AÑO III.—l·TÚM. 121.
AÑO III.—l·TÚM. 121.

29 OCTUBRE DE 1887.

Ferro-Carrües de Mallorca.
SERVICIO DE TRENES
que regirá desde 1) O 'iubre á SI Mano de 188$.
De Palma á Manacor y La Puebla.—7’«':0 maña¬ na, 2 y V 1.5 (mixto) tarde.
De .Manacor á Palma.—3 (mixto) 7' 0 mañana y 5 tardo:
De Manacor á La Puebla. — 7’50 mañana y ó tardo.
I)c La Puebla ¡i Manacor.—7\\">5 mañana 2’30 y 5’10 (mixto) tardo.
De La Puebla á Palma.—7’55 mañana y 510 (mixto) tardo.
Tren periódico: dias de mercado en Inca.—De
^nca á Palma—2 tarde.
PERIÓDICO

SEMANAL

DE

INTERESES

CORREOS.
SALIDAS DE PALMA.
Para Ibiza y Alicante, domingo 8 mañana. Para Malion, lunes 4 tarde y miércoles 2 tarde, vía Alcudia. Para Barcoloua, martes 4 tarde y sábado 2 tarde, vía Alcudia. Para Valencia, jueves 4 tarde.
LLEGADAS Á PALMA. De Valencia, lunes 7 mañana. De Mahon, lunes!) mañana vía Alcudia y jueves
9 mañana.
De Ibiza y Alicante, miércoles 3 tarde.
De .Barcelona, jueves 12 mañana, vía Alcudia y
sábado 7 mañana.
Salidas de Sóller.—Los domingos á las 2 de la mañana y los demás días á las 4.
Llegadas á Sóller.—Todos los días á las 6 noche.
MATERIALES.

PUNTOS DE SUSCRICIÓN.

PRECIOS RE SUSCRICIÓN.

En la Redacción y Administración, calle de San Bartolomé núm. 17.

1 peseta trimestre en toda España.

2 id.

id. Extranjero y América.

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Anuncios y comunicados á precios convencionales; los comunicados deberán llevar firma.

LA ENFERMEDAD DEL NARANJO.
ikDIOIOjSTEJS.
Diez y siete años han trascurrido des¬ de que, por primera vez, expusimos la necesidad de adoptar un sistema de culti¬ vo baáado en los principios que acabamos de consignar en los artículos anteriores, si queríamos combatir con éxito al ene¬ migo del naranjo, que ya canta la victoria por habernos hundido en la miseria. Nuestro humilde trabajo, algo más am¬ pliado, se reprodujo desfmes en varios periódicos de Palma, del continente y
hasta se estractó en obras didácticas; y, sin embargo, apesar de nuestras conti¬
nuas observaciones y estudio, nada tene¬ mos que modificar.
Decíamos a nuestros hortelanos; Que sustrajesen el esceso de humedad del nu¬ do vital del naranjo: Que regasen por la perpendicular de las ramas, formando an¬ cha tetilla en vez de reducida alberca, al pié del tronco: Que plantasen somera¬ mente y no arrancasen, segiín la práctica rutinaria, ninguna raiz, por delgada que

tese, aunque estuviese en la superficie y dificultase la labor, entidad que los botᬠnicos llaman capilares y nuestros trabaja¬ dores relam: Que desechasen los piés dul¬ ces sustituyéndolos por los ágrios: Que ingertasen todas las matas y escogiesen antes buenas castas para verificar el in¬ gerto; y nada tenemos que rectificar: el tiempo y la práctica nos han dado la ra¬ zón: hasta en algunos puntos se han ex¬ tremado muchos propietarios.
En el día nadie riega ya por alberquilla, garangola, y, á disponer de agua en abun¬ dancia, todos regarían á manta ó por ta¬ blares, en los intermedios de los liños, riego el más natural, pues que imita al de la lluvia, establecido por la naturaleza.
La convicción de la necesidad de sus¬
traer la escesiva humedad del pié del na¬ ranjo, ha llevado á muchos á imitar la práctica adoptada en Valencia, de descu¬
brir todas las raices madres de nuestra
planta, cavando alrededor de la misma,
una alberca de treinta á cuarenta centí¬
metros de radio, sujetándola á vivir en un
estado nada favorable á las condiciones
exigidas por la vidajvegetal.

