era cada día mayor, pues por lamala salud y mingun gobierno de mi mujer, teníamos que pagar á uua vecina pobre para que lavase y limpiase nuestra ha¬ bitación: fui una vez á la taberna, y des¬ pués otra y otra, porque allí olvidaba mi mala suerte: cuando nació mi hijo crecieron los apuros: tuve que buscar y pagar á una mujer que le criase: me irri¬ té contra mis desdichas: juraba como un condenado, y deseando siempre ga¬ nar algún dinero, dejé, por trab ijar, de ir á la iglesia.
Cobré mala fama, y cuando Dios se llevó á Andrea, todos me acusaron de su
muerte: me miraban con aversión, y yo
cada día me hice-más violento, y mi gén'o se empeoró.
Mi hijo, abandonado y sin madre, sacó malas inclinaciones: á bien que si hubie¬ ra vivido Andrea, lo mismo y quizá peor hubiera sido: pronto conocí que me es¬ torbaba, pasé días y noches sin verle, y sin saber de él: mi jornal apenasbastaba para mal comer yo; y de lo que tenía le dejaba á él para que comiese.

Cada día ha ido siendo mayor mi po¬ breza; por huir de la soledad de mi casa, de mi hogar sin calor, de mi cuarto tan pobre j tan desmantelado, he seguido yendo á la taberna: el tabernero me fiaba toda la semana, y el sábado por la noche se cobraba de mi jornal; pero me queda¬ ba tan poco, que pasaba mucha hambre.
Algunas buenas mujeres del lugar, que se compadecían de verme tan desas¬ trado, me aconsejaban que me casase otra vez; ¿pero á quién podía yo traer ¿ mi casa, tan miserable y tan abandona¬ da? Iba pasando revista en mi pensa¬ miento á todaslas muchachas del pueblo, y no hallaba á ninguna que hubiera po¬ dido consentir en ser mi mujer: todas sa¬ bían que yo no podía mantenerlas.
Por fin, un día vi á Florencia que iba, cantando, por agua á la fuente, y me dije: —¡Si yo tuviese una mujer así! — Luego pensé que era muy fea, y que na¬ die la había festejado nunca, y me acer¬ qué á hablarle.
A los ocho días la quería yo con alma y vida: algunas veces, de camino que
iba á la fuente, entraba ella en mi casa,
limpiaba la cocina, me freía patatas, y cubría la mesa: todo esto por supuesto, mientras que yo estaba ganando un jor¬ nal: la noche que á la vuelta del trabajo

veía mi pobre cena guisada por las ma¬ Nada respondió el jornalero, y dejó

nos de Florencia, me sabía mejur y dor¬ caer su cabeza sobre el pecho.

mía más tranqu 10.

—Jacobo, prosiguió la caritativa seño¬

Animado por ella me atreví á pedirla ra, volviendo á sacar su bolsillo: aquí

en matrimonio á su madre y á su abuelo, hay dos mil reales; hazme el favor de

y me dieron un sí que no esperaba; pero quedarte con ellos: poco es, pero teneis

luego se han arrepentido, a tuque a de¬ cir verdad, á mí me ha importado poco, sabiendo que me quiere Floreucia.
Calló Jacobo después de terminar su triste historia, y doña Agueda, que se
había conmovido hondamente con el re¬
lato de aquel hombre, más desgraciado
que culpable, guardó también algunos
¡instantes de silencio.
—¿Y no has pensado, dijo tras una pausa, no has pensado, Jacobo, en que la miseria os hará penosa la vida á Floren¬ cia y á ti?
—Nunca he pensado en eso. porque la

para ir viviendo. —Perdone Yd. que le diga otra vez
que no, mi señora doña Agueda. —¡Me causas una gran pena con tu
negativa! exclamó ésta con los ojos hu¬
medecidos.
—No quiero causársela á Vd.. pues, dijo Jacobo tomando la bolsa: señora, Yd., después de Florencia, es la persona que más quiero en este mundo; porque Vd. me ha dicho buenas y hermosas pa¬ labras, que á nadie había oído todavía. Así, pues, tomo el bolsillo.
—Gracias, Jacobo, exclamó doña

sola vista de Florencia aleja de mí todos Agueda como si le hubieran hecho una

los pensamientos tristes. —¿Cuentas acaso con lo que le dé su
abuelo?
—No, señora.
—Haces bien, porque sé que le dará
muy poco.
Jacobo se encogió de hombros. —Sois tres, prosiguió doña Agueda, y

gran merced. Y luego, viendo que Jacobo se dispo¬
nía á salir, añadió.
—No olvides que mañana se arregla¬ rán aquí las condiciones de tu boda.
—Pierda Vd. cuidado, señora, y Dios
le dé buena noche.

no cuentas con más recurso que con tres

Jacobo salió, dicho esto, llevando en

reales diarios de jornal: ¿que vais á co¬ la mano el bolsillo que le había dado do¬

mer?

ña Agueda.

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