Ilace cuatro años que se introdujo di¬ cha práctica entre nosotros: operación que ni aplaudimos ni reprobamos, porque si bien lleva la ventaja de mantener todo el tronco incluso el nudo vital, libre de la voracidad del enemigo, dá en el incon¬ veniente de contrariar las leyes de la bue¬
na vegetación, de ser costosa, exigir más abono, mayor cantidad de agua, y resul¬ tar siempre violenta para el naranjo. El tiempo trascurrido desde que se practica este ensayo que, entre nosotros ¿por qué negarlo? todo se hace sin método, sin el correspondiente diario de observaciones y sin constancia, no es suficiente para juzgar de los resultados. A esto es debi¬ da la indecisión de muchos propietarios á cargar con un gasto más, sin|una ga¬ rantía segura, cuando los huertos apenas dan para los gastos de cultivo. Mejor ca¬ mino han emprendido los que tratan al naranjo por medio del ácido sulfuroso, según hemos visto en los ensayos que es¬ tán practicando algunos cosecheros, de los cuales nos ocuparemos otro día.
Volviendo á la práctica de descubrir las raices ¿no sería mejor adoptar el mé-

LA ÚLTIMA CALAVERADA.
(Oontinxaeuoióxv.)
«Yo quisiera desamortizarme (empecé á de¬ cir á todas horas.) Yo quisiera reivindicarme, recuperarme, resucitar... probarme á mí mismo que soy todavía un hombre como los otros, ca¬ paz de inspirar una pasión en activo servicio; que, si hasta aquí he sido un modelo de mari¬ dos fieles, ha sido por mi gusto, no por necesi¬ dad ni decadencia; qne no me morí al casarme; que soy libre de hecho; que aún vive Pelayo; que
puedo escalar las murallas de mi cárcel cuando me acomode.... y que, si habito en ella, no es como un forzado de la virtud, sino como un vo¬ luntario de mi mujer.»
Al poco tienpo de ocurrirme todas estas atro¬ cidades, hijas de mi impunidad, parecióme que la suerte, que el destino, que el hado, que el mi¬ men en que creen los jugadores y cuantos no se atreven á hacer á Dios cómplice de sus proyéc¬

tos, se había puesto de mi parte y me propor¬
cionaba la ocasión de realizar el acto de inde¬
pendencia por que suspiraba todo mi sér
Redoblad ahora vuestra atención.
XIX.
Yivia yo con Eloísa en el campo, en las cer¬ canías de Bayona, en uno de aquellos chalets que tanto abundan allí y qne se alquilan por la temporada de verano.—Hallábase situado el nuestro en la carretera que conduce á Pan
—Todavía no había ferro-carriles en el medio¬ día de Francia.
Precisamente había sido en aquella especie de quinta donde había yo concebido, á priori y en abstracto, la picara idea de faltarle solem¬ nemente á mi cara mitad; de tener una queri¬ da en toda forma, prévia la correspondiente conquista; de aumentar un nuevo laurel á los de mi borrascosa juventud. La soledad, el es¬ pectáculo de la pagana naturaleza y la rápida visión de las hechiceras veranea,cloras y bañis¬ tas que pasaban por delante de nuestra solita¬ ria vivienda, en soberbios carruajes, dirigién¬

dose á otros puntos del Pirineo, contribuyeron, sin duda, á sacarme de mis casillas
¡El campo! sil rico ambiente Huele á regazo materno,
O más bien á beso tierno
De púdica adolescente ha dicho alguien.
En tal situación, pues, supe que una antigua novia mia con quien estuve para casarme, y cu¬ ya mano no llegué al fin á pedir, sólo porque me permitió besársela varias veces cuando la llevaba del brazo, escoltada por su madre y toda su parentela, desde cierta tertulia hasta la casa en que vivia; casa cuya llave no pude adquirir nunca, no por falta de voluntad de la hija (me parece á mí), sino por sobra de vigi¬
lancia de la mamá
—¡Escupa V., marqúés, que se ahoga!.... —Descuidad, que no os diré su verdadero nombre. Pero; para entendernos, bueno será que la llamemos Antonia, Josefa, Dolores en fin, como queráis.
—Preferimos Antonia. Es un bonito nom¬
bre. ...

SÓLLER.

todo de plantar más someramente, colo¬
cando así las raíces en el verdadero me¬
dio exigido por la naturaleza? A nosotros nos dá escelente resultado. Para plantar el naranjo practicamos un hoyo de unos dos palmos de profundidad, lo volvemos á llenar de tierra mezclada con estiércol, colocamos el cepellón, panal, del plantón encima y lo arropamos con tierra bien estercolada, formando la tetilla necesaria
para mantener la planta en condiciones ele verificar un buen arraigo en la tierra de labor ó verdaderamente vejetal: des¬ pués regamos á mano. Con esto se obtie¬ ne que, al sentarse la tierra del hoyo, baje la planta á la profundidad que reclama para estender sus raices y sentir en ellas la influencia de la luz y del aire, sin cuyo requisito no hay buena vegetación: sabe¬ mos que hay quien nos imita.
Nuestras escitaciones á que se planta¬ sen naranjos agrios y se ingertasen des¬ pules de buenas castas, no han sido tan afortunadas: muchos propietarios se están todavía reacios y pertinaces en que no hay naranjo como el borde dulce. No .advierten los cuitados, y lo tienen todos ios días á la vista, que la naranja mallor¬ quina no tiene la demanda que tendría si fuese más gruesa: que alcanzaría más pre¬ cio en el mercado extrangero, si se pre¬ sentase igual en magnitud á la del conti¬ nente, cosa fácil de obtener si se escoge la casta en el acto de practicar el ingerto.
Convengamos en que nuestra agricultu¬
ra se halla en un atraso lamentable y que
no saldrá de él, hasta que los propietarios .se convenzan de que no andan por el buen camino, despreciando, por sistema, los cousejos de la prensa, de los hombres -de ciencia, prácticos y observadores.
Se nos dirá que son ya muchos los que procuran formar sus huertos con piés ingertados, y que no por esto logramos dar más importancia á nuestros produc¬

tos.—¿Y éstos que así obran, paran mien¬ tes en averiguar de que naranjo proce¬ den los ingertos que pagan á buen pre¬ cio? Preguntádselo y todos á una contes¬ tarán que no han examinado las cualida¬ des, ni visto siquiera el fruto; y como el plantetista, guiado por la misma indolen¬ cia de sus parroquianos, sólo se fija en escoger varas que dén buenos escudetes y prendan con facilidad, vengan de donde vengan, la medicina resulta peor que el
mal.
Solamente conocemos algunos propie¬ tarios que se han fijado en materia tan interesante y podemos afirmar que reco¬ gen ya el fruto de sus desvelos. Digᬠmoslo más claro, aunque sea á trueque de ofender su modestia: D. Pedro A. Pulían,
Moyana, D. Gabriel Albertí, Sivella, don Lorenzo Frontera, Ferré, D. Antonio Pons y Gispert, D. Antonio Morey, Monserrat, D, Gerónimo Estades y Llabrés, y algún otro que no recordamos, forman la vanguardia de nuestro progreso agrí¬ cola. A sus huertos es preciso acudir si queréis ver castas escogidas que pueden rivalizar con las mejores del continente. Ellos os dirán ele donde proceden sus in¬ gertos, las cualidades de la naranja que cosechan, las ventajas que lleva una casta sobre la otra, y os facilitarán los medios de corregir el ruinoso sistema que com¬ batimos, porque en él estriba no peque¬ ña parte de nuestra desgracia, el conflic¬ to de nuestros intereses, la crisis lamen¬ table que atraviesa nuestra agricultura hortícola que, á no remediarlo Dios, nos conducirá, á la más completa ruina.
Sí, es necesario sacudir nuestra apatía, formar centros en donde, descartada la
política, se discutan los medios de mejo¬ rar nuestros frutos, de ilustrar á nuestros braceros, haciéndolos entrar en deseos de conocer las leyes de la fisiología vegetal, de saber el por qué de lo que automáti¬

camente practican todos los días, fatigán¬ dose infructuosamente, y hasta perjudi¬ cando sus propios intereses.
En Sóller falta enseñanza, mucha en¬ señanza, y nuestro Municipio debería en¬ trar en el terreno práctico, facilitando los medios de propagarla. Debería aumentar el personal docente, adquirir locales, y material científico, sin cuyos elementos
nada se adelanta.
¿Seremos escuchados? Harto motivo tenemos para desconfiar de que se reali¬ cen nuestros deseos, y que nuestra pobla¬ ción seguirá por la pendiente ruinosa, hasta que, terminada la emigración, sólo quede un miserable caserío, el triste re¬ cuerdo del tan renombrado, por antono¬ masia, Jardín de las Hespérides.
Jos É Rullan Pbro.
CRÓMICA LOCAL.
EL SARAMPIÓN.
Las escuelas públicas siguen cerradas y el sarampión prosigue el mismo curso que hemos visto en casi todas las invasio¬ nes de esa benévola epidemia. Excepción hecha de algunos casos en que se compli¬ ca con otra enfermedad; si el enfermo es esmeradamente cuidado, en pocos días llega la convalecencia y el completo res¬
tablecimiento.
Encarecemos, por tanto, muchísimo á las madres que atiendan á descubrir en sus pequeñuelos los síntomas precursores del mal reinante, que casi siempre suele presentarse con apariencias de resfriado con los ojos y rostro más encendido que de ordinario; y al menor recelo que ten¬ gan de la invasión no descuiden como me¬ dida preventiva, de arropar y abrigar bien al paciente, hasta que lo haya visto el Facultativo, y ordene lo que crea del
caso.

—Y nombre romano, clásico, escultural Pues bien, repito, que Antonia hubiera lle¬

gado tal vez á convertirse ¡de mi futura en mi presente, si yo le hubiese dedicado más tiempo, ó sí la madre nos hubiera dejado más espacio...

y ¡dicho se está que un hombre de mis circuns¬

tancias no había de llamar después esposa suya

á la mujer que le merecía tal concepto! Porque habéis de saber que el verdadero ca¬

lavera no se casa nunca con sus víctimas

ni

áun con las meramente posibles. El verdadero

calavera se casa con una santa como mi mar¬

quesa, ó baja solterón á los profundos infier¬ nos. Esos Tenorios vulgares que acaban por

pagar en la vicaría todo lo que deben á las mu¬

jeres, poniéndose en manos de una equívoca

hija de Eva que vengue á todas sus predecesoras, son unos calaveras apócrifos, unos impos¬

tores, unos falsos profetas del amor...!.— A ver! deme Y. lumbre, pollo.
Iba diciendo que por entónces supe que aque¬ lla mi antigua novia—casada ya á la sazón con
un pobre amigo mío de la especie predestinada,

que, ó no probó á besarle la mano á Antonia

ántes de pedírsela, ó ¡era ménos receleso y pre¬

Desde mi primer encuentro con ella, conocí

cavido que yo—habitaba en otro chalet solita¬ que recordaba aquellos besillos que en otro

rio, situado en aquella misma carretera y á una tiempo depositára yo en sus manos; y á mayor

legua escasa del nuestro

abundamiento, aproveché todos los descuidos

Inmediatamente que me enteré del caso, pro¬ de su esposo y de mi mujer para aumentar el

curé hacerme el encontradizo con su marido y catálogo de tan reverentes ósculos, con media

con ella: alegráronse ambos mucho de aquel docena que pude plantarle en el carrillo izquier¬

encuentro y de aquella vecindad: llevé á mi do, otra media docena en el derecho, y uno de

mujer á misa á la misma aldea en que solian padre y señor mió en mitad dé su perjura boca,...

oiría ellos: hubo las presentaciones consiguien¬ todo esto dando vueltas por nuestro jardín ó

tes: mediaron dos largas visitas: es decir; no¬ por el suyo: miéntras que su marido y mujer

sotros almorzamos un día en casa de Antonia, (¡con remordimiento lo digo!) hablaban de flori¬

y Antonia y su marido almorzaron otro día en cultura, ó se contaban lo muy felices que res¬

la nuestra; y, con esto, fuimos ya los cuatro pectivamente los hacíamos Antonia y yo,

los mejores amigos del mundo.

bien que sin conseguir nunca los infelices pa¬

Mi pobre marquesa no sospechaba nada, y, searse por las mismas calles de árboles que no¬

sin embargo, la cosa no podia marchar más de sotros ¡Tal era el afan con que nosotros fin¬

prisa.—La legtiecilla que separaba los chalets . gíamos perseguir vilanos á falta de prima¬

andábase en ménos de media hora, bien en un verales mariposas!

tilbury que tenían nuestros vecinos, bien en

Porque estas escenas ocurrían á mediados

dos caballos de silla que teníamos mi mujer y de Setiembre:

yo, y en cuanto al camino del adulterio, puede

decirse que Antonia y yo lo andábamos á gran¬
des saltos.

(Se continuará.)

SÓLLER.

3

Respecto á la clausura ele las escuelas tunados, pues dicho viento echóles á per¬ cación al estudio como Mr. Nolan, se

publicas, si bieu en absoluto debe aplau¬ der una buena parte de la cosecha de | adelanta en las ciencias, y será fácil que

dirse la medida, si se tiene en cuenta el manzanas.

los amantes del saber vean realizado el

lugar y las circunstancias de esta locali¬

pensamiento de tener un tratado comple-

dad, no podrá concedérsele toda la efica¬ Por la primera vez en lo que llevamos ! to de geología de las Baleares.

cia que en otras condiciones pudiera pro¬ de invierno hemos visto esta semana cu¬

Nuestra Diputación Provincial debería

ducir.

biertas de nieve las montañas que nos | aprovechar la coyuntura para formar un

En primer lugar parece que el mal, de circundan; y decimos en lo que llevamos museo que sirviera de base á las personas

que nos ocupamos, se ceba con preferen¬ de invierno, á pesar de no empezar este I aficionadas á este ramo del saber hu-

cia en la clase de parvulitos, ó sean me¬ hasta el 21 de Diciembre, porque el frío • mano.

nores de seis años, y como en la pobla¬ que se deja sentir es tan intenso, que du¬

ción no tenemos escuela pública de esta damos lo sea más en el mes de Enero.

clase, las 3 ó 4 que hay privadas ó par¬

Lo cual ha obligado á los sollerenses á SESIONES DEL AYUNTAMIENTO.

ticulares, siguen abiertas y concurridas; buscar el paño.

Sesión de día 14 del actual.

y tal vez sin las condiciones de;? ventila¬ ción y capacidad que fuera de desear.

Próxima la época en que debe tener lugar la fabricación del aceite y á fin de* facilitar á los

Además de las dichas, que considerá¬

Las quejas del vecindario nos han obli¬ fabricantes todas las ventajas posibles, al par

ramos como de párvulos, las hay, á lo gado á ir al punto denominado Sa Tomenos doce, que sepamos, con carácter ' rrantera al objeto de examinar las obras
elemental; y naturalmente,¡ tardando| al¬ que quedaron terminadas la próxima pa¬ gun tiempo en abrirse las públicas, los sada semana.

que dejar asegurados los derechos de consumo á que se halla sugeto e! mismo, acordó el Ayun¬ tamiento que los dueños ó encargados de las almazaras dén cada veinte y cuatro horas un parte por escrito á la Administración de con¬

alumnos matriculados en estas últimas in¬

Si hemos de manifestar nuestra opi¬ sumos, en el que conste el número de moliendas

gresarán paulatinamente en las primeras, viniendo á parar en que la clausura no tendría objeto.
Por otra parte hay que tener en cuen¬ ta que las costumbres de muchos pueblos no se asemejan en nada á las de la capi¬ tal. Allí quizá las familias atiendan más al cuidado de sus hijos impidiendo que, en
los dias de vacaciones ó asueto, campeen, á sus anchas, con entera libertad. Pero
entre nosotros no es así.
Generalmente, el niño que'jno asiste á
clase, le vereis vagar por caminos ó to¬ rrentes destrozándose el vestido; apren¬ diendo palabras y costumbres nada edifi¬ cantes, y haciendo todo lo posible para que la enfermedad le acometa; que de
otra manera tal vez se hubiera librado de
ella.
Desearíamos, por tanto, que las Auto¬ ridades superiores, se fijaran otra vez en esto del cierre de las escuelas, y teniendo en cuenta lo que llevamos expuesto, dis¬ pusieran lo que su superior ilustración y buen criterio les aconsejara.

El joven que cayó de lo alto de la es¬ calera, y de cuya desgracia tienen ya no¬ ticia nuestros lectores, á pesar de haber esperimentado una ligera mejoría en los primeros días que siguieron al de la caida, falleció el próximo pasado domingo.
El infeliz era padre de familia.
R. I. P.

— r-'

-v>

—•

Un viento N. E. huracanado desenca¬
denóse el miércoles de esta semana, y causó destrozos de consideración en el
arbolado, muy particularmente en el oli¬ var, cuyas ramas inclínanse al peso de las aceitunas que sostienen.
Dícennos que dá lástima contemplar tanta rama desgajada en las inmediacio¬ nes de la Torre, en el Puerto.
■Y

nión, no podemos menos que unir nuestra voz á la de todos los que censuran dichas obras, pues nos parece justísima la censu¬ ra y por diferentes motivos.
Para que nuestros lectores puedan for¬ marse una idea, bastará decirles que se
ha ensanchado el camino de la Torrente¬
ra con perjuicio del cauce del torrente y que se ha unido dicho camino al que con¬ duce á la población por el Fossaret por medio de un alto dique que, naturalmen¬ te, ha de obstruir el paso á las aguas y ha de causar perjuicios de consideración al público y á aquellos vecinos en parti¬
cular.
*
A última hora hemos sabido que el Ayuntamiento, á consecuencia de estas mismas quejas, se constituyó en dicho punto para examinar la cuestión sobre el terreno y resolvió rectificar dichas obras á fin de aminorar los perjuicios causados por ellas á los vecinos colindantes.
Así lo esperábamos de la rectitud que sabemos anima ánuestros representantes. Lo que importa es que la reparación se haga pronto, no sea que una nueva tem¬ pestad se lleve las obras antes de rectifi¬
carlas.
El distinguido joven geólogo, Mr. Nolan, que á fines de Setiembre tuvo que suspender sus estudios y regresar á París para tributar los últimos obsequios á su anciano padre, se halla otra vez entre no¬ sotros. Llegado el lúnes de Valencia, mar¬ chó inmediatamente á Ruñóla para seguir sus trabajos de investigación; el mártes estudió el valle del Coll, y al anochecer, le vimos en casa de nuestro amigo y afi¬
cionado á dicha ciencia D. José Rullan
presbítero. El miércoles, arrostrando una tempestad deshecha y nevadas las monta¬ ñas, emprendió el camino del Puerto, el valle de sa Figuera, Baliix, Moncaire y Munnaber, á fin de continuar sus afanosos
estudios.

fabricadas, cantidad de aceite producido por estas, la que se destine al consumo particular y al depósito, con espresión del nombre de los propietarios y compradores, caso de que alguno de ellos haya vendido el todo ó parte de aque¬ llas; debiendo ser al propio tiempo responsa¬
bles de satisfacer los derechos de consumos
por las cantidades de aceite que, por no llegar á la cifra que previene la instrucción del ramo, no puede autorizarse depósito.
Acordó igualmente proponer para mayores contribuyentes para la formación de la Junta municipal del censo á los señores siguientes:
Por el concepto de territorial D. Antonio Bernat-Verí y Ripoll;
Por el de industrial D. José Marqués y May°i;
Por el de comercio D. Guillermo Bernat y
Sancho y como personas aptas para esta clase de trabajos D. Pedro Coll y Estades y don Francisco Canals y Mayol Pbro., ambos pro¬ fesores de instrucción primaria; D. José Llanibías y Llompart notario; D. Jaime Sastre Joy, D. Antonio Bauzá Pons y D. José Pastor Castañer Pbros. y vicarios de esta parroquia.
Sesión del día 21.
Pedir á la Excma. Diputación Provincial una subvención para las obras que son necesa¬ rias ejecutar en el camino del Barranch y po¬ der terminar las emprendidas en la disecación de la huerta de abajo.
Que la matanza de los cerdos para consumo público empiece á las doce de la mañana en vez
de las dos de la tarde como se hacía.
Que la sesión ordinaria que celebra semanal¬ mente este Ayuntamiento se verifique el juéves en lugar del viérnes.
Que la escuela privada de niños de la Huer¬
ta sea trasladada á otro local inmediato al que
ocupa hoy.
Sesión del día 27.
Disponer que se corten las ramas de los ár¬ boles, troncos y demás estorbos en las vias pú¬ blicas hasta la altura de tres metros del piso,
dentro del término de ocho días.
Autorizar á los vecinos del camino del JRòst
á que hagan el desmonte que solicitan entre la propiedad de Pedro Juan Coll y el predio Son Angeláis.
Admitir la dimisión al sepulturero de este Cementerio y publicar la vacante para que los aspirantes presenten sus solicitudes dentro el
término de un mes.
Levantar un plano del Cementerio en que se haga constar las sepulturas y sus dueños.

Y los hortelanos no han sido más afor¬

Con hombres del temple y decidida vo¬

SÓLLER."!mprenta de Juan Marqués.

4

SÓLLER.

El Jurado para adjudicar el premio se com- dicina y Cirugía, de Jurisprudencia y Legisla¬

■ ABRIL 1888.
EXPOSICIÓN UNIVERSAL DE BARCELONA.

; pondrá de cinco individuos designados por la
i Academia de Bellas Artes de esta ciudad. El
| premiado deberá dejar dos colecciones en el lo-

| cal de la Exposición, las cuales quedarán de

El Consejo general de la Exposición, consi¬ propiedad del Ayuntamiento.

derando que con la celebración de la misma

4.o Abrir un certamen para premiar las

deben coincidir la exhibición de las fuerzas in¬ mejores Guías de Cataluña en general y de

telectuales de Cataluña en todas sus manifes¬ Barcelona y sus alrededores en particular, pa¬

taciones durante el presente siglo, y la visita ra el conocimiento de nuestro país bajo todos

de cuanto es digno de ser conocido en las cua¬ ; aspectos, con arreglo al adjunto programa se-

tro provincias del antiguo Principado, así en el | halado de número 2.

.

•

orden de la Naturaleza como en el monumen¬

Barcelona, Julio de 1887.—El Alcalde Pre¬

tal, en el artístico y en el industrial, ha acor¬ sidente, Francisco de P. Rius y Taulet.-—El Se¬

dado lo siguiente:

cretario General, Eugenio Serrano de Casanova

1.° Reunir en uno de los pabellones del lo¬

PRIMERO.

cal de la Exposición: l.° Una selecta colección

El consejo general ha acordado abrir un cer¬

de las obras, sean originales, sean traducciones tamen para la formación de un Diccionario bio-

■de mérito, debidas á la pluma de escritores ca¬ bibliográfico de los escritores y arriscas cata¬

talanes, y que se hayan publicado en España ó lanes del presente siglo, bajo las condiciones

fuera de ella en el presente siglo; adicionada siguientes:

1.acon todas las demás obras y escritos que du¬

La obra deberá contener, respecto á ca¬

rante el propio período se hayan impreso ó edi¬ da autor, una sencilla noticia del lugar y fecha,

tado en Cataluña. 2.° Otra selecta colección de si es conocida, de su nacimiento; y si el autor

todos los trabajos artísticos debidos también á hubiere fallecido, del lugar y fecha de su muerte;

hijos de Cataluña ó á personas que en ella los la de aquellos actos de su vida que más directa¬

hayan producido ó publicado durante igual pe¬ mente se relacionen con la publicación de sus

ríodo, -ora conste en simples manuscritos como obras; lina idea exacta, pero sumaría, del con¬

antiguamente las fiestas musicales, ora en di¬ tenido de cada una, de su plan y del lugar y

bujos, grabados, litografías ú otro medio mecᬠfecha de sus ediciones, y cuantos otros datos

nico de reproducción, ora en trazados lineales, puedan ser de interés bibliográfico. El autor

como planos arquitectónicos, etc., etc.

deberá abstenerse de apreciaciones de cualquie¬

A este efecto el Consejo invita á los autores ra especie sobre aquellos actos, y de toda crí¬

2.ay editores de estas obras y trabajos, á los im¬ tica de las ideas y doctrinas.

presores, á los libreros y á los particulares que

El premio consistirá en la cantidad de

tengan ejemplares de unas y otros, á que antes 2,500 pesetas y en ia impresión de la obra, de

de l.o de febrero delaño próximo se sirvan pre¬ de la pual se regalarán cien mil ejemplares al

sentar uno en la Secretaría general, que les li¬ autor. Este conservará sil propiedad; pero no

brará recibo de él; y expresar si, terminado el podrá publicar ninguna otra edicción, de sil

período de la Exposición, quieren recogerlos, ó cuenta, hasta que quede agotada en óus nueve

por el contrario, destinarlos á que formen par¬ décimas partes la primera. Podrá, además, con¬

te de una Biblioteca que en lo sucesivo quede cederse un accésit en la cantidad de mil pesetas,

franqueada al público en un local del Parque, si hubiere una obra que se acerque mucho en

23.° 3.aencualcasoelnombredeldonadorseescribi¬ méritoálapremiada.

rá, con la designación de las obras regaladas,

Los trabajos que aspiren al premio de¬

en mi álbum que se coloque en el local de la Bi¬ berán quedar presentados en la Secretaría ge¬

blioteca para ser examinado por las personas neral de la Exposición por todo el día l.o de

que la visiten.

agosto de 1888 y estar formados por medio de

Confía el Consejo que á esta invitación res¬ papeletas separadas para cada autor, reunidas

ponderán con entusiasmo cuantas personas se por riguroso órden alfabético y llevando cada

se interesan por el buen nombre y por la reivin¬ una al dorso un mismo signo convencional. Es-

dicación de la importancia intelectual ue Cata¬ | te signo, y un lema especial deberán escribirse

luña.

en la primera hoja de la obra y repetirse en la

4.aAbrir un certamen para la formación cubierta del pliego cerrado que contenga el

de un Diccionario bio-bibliográfico de los escri¬ nombre del autor. Éste perderá el derecho á la

tores y artistas catalanes del presente siglo, opción al premio desde el momento que sea co¬

bajo las condiciones que se espresan en el pro¬ nocido su nombre antes de la apertura de dicho

ción, de Bellas Artes y de Santo Tomás de Aquino, Facultades de la Universidad, Escue¬ las de Bellas Artes, Arquitectura, Ingenieros Industriales y Náutica, Instituto de 2.a ense¬
423561...aaañanzayClaustrodeProfesoresdelSeminario
Conciliar, Escuela Normal y Conservatorio de Música del Liceo. Se p'edirá al General gober¬ nador militar, al Jefe de Estado Mayor y á los Subinspectores de Artillería é Ingenieros, que juntos designen dos Vocales, en representa¬
ción del arte militar. Se invitará al Excmo. é
limo. Sr. Rector de esta Universidad Literaria
á que acepte la Presidencia del Jurado.
3ÏDGKVJIMIDO.
El consejo general, deseoso de contribuir á que se generalice el conocimiento de las fuerzas económicas, de las riquezas científicas, litera¬ rias y artísticas, y de los lugares mas intere¬ santes bajo diversos aspectos que encierra Ca¬ taluña, ha acordado abrir bajo las siguientes condiciones un ¡concurso para premiar las dos mejores Guías que describan, una de ellas Bar¬ celona y sus alrededores, y la otra el resto de Cataluña bajo los aspectos geográfico, históri¬ co, monumental, científico, artístico, agrícola, marítimo, industrial, mercantil, administrati¬
vo y de costumbres generales y locales. El premio para cada Guía consistirá
en la cantidad de 1,500 pesetas, y podrá con¬ cederse un accésit de 750, si alguna obra lo me¬ reciere ajuicio del Jurado.
Podrán optar al premio todas las Guías que se publiquen desde esta fecha hasta l.° de enero de 1888. Los autores que aspiren á ob¬ tenerlo, deberán presentar antes de la última citada fecha diez ejemplares de su obra en la Secretaría general del Consejo.
Para que puedan adjudicarse el premio y el accésit, las obras deberán sobresalir por las siguientes condiciones-, riqueza y exactitud de noticias, claridad y elegancia del estilo; buen método de exposición; perfección en las lámi¬ nas, si las hubiere; buen gusto en la parte tipo¬ gráfica y encuadernación, y baratura del precio.
Compondrán el Jurado para calificar las obras un Delegado del Consejo en calidad de Presidente, y los Presidentes ó quienes hagan sus veces, de las siguientes Corporaciones: Real Academia de Buenas Letras; Academia de Bellas Artes; Instituto Agrícola Catalán de San Isidro; Fomento de la Producción Na¬ cional; Fomento de la Producción Española;
Asociaciones catalanas de excursiones artísti¬
cas y de excursiones Catalanas, y Ateneo Bar¬
celonés.
Los autores de las obras que obtengan

grama adjunto, señalado de número 1.

pliego en la sesión solemne que se celebrará el el premio ó el accésit, deberán entregar al Con¬

Reunir igualmente en uno de los pabe¬ día de la distribución de los premios á los ex¬ sejo general, antes de recibir la recompensa

llones del local de la Exposición los libros des¬ positores.

obtenida, cuarenta ejemplares más de ellas pa¬

criptivos y las láminas representativas de las

Atendido el carácter enciclopédico de ra que se distribuyan entre las cuatro Diputa¬

comarcas ó lugares más uotrbles de Cataluña, la obra, el Jurado se compondrá de individuos ciones provinciales y los Ayuntamientos de las

de sus monumentos históricos ó artísticos, de las obras eje arte que existan en sus Museos, de los
establecimientos industriales más importantes

nombrados en número de 2 por cada una de las Corporaciones siguientes: Academias de Bellas Letras, de Ciencias Naturales y Artes, de Me¬

cabezas de partido judicial de Cataluña. El premio se adjudicará lo más tarde
dentro del més de abril del año próximo.

que haya en su territorio, etc., etc., para que

puedan ser fácilmente examinados por cuantos

visiten la Exposición.

En su consecuencia, invita igualmente el

Consejo á cuantas personas posean libros ó lá¬

minas de esta especie, á que se sirvan presen¬

tar un ejemplar antes de l.o de febrero próxi¬ mo en la Secretaría del Consejo general, en la forma y bajo las condiciones expresadas en el

número l.o, y al hacer esta invitación no duda

de que será favorablemente acogida por todos los amantes de este país que comprendan cuán

Las hay de todos precios y tamaños en

grande interés existe en que sea conocida Ca¬ taluña bajo todos sus aspectos para ser justa¬

la tienda de artículos de escritorio de Juan

mente juzgada y apreciada. Además se ofrece un premio de dos mil pese¬
tas al fotógrafo que antes de la propia fecha

Marqués Árbona. iasi

17.—SdULSSM.

presente la mejor y más completa colección de

vistas de cuanto notable encierra Cataluña en

los conceptos antes indicados